Hoy aprendí sobre derrotas en la amistad, en el amor y la en vida. Da la casualidad que hoy —además— aprendí que se puede querer a más de 1 mujer a la vez y que no siempre se pueden tener ambas.
También aprendí a que puedes obtener refresco gratis si dices las palabra adecuadas a la persona adecuada en el restaurante de comida rápida, también el adecuado. Hoy aprendí 2 palabras en francés y 3 en español; aprendí a hacer una caricia nueva y aprendí sobre mí que aún quedan lugares donde un simple beso me genera inmensas cantidades de cosquillas y un poco de felicidad.
Hoy aprendí que hoy sigo esperándote, igual que como ayer. Aprendí que me duele mentirte y duele que me mientas, pero ¡qué diablos, me gusta tenerte cerca cuando tomo cerveza y cuando no hago nada o lo hago todo!
Hoy aprendí la vergüenza de dejar salir un gas frente a ti y que no me gustan tus uñas largas, cuando accidentalmente las clavas en mi espalda.
Válgame, hoy he aprendido bastante.