Estimada Erzebeth, gracias a vos.
A pesar de lo que digan, yo también creo que es mejor votar que no hacerlo. Así por lo menos damos el claro mensaje que creo en la democracia, que tengo capacidad de dicernimiento (aunque sea en lo menos malo) y por un principio que aprendí en El Salvador de una persona muy humilde: mejor voto, así después podré aunque sea quejarme, porque quien no participa que despúes no hable paja.
A mí también me ha decepcionado mucho esta campaña política, precisamente por lo mismo que apuntas. Yo dije, al primero que lance una campaña sucia votaré en su contra. Lo mantengo.
En política, como todo en la vida, pensar que puedan existir santos es imposible, cuando no idealista. Por eso pretender que la corrupción empezó todo por un sólo fenómeno me parece que es un principio reduccionista, instrumental y además demagógico. No defiendo a ninguno de los políticos, pero igual criticaría a quien "levante" un muerto con fines electoreros para indicar que es su culpa tal o cual problema.
Estoy apuntado al "voto útil", no me preocupa literalmente el continuismo con los Arias... de todas maneras hace ocho años que no teníamos un presidente (ni con Abel ni con Miguel Angel), pero si hay algo que no soporto son las posturas estudiadas, cuasi-actorales, los discursos aprendidos, la ausencia de criterio y la falta de opinón propia, y un precandidato que se deja manipular (no ir a los debates y decir que es clase media, por ejemplo). Por lo tanto, más allá de si es Laura Chinchilla o no, cualquiera que tenga esas características me parece falto de todo criterio y en política se les llama títeres. Eso para empezar. Pues existen algunas otras razones (como la política de focalizaciòn del gasto) que no tolero por principio ideologico. Además de un discurso pretendidamente social, que no tiene nada de propuestas estructurales de cambio (ninguno de los otros lo tiene, pero tampoco hacen alarde de ello), así como algunos "logros" que son muy cuestionables.
Que Laura seguirá el arismo... te aseguro que Johnny y Berrocal también lo harían, ¿quién se permitiría quitar lo bueno que alguien ha hecho? sin embargo, más allá de la "epidermis" publicitaria, creo que en el país se juegan "modos" o "tipos" de política que dejan ver un transfondo ideológico, más o menos favorable o desfavorable para la población. Por lo tanto, doy crédito a aquel que muestra un camino menos malo, si se quiere, pero por lo menos no un modelo con el que definitivamente estoy en contra.
A pesar de lo que digan, yo también creo que es mejor votar que no hacerlo. Así por lo menos damos el claro mensaje que creo en la democracia, que tengo capacidad de dicernimiento (aunque sea en lo menos malo) y por un principio que aprendí en El Salvador de una persona muy humilde: mejor voto, así después podré aunque sea quejarme, porque quien no participa que despúes no hable paja.
A mí también me ha decepcionado mucho esta campaña política, precisamente por lo mismo que apuntas. Yo dije, al primero que lance una campaña sucia votaré en su contra. Lo mantengo.
En política, como todo en la vida, pensar que puedan existir santos es imposible, cuando no idealista. Por eso pretender que la corrupción empezó todo por un sólo fenómeno me parece que es un principio reduccionista, instrumental y además demagógico. No defiendo a ninguno de los políticos, pero igual criticaría a quien "levante" un muerto con fines electoreros para indicar que es su culpa tal o cual problema.
Estoy apuntado al "voto útil", no me preocupa literalmente el continuismo con los Arias... de todas maneras hace ocho años que no teníamos un presidente (ni con Abel ni con Miguel Angel), pero si hay algo que no soporto son las posturas estudiadas, cuasi-actorales, los discursos aprendidos, la ausencia de criterio y la falta de opinón propia, y un precandidato que se deja manipular (no ir a los debates y decir que es clase media, por ejemplo). Por lo tanto, más allá de si es Laura Chinchilla o no, cualquiera que tenga esas características me parece falto de todo criterio y en política se les llama títeres. Eso para empezar. Pues existen algunas otras razones (como la política de focalizaciòn del gasto) que no tolero por principio ideologico. Además de un discurso pretendidamente social, que no tiene nada de propuestas estructurales de cambio (ninguno de los otros lo tiene, pero tampoco hacen alarde de ello), así como algunos "logros" que son muy cuestionables.
Que Laura seguirá el arismo... te aseguro que Johnny y Berrocal también lo harían, ¿quién se permitiría quitar lo bueno que alguien ha hecho? sin embargo, más allá de la "epidermis" publicitaria, creo que en el país se juegan "modos" o "tipos" de política que dejan ver un transfondo ideológico, más o menos favorable o desfavorable para la población. Por lo tanto, doy crédito a aquel que muestra un camino menos malo, si se quiere, pero por lo menos no un modelo con el que definitivamente estoy en contra.