Una historia de una salidita sexosa con la doña, es un tema que puede ser tabú y difícil de entender para algunos; a ella le he hecho todo lo imaginable. Si a mí me hubieran preguntado por hacer algunas cosas hace algún tiempo las hubiera descartado, pero se han planteado de forma muy natural y las hemos adoptado en pareja.
De hecho una vez me llevé tremenda sorpresa porque mi doña es muy cerrada y cuesta mucho sacarla de lo que está acostumbrada. Llegamos a un hotel que ella había reservado para un cumpleaños mío, la reserva incluía un masaje en el spa, había jacuzzi en el lugar, etc. Esas varas son lo que a ella le gusta y yo la verdad lo disfruto aunque si por mí fuera pasaría de esas varas.
El masaje nos lo dieron desnudos, cuando pasamos al jacuzzi lo hicimos en bata y nos metimos también sin ropa. Nos ofrecieron una bebida caliente mientras estábamos en el jacuzzi (el lugar es frío), el tipo llegó a servir las bebidas y se fue (no sin antes verle las tetas a la doña de forma poco disimulada). El jacuzzi estaba en un área semi abierta pero muy privada.
Hacía frío, entonces las bebidas nos cayeron bien, empezamos a hablar sucio y a meter mano, ya en 15 minutos íbamos para la habitación.
Teníamos todos los juguetes afuera, listos para la acción. Estuvimos jugando un buen rato, le tapé los ojos, la llené de aceite, le di una continuación del masaje, la puse a mamar mi pene y el dildo realista con el que nos divertimos de vez en cuando (los mamaba alternados y al mismo tiempo) y la penetré igual.
Yo estaba templadísimo cuando me dijo "cambiemos". No entendí bien, a veces soy medio bruto, pero cuando me di cuenta me tenía puestas las prensas de los pezones, me tapó los ojos, me puso aceite y empezó a masajear. Se concentró en mi pecho, estimuló mis pezones con las prensas y con la lengua. Yo sentía como tomaba el presemen de la punta de mi pene lo ponía en mis labios y luego me besaba. Luego el masaje paso a mis testículos, ella sabe que eso me encanta, al mismo tiempo lamía mi pene y de vez en cuando tomaba una de las prensas que tenía en los pezones y estiraba un poco. De pronto se apartó un momento y regresó a la acción, el masaje bajó de los testículos al ano y pude sentir que se había puesto un dedal de esos texturizados que venden en las sexshops. Normalmente yo los uso con ella vaginal o anal pero esta vez pude sentir como me masajeaba la entrada del ano y lo metía poco a poco.
Ella estaba entre mis piernas subía a besarme la boca y me preguntaba si me gustaba lo que estaba haciendo. Yo contestaba por puro instinto " sí mami siga" y sentía como entraba, salía y giraba el dedito. En eso se apartó de nuevo y luego sentí como me pasaba el dildo por mi cuello y las mejillas, yo reaccioné como para agarrarlo con la boca y en eso me dijo "jueputa perro, te gusta!". Me lo puso en la boca apenas con la punta adentro, yo jugué con mi lengua en el gorro del dildo y me preguntó: "le gusta papi?", no contesté porque seguía ocupado. Me la sacó de la boca y le pregunté: "qué pasa, lo estoy haciendo mal?". Se reía y me dice, "no, más bien parece que te gusta más de la cuenta". Luego me la metió de nuevo en la boca, sentí como me atragantaba y ella se reía, "ve lo que siento yo cuando se la mamo" me decía. La sacó, me la puso de medio lado y me dijo que lamiera, pude sentir que ella hacía lo mismo. Luego apartó el dildo y se quedó besándome un buen rato.
Se apartó de nuevo, regresó a masajear el perineo, pensé que iba a volver a entrar con el dedal, pero no, empezó a meter el dildo! En eso me dice: " ya tiene dentro la puntita, rico?". Yo no podía ni hablar! "Rico?" Volvió a preguntar. " Sí, siga mami",el puto instinto de nuevo. Apenas pude responder. Pude sentir como la empujaba un poco más, "que rico se ve papi", me decía. Luego sentí que se apartó de nuevo, se acomodó de forma que me puso el culo en la cara, dándome la espalda y seguía jugando con el dildo. Yo le chupaba las nalgas, se acomodó de nuevo, le abrí las nalgas y empecé a hacerle un beso negro. Podía sentir cada detalle del dildo en mi culo y la muy puta me empezó a chupar la verga. Sentí que me puso la vagina en la cara y empecé a chupar. Era una mojazón total!
Sentía que la verga se me iba a reventar mientras nos mamábamos, en eso me dice "bruto papi, la tiene casi toda dentro" (se refería al dildo), yo ni cuenta me había dado! Así como me tenía me cabalgó dándome la espalda, cuando sentí que mi verga le entró me destapé los ojos para ver cómo mi verga entraba entre esas nalgotas. Estaba penetrando y me tenía penetrado al mismo tiempo! Pocas veces he estado en una situación así, podía sentir cada latido, no sé cuánto tiempo pudimos haber pasado así.
Poco a poco empezó a sacar el dildo, podía sentir cada vena de ese hijueputa pene esculpido en silicón, por mis movimientos ella instruyó que estaba por regarme y se detuvo. Relajó la vara un toque y lo terminó de sacar despacio. Mientras hacía eso pude sentir como ella se regaba, justo cuando me lo terminó de sacar. Era un calor delicioso lo que se sentía dentro de esa vagina. De verdad que estaba en modo perra ese día, porque se bajó de la cama, se sentó en un sillón y me dijo venga deme la leche en las tetas.
Me puse de pie enfrente de ella, abrí mis piernas para alinear la altura del pene a sus tetas, ella se sentó bien recta y quedamos alineados. Yo me puse saliva en mi mano derecha y me empecé a masturbar. Todo era muy loco, me penetró, me la cogí y ahora estaba ahí de pie con las piernas abiertas jalándomela. Mi mano izquierda fue a su hombro derecho, ella con una mano fue a masajear mis huevos y los apretó tan rico que me regué deliciosamente. Ella con su otra mano apuntó hacia sus tetas de modo que mi leche quedó en ellas.
Si por mí fuera ahí hubiera quedado la cosa pero la puta tenía el dildo en el sillón y se lo estaba metiendo con una mano y con la otra cogía semen y se excitaba los pezones. Me acerqué y me puse de rodillas frente al sillón, me agarró del pelo y me puso a chuparle las tetas, llenas de mi leche! Debo reconocer que esas putadas me encantan. Mi puta personal se excitó de nuevo y lo que se me ocurrió fue meterle un dedo en el ano porque sé que eso la mata. Efectivamente! Con sólo que entré e hice un par de giros ya estaba vuelta loca, con los ojos en blanco y chorreando.
De hecho una vez me llevé tremenda sorpresa porque mi doña es muy cerrada y cuesta mucho sacarla de lo que está acostumbrada. Llegamos a un hotel que ella había reservado para un cumpleaños mío, la reserva incluía un masaje en el spa, había jacuzzi en el lugar, etc. Esas varas son lo que a ella le gusta y yo la verdad lo disfruto aunque si por mí fuera pasaría de esas varas.
El masaje nos lo dieron desnudos, cuando pasamos al jacuzzi lo hicimos en bata y nos metimos también sin ropa. Nos ofrecieron una bebida caliente mientras estábamos en el jacuzzi (el lugar es frío), el tipo llegó a servir las bebidas y se fue (no sin antes verle las tetas a la doña de forma poco disimulada). El jacuzzi estaba en un área semi abierta pero muy privada.
Hacía frío, entonces las bebidas nos cayeron bien, empezamos a hablar sucio y a meter mano, ya en 15 minutos íbamos para la habitación.
Teníamos todos los juguetes afuera, listos para la acción. Estuvimos jugando un buen rato, le tapé los ojos, la llené de aceite, le di una continuación del masaje, la puse a mamar mi pene y el dildo realista con el que nos divertimos de vez en cuando (los mamaba alternados y al mismo tiempo) y la penetré igual.
Yo estaba templadísimo cuando me dijo "cambiemos". No entendí bien, a veces soy medio bruto, pero cuando me di cuenta me tenía puestas las prensas de los pezones, me tapó los ojos, me puso aceite y empezó a masajear. Se concentró en mi pecho, estimuló mis pezones con las prensas y con la lengua. Yo sentía como tomaba el presemen de la punta de mi pene lo ponía en mis labios y luego me besaba. Luego el masaje paso a mis testículos, ella sabe que eso me encanta, al mismo tiempo lamía mi pene y de vez en cuando tomaba una de las prensas que tenía en los pezones y estiraba un poco. De pronto se apartó un momento y regresó a la acción, el masaje bajó de los testículos al ano y pude sentir que se había puesto un dedal de esos texturizados que venden en las sexshops. Normalmente yo los uso con ella vaginal o anal pero esta vez pude sentir como me masajeaba la entrada del ano y lo metía poco a poco.
Ella estaba entre mis piernas subía a besarme la boca y me preguntaba si me gustaba lo que estaba haciendo. Yo contestaba por puro instinto " sí mami siga" y sentía como entraba, salía y giraba el dedito. En eso se apartó de nuevo y luego sentí como me pasaba el dildo por mi cuello y las mejillas, yo reaccioné como para agarrarlo con la boca y en eso me dijo "jueputa perro, te gusta!". Me lo puso en la boca apenas con la punta adentro, yo jugué con mi lengua en el gorro del dildo y me preguntó: "le gusta papi?", no contesté porque seguía ocupado. Me la sacó de la boca y le pregunté: "qué pasa, lo estoy haciendo mal?". Se reía y me dice, "no, más bien parece que te gusta más de la cuenta". Luego me la metió de nuevo en la boca, sentí como me atragantaba y ella se reía, "ve lo que siento yo cuando se la mamo" me decía. La sacó, me la puso de medio lado y me dijo que lamiera, pude sentir que ella hacía lo mismo. Luego apartó el dildo y se quedó besándome un buen rato.
Se apartó de nuevo, regresó a masajear el perineo, pensé que iba a volver a entrar con el dedal, pero no, empezó a meter el dildo! En eso me dice: " ya tiene dentro la puntita, rico?". Yo no podía ni hablar! "Rico?" Volvió a preguntar. " Sí, siga mami",el puto instinto de nuevo. Apenas pude responder. Pude sentir como la empujaba un poco más, "que rico se ve papi", me decía. Luego sentí que se apartó de nuevo, se acomodó de forma que me puso el culo en la cara, dándome la espalda y seguía jugando con el dildo. Yo le chupaba las nalgas, se acomodó de nuevo, le abrí las nalgas y empecé a hacerle un beso negro. Podía sentir cada detalle del dildo en mi culo y la muy puta me empezó a chupar la verga. Sentí que me puso la vagina en la cara y empecé a chupar. Era una mojazón total!
Sentía que la verga se me iba a reventar mientras nos mamábamos, en eso me dice "bruto papi, la tiene casi toda dentro" (se refería al dildo), yo ni cuenta me había dado! Así como me tenía me cabalgó dándome la espalda, cuando sentí que mi verga le entró me destapé los ojos para ver cómo mi verga entraba entre esas nalgotas. Estaba penetrando y me tenía penetrado al mismo tiempo! Pocas veces he estado en una situación así, podía sentir cada latido, no sé cuánto tiempo pudimos haber pasado así.
Poco a poco empezó a sacar el dildo, podía sentir cada vena de ese hijueputa pene esculpido en silicón, por mis movimientos ella instruyó que estaba por regarme y se detuvo. Relajó la vara un toque y lo terminó de sacar despacio. Mientras hacía eso pude sentir como ella se regaba, justo cuando me lo terminó de sacar. Era un calor delicioso lo que se sentía dentro de esa vagina. De verdad que estaba en modo perra ese día, porque se bajó de la cama, se sentó en un sillón y me dijo venga deme la leche en las tetas.
Me puse de pie enfrente de ella, abrí mis piernas para alinear la altura del pene a sus tetas, ella se sentó bien recta y quedamos alineados. Yo me puse saliva en mi mano derecha y me empecé a masturbar. Todo era muy loco, me penetró, me la cogí y ahora estaba ahí de pie con las piernas abiertas jalándomela. Mi mano izquierda fue a su hombro derecho, ella con una mano fue a masajear mis huevos y los apretó tan rico que me regué deliciosamente. Ella con su otra mano apuntó hacia sus tetas de modo que mi leche quedó en ellas.
Si por mí fuera ahí hubiera quedado la cosa pero la puta tenía el dildo en el sillón y se lo estaba metiendo con una mano y con la otra cogía semen y se excitaba los pezones. Me acerqué y me puse de rodillas frente al sillón, me agarró del pelo y me puso a chuparle las tetas, llenas de mi leche! Debo reconocer que esas putadas me encantan. Mi puta personal se excitó de nuevo y lo que se me ocurrió fue meterle un dedo en el ano porque sé que eso la mata. Efectivamente! Con sólo que entré e hice un par de giros ya estaba vuelta loca, con los ojos en blanco y chorreando.
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