En un mundo que avanza a pasos agigantados en tecnología y ciencia, ¿por qué parece que nos quedamos atrás cuando se trata de la inclusión y el entendimiento del autismo? Hoy, en el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, el mensaje es claro pero, ¿lo estamos escuchando?
Desde las altas esferas de la ONU nos llega un llamado no solo a la reflexión, sino a la acción.
Se habla de celebrar las contribuciones de las personas con autismo, pero, ¿qué hay de las barreras que aún enfrentan? Educación, empleo, inclusión social... palabras bonitas que, sin acciones concretas, se quedan en el aire. El mensaje de António Guterres, Secretario General de la ONU, no podría ser más directo: los gobiernos deben invertir en sistemas de apoyo comunitario y educación inclusiva. Pero, ¿están realmente dispuestos a hacerlo?
¿Qué tal si en lugar de solo iluminar de azul los edificios, iluminamos nuestras mentes y actitudes?
El autismo no es solo un tema de un día; es una realidad diaria para millones de personas que merecen más que reconocimiento: merecen derechos, oportunidades y respeto.
Así que, mientras compartimos hashtags y nos sumamos a campañas, recordemos que la verdadera concienciación comienza con acciones y no solo con palabras.
Desde las altas esferas de la ONU nos llega un llamado no solo a la reflexión, sino a la acción.
Se habla de celebrar las contribuciones de las personas con autismo, pero, ¿qué hay de las barreras que aún enfrentan? Educación, empleo, inclusión social... palabras bonitas que, sin acciones concretas, se quedan en el aire. El mensaje de António Guterres, Secretario General de la ONU, no podría ser más directo: los gobiernos deben invertir en sistemas de apoyo comunitario y educación inclusiva. Pero, ¿están realmente dispuestos a hacerlo?
¿Qué tal si en lugar de solo iluminar de azul los edificios, iluminamos nuestras mentes y actitudes?
El autismo no es solo un tema de un día; es una realidad diaria para millones de personas que merecen más que reconocimiento: merecen derechos, oportunidades y respeto.
Así que, mientras compartimos hashtags y nos sumamos a campañas, recordemos que la verdadera concienciación comienza con acciones y no solo con palabras.