Mmmm, pues aunque tengo un temperamento muy fuerte y volátil, mis instintos homicidas los enfoco de otra manera, he descubierto que quien me quita la paz, es porque quiere tener poder sobre mi, nada que nos saque de centro, de manera regular, debe tener tanta relevancia en nuestras vidas, bien sea una relación, un trabajo, una persona o la actitud de una persona. Yo no cedo el control de mi vida. Intento...mmm...analizar para reaccionar, y hacer todo lo contrario de lo que esa persona espera de mi. A veces, hay que saber seleccionar las batallas, ja ja. Así, que no he querido enterrar a nadie, porque, nadie vale tanto la pena ni me controla a ese punto. Conste, no es que no hay personas que me opaquen el día, o que no merezcan desaparecer, pero en ésta vida, esas son las "hierbas malas" ja ja.
¿Cuándo fue la última vez que le dieron una muestra de afecto inesperada?
