La unión sindical confirmó que el lunes 25 de junio habrá una huelga, que cataloga como la primera contra el gobierno de Carlos Alvarado, además pretende paralizar el país ese día.
Como lo informó DIARIO EXTRA, los gremios decidieron tomar acciones de protesta contra el proyecto Ley 20.580 Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, llamado por ellos paquetazo fiscal, que golpeará a la población costarricense.
Aseguran que no es un simple berrinche a favor del empleo público, sino que buscan defender los derechos de la clase trabajadora, tanto del sector público como privado.
Esto luego de que el Poder Ejecutivo no quiso abrir la posibilidad de establecer una mesa de diálogo para elaborar propuestas conjuntas de solución al déficit fiscal que afecta al país.
Los líderes dejaron claro que el movimiento será distinto al del 25 de abril anterior, de manera que no habrá paro sólo en el área central, sino en todas las regiones, ocasionando afectación en diversos servicios públicos, entre ellos la educación y atención médica en clínicas, hospitales y Ebais.
“Rechazamos las medidas arbitrarias del gobierno Piza-Alvarado. Este 25 de junio tenemos huelga desde horas de la mañana, en este caso en diferentes puntos del país habrá manifestaciones, de manera que pedimos comprensión a la ciudadanía”, señaló Martha Rodríguez, secretaria general adjunta de la Unión Nacional de Empleados de la Caja y Seguridad Social (Undeca).
Los sindicatos indicaron que el objetivo es generar impacto en Costa Rica, de manera tal que habrá huelga en todas las provincias con manifestaciones y actividades que definirán en los próximos días.
El objetivo es que los trabajadores de todo el territorio nacional tengan la oportunidad de expresar su oposición al gobierno.
“Con las conversaciones que hemos tenido los sindicatos, esperamos que ese lunes Costa Rica amanezca paralizada. En centros de salud solo atenderemos las emergencias hospitalarias y zonas de encamados, todo el sector educativo se suma a la huelga, no habrá clases ese día”, manifestó Rodríguez.
“También se nos suma el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), las universidades, la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), algunas municipalidades, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y esperamos que los trabajadores de ferrocarriles se sumen”, añadió.
Respecto a las citas médicas que se vayan a suspender, dijo que no hay alternativa, tomando en consideración el problema que puede generar el combo fiscal, sin embargo espera que se puedan reprogramar a la brevedad.
Consultado sobre la participación del Sindicato de Trabajadores del INA (Sitraina), Ricardo Jara, líder de la organización, adujo que están potenciando cada vez más la participación, para que en la sede central se unan con otras instituciones cercanas con el fin de tomar y bloquear la autopista General Cañas.
También, con apoyo de otros sectores, cerrarían la ruta 27. “Hacemos un llamado a los docentes, para que los cursos no se impartan ese día, vamos a suspenderlos y hacer presión para que ese paquete de impuestos no pase, estamos coordinando con las 9 sedes regionales, centros de formación y talleres públicos”, puntualizó.
SHOW MEDIÁTICO
Dos reuniones se realizaron entre los sindicatos, Marvin Rodríguez, vicepresidente de la República; Rodolfo Piza, ministro de la Presidencia; y Steven Núñez, ministro de Trabajo y Seguridad Social. Sin embargo, las partes aseguraron que no hubo acuerdos.
Rodríguez mantuvo la posición de la administración, al indicar que el proyecto 20.580, el cual propone una serie de impuestos, tiene que ser aprobado sí o sí.
En la Confederación de Trabajadores Rerum Novarum (CTRN) tacharon de show mediático el accionar de estos representantes del gobierno.
Lenín Hernández, presidente de la CTRN, expresó que la administración los obligó a tomar las medidas de presión anunciadas porque “son intransigentes al no escuchar no solo a los sindicatos, sino que también a los solidaristas, cooperativistas y a la Iglesia católica”.
