Este es un buen ejemplo de como los medios, con toda su hablada de "fake news" son de verdad perniciosos para el debate público. Y más este deplorable medio.
Para cualquiera que pose sus ojos más allá de la visión del campanario de su pueblo, es obvio que puede resultar oneroso para una persona del cuerpo diplomático tener que gastar una significativa suma de dinero comprando abrigos. Eso, unido a otros gastos, dificulta la capacidad de la Cancillería de llenar los puestos ante representaciones diplomáticas de otros países.
De ahí la idea de apoyar a las personas nombradas en estos puestos con un estipendio para compra de este tipo de ropa, que deberán descartar al moment ode volver a Costa Rica.
Pero como en este país impera la ética de la galletica y se empeñan en ahorrar en estupideces, no hay duda que fue una buena oportunidad para este Diario de pacotilla de estimualr un escándalo.
Y el artículo es tan pedestre, que ni los susodichos periodistas se preguntaron si estra práctica común en otros países tropicales. Al menos para dar una visión más objetiva.
Pero todo se dejó para que la turba de descerebrados de siempre se indignara por leer sólo el titular. Que al parecer esl o único capaz que pueden leer.
Algo parecido sucedió con la entrevista a Román Macaya. Al final, la nota de la entrevista se centró en un hecho irrelevante en casy 50 mintos de entrevista. Macaya presentó el caso en los términos más claros: el problema de arreglo en la CCSS es que él carecía de cualquier palanca para plantarse ante lso sindicatos. Porque la Ley de Regulacion de las HUelgas está pésimamente escrita, y permite la impunidad de los huelguistas, dado que aún si se declarara ilegal, proceso que duraría varios meses, la reducción del sueldo no es retroactiva.
SI la gente usra más el cerebro y entendiera, dejaría de decir tanta estupidez en los medios.
