La primera vez que fui salÃ* asustado. Yo esperaba más el morbo de exhibición y ojalá encontrarme una pareja. La segunda vez deje que un maduro me la.chupara me temblaban las piernas. Al mismo tiempo me entraron ganas de ser cornudo de ver a mi esposa con un buen macho, ya de tanto meterme en esa fantasÃ*a me dieron ganas de probar uno para mÃ*. Al final cuando iba me dejaba hacer, entre más grandes o maduros mejor. La última vez que fui ya iba buscando un maduro, ojalá un poco barrigón con buena verga, encontré uno casi perfecto me deje hacer, me metió los dedos que rico, yo se la jale hasta que se rego. Después de eso me fui a encontrar con una mae del foro que me terminó cogiendo y yo gimiendo como nena en celo. Eso fue hace más de dos años. Y ahora quiero volver a que un maduro me haga suyo en el cine.