huyyyyy.....un abrazo para ti...yo perdí de una manera muy brusca a mi papá, no nos dejaron despedirnos, y si bien, ya han pasado 10 años, por las circunstancias y todo, ha costado mucho encontrar la paz, a éstas altura creo que uno aprende a vivir con ello, pero uno no olvida, queda ahí en el corazoncito. Yo al principio estaba enojada con Dios, hice luto un año, tanto en ropa como en mi vida, a lo indio hasta me corté el pelo(yo lo llevaba largo, porque a él le encantaba jugar con mi pelo-ahora no soporto que me toquen el pelo, no soy un french poodle para que me anden acariciando la cabeza :/-)...me dió incluso una depresión extraña donde sólo pasaba durmiendo, ahora entiendo muchas de mis razones, y hasta puedo razonarlas y explicarlas científicamente, pero la mente y el corazón, a veces no van de la mano. Diosito me jaló a su manera (como suele suceder), y pos ahí seguí. He aprendido que uno los ata sin querer, y que uno debe dejarlos ir a dónde están libres y en paz...pero en mi caso fué dificil, aún lloro, y alego, y por supuesto lo extraño a cada paso, cuando algo me ocurre, cuando debo tomar una desición, en mi caso es un dolor y pérdidas distintas, te cuento que yo he crecido como hija única porque fuí un "golazo" y mis hermanos me llevan muuuchos años, tonces mi relación con mis padres (que ya eran mayores), era sumamente especial, mi padre era mi cómplice, mi mejor amigo, mi compañero, además de mi progenitor...lo malo es que en mi "depre" descuidé un poco a mi viejita, que es lo único que me queda en la vida, eso hay que medirlo bien, aprende de mis errores, por dolor uno a veces lastima sin intención a otras personas cercanas, que amamos y nos aman, que lo único que quieren es darnos apoyo. No permitas que te hagan sentir culpable, es humano sentirse responsable de todo lo que nos afecta y lastima, pero a veces la razón de todo es, simplemente la voluntad de Dios. El tiempo, si bien no cura las heridas, las cicatriza lo suficiente para seguir adelante y disfrutar de otras oportunidades en la vida.