Pues eramos catolicos y como en mi familia somos personas relativamente bien educadas (todos somos profesionales, mis 2 papás son bilingues y yo y mis hermanas hablamos 3 idiomas) pues hicieron algo de investigación y como se dieron cuenta que la iglesia católica es una completa basura ahora son "cristianos nacidos de nuevo". Con la idea que la "verdadera iglesia de cristo no es la católica".
Yo como soy el más analítico de todos es quien se lo comió el nuevo movimiento ateo que ahora esta fuerte en estados unidos. Es un movimiento fuerte.
Hay encuestas que sostienen que "nunca ha habido tantos ateos en el mundo como hoy".
Jajajajaja. Que divertido como basurea a su propia familia, con razón quiere rechazarlos y negarlos como menciona tanto en otros post.
Lo verdaderamente preocupante, no es que sea ateo, más bien que falacia la suya el no decirle a su familia de antes por puro miedo, tanto que juega de ser superior, pensante y analítico y andaba con miedo. Pero eso explica bastante su odio hacia los creyentes por el miedo que tenía a la reacción de su familia, infundada por sus propios temores y creencias falsas.
Pero volviendo, lo verdaderamente preocupante, es que diga que el ateísmo es un movimiento y es un movimiento fuerte, eso es prácticamente decir que es una secta, que es una religión.
Ningún ateo necesita de otra persona para sentirse bien siendo ateo, si es eso necesario es porque su sistema de creencias es débil y es un cobarde.
Con respecto a esas encuentas, son más falaces, porque serán más en cantidad, pero no más en porcentual. Antes en la historia si habían cuatro personas, 1 no era creyente y solo eso era un 25% de ateos, ahora dicen que hay un 13%, que estadísticamente es menos que en otros momentos históricos. La proporción es lo importante, no la cantidad.
Con respecto a "su salida del closet", da igual, al único que le interesa y le causa "dicha", y también el que ve como si fuera un tabú el ateísmo es usted, seguro cree que es la gran cosa porque necesita la aceptación ajena, no entiendo el por qué celebrarlo.