Desafortunadamente los que no creen en él, buscarán pretextos para justificar sus actos y cuestionarán sus decisiones pensando que después de muertos nada pasará ni consecuencias que pagar por los males cometidos en vida.
Sobre el libre albedrío, Dios otorga libertad de decisión a los hombres para que ellos mismos por convicción hagan el bien sin imposición u obligación, nada indica que si hace el mal no la paga, al contrario, el libre albedrío actúa por si sola con el efecto de accion-reacción. Acciones buenas recibe retribución, acciones pecaminosas, castigos y sufrimientos; solo el arrepentimiento puro será motivo de regresar a la casa de Dios.