Me pregunto si la Iglesia Católica logrará sobrevivir luego de esta escalada de escándalos sexuales en las barbas del Papa y con personajes cercanos al "sumo pontífice". Aunque aquí no llegan mucho estas noticias, me da la impresión que los medios las autocensuran ante el poder económico y político de la Iglesia Católica. Ayer por ejemplo pasé por la Nunciatura, en el bulevar Rohrmoser, es impresionante, ocupa toda una cuadra.
"Pones música, te tragas el Viagra y ¡adelante!"
Un miembro del coro del Vaticano contrataba servicios sexuales de hombres jóvenes para el principal imputado en el caso de la Protección Civil italiana
MIGUEL MORA - Roma - 04/03/2010
Abusos sexuales en el coro de la catedral de Ratisbona que dirigió el hermano del Papa
Georg Ratzinger asegura que nunca tuvo conocimiento de casos de pederastia en el grupo entre 1964 y 1993
LAURA LUCCHINI - Berlín - 05/03/2010
"Pones música, te tragas el Viagra y ¡adelante!"
Un miembro del coro del Vaticano contrataba servicios sexuales de hombres jóvenes para el principal imputado en el caso de la Protección Civil italiana
MIGUEL MORA - Roma - 04/03/2010
Angelo Balducci, de 63 años, ex presidente del Consejo de Obras Públicas, encarcelado y principal imputado en la investigación de la millonaria corrupción de la Protección Civil italiana, puede ser acusado en breve por los jueces de un nuevo delito: explotación de la prostitución masculina.
Una nueva tanda de escuchas policiales, conocida ayer, revela que Balducci, Caballero de Su Santidad -el exclusivo club laico de la Curia Romana-, recurría con frecuencia a un intermediario nigeriano, Chinedu Thomas Ehiem, de 40 años, apodado Mike y cantor de la coral de la capilla Giulia de San Pedro, para contratar los servicios sexuales de hombres jóvenes, muchas veces seminaristas e inmigrantes sin papeles.
Ehiem y su ayudante Lorenzo Renzi, de 33 años, arreglaban los encuentros de Balducci a un ritmo pautado, cada dos o tres días. Ambos manejaban una red de jóvenes aspirantes a curas, y a veces reclutaban a extranjeros en busca de permiso de residencia. A uno de ellos, el influyente Balducci le prometió una gestión ante el Ministerio del Interior.
El poderoso ingegnere, casado y con dos hijos, atendía las llamadas de los proxenetas en las situaciones más incómodas, incluso si estaba en el palacio Chigi (sede de la Presidencia del Gobierno) o en una audiencia privada con un cardenal. En las 72 páginas que ocupan las interceptaciones, se lee que Ehiem le dice a Balducci sobre un candidato: "Angelo... no te digo más. Dos metros, 97 kilos, 33 años y completamente activo".
En llamadas sucesivas, el chulo daba menos detalles: "Tengo una situación de Nápoles". "Tengo una situación cubana". "Tengo a un alemán que acaba de llegar de Alemania". "Tengo dos negros". "Tengo al futbolista". "Tengo uno de El Abruzo". "Tengo al bailarín de la RAI".
Algunos de los muchachos asisten a seminarios y colegios eclesiásticos de Roma. Un día, Balducci preguntó: "¿Él, a que hora tiene que volver al seminario?". El 6 de diciembre pasado, Renzi le explica a uno de ellos su labor: "Pillarás hasta 2.000 euros... No me toques las pelotas. Te hace falta el dinero. Pones un poco de música, sacas la [inaudible], te tragas el Viagra, y ¡adelante!".
El cantor nigeriano fue despedido ayer del coro de la capilla Giulia por el cardenal Angelo Comastri. Fuentes vaticanas negaron que sea religioso o seminarista. La Giulia actúa en San Pedro en las ceremonias que no oficia el Papa, que se acompaña del coro de la Capilla Sixtina.
El fervor religioso de Balducci y la pervivencia en la sombra del poder de Giulio Andreotti se han revelado parte crucial del "sistema gelatinoso" denunciado por el juez de Florencia en el caso de la Protección Civil, que analiza los millonarios contratos adjudicados por sus dirigentes para el G-8 y otras emergencias y grandes eventos, civiles y religiosos. La amistad de Balducci con el viceministro Guido Bertolaso, jefe de la institución, fraguó durante el Jubileo de 2000 que ambos coordinaron. Ese éxito supuso el inicio de su escalada a la gloria bajo la protección de Gianni Letta, enlace de Berlusconi con el Vaticano, fiel de Andreotti y también Caballero de Su Santidad.
Abusos sexuales en el coro de la catedral de Ratisbona que dirigió el hermano del Papa
Georg Ratzinger asegura que nunca tuvo conocimiento de casos de pederastia en el grupo entre 1964 y 1993
LAURA LUCCHINI - Berlín - 05/03/2010
Crece día a día el escándalo sobre los abusos sexuales a menores en la Iglesia católica alemana. Hoy, nuevas e inquietantes revelaciones han llegado a las páginas de los periódicos. El Obispado de Ratisbona ha afirmado en un comunicado colgado en internet que fueron cometidos abusos sexuales en el ambiente del coro de jóvenes de la catedral de la ciudad en los años en los que el grupo era dirigido por Georg Ratzinger, hermano del Papa Benedicto XVI.
El actual obispo de Ratisbona, monseñor Ludwig Mueller, ha difundido en la Red una "carta a los padres" en la que se informa de los abusos. Georg Ratzinger ha asegurado hoy en declaraciones a una radio de Baviera "no tener conocimiento" de casos de pederastia.
Las revelaciones llegan después de que la Conferencia Episcopal alemana encargara el obispo Stephan Ackermann abrir una investigación sistemática en la Iglesia y en las escuelas religiosas para aclarar lo sucedido en una política de tolerancia cero con los abusos sexuales.
Los abusos en el coro de Ratisbona, un conjunto de fama mundial, tuvieron lugar durante 15 años, desde 1958 hasta 1973, según fuentes eclesiásticas. Georg Ratzinger fue director del coro entre 1964 y 1993. Según monseñor Mueller, cuatro educadores estarían de momento involucrados. Entre ellos, el entonces director del internado que alojaba a los jóvenes coristas, que confesó los hechos y fue condenado. Murió en 1984. Sin embargo, el arzobispado de Ratisbona promete ahora aclarar todos los casos.
La ola de denuncias sobre acoso sexual sufrido por escolares, estudiantes y seminaristas en diversos centros educativos dependientes de la Iglesia católica alemana se inició a finales de enero cuando el director de un colegio jesuita de Berlín informó a los ex alumnos de casos de pederastia acontecidos entre los años 60 y 80. Desde entonces, día a día se conocen nuevos.
Benedicto XVI ha confirmado que la semana que viene recibirá en el Vaticano al presidente de la Conferencia Episcopal alemana, el obispo Robert Zollitsch, para abordar el escándalo, entre otras cuestiones. Tras las nuevas revelaciones de hoy, la cita adquiere un nuevo significado.
El caso alemán se suma al irlandés, con miles de abusos a menores cometidos durante años por curas católicos. El escándalo en Irlanda surgió tras conocerse el Informe Ryan, que desveló que miles de menores fueron objeto de abusos sexuales y torturas físicas y psíquicas en instituciones estatales irlandesas regentadas por religiosos católicos durante casi 70 años. Otra investigación, el Informe Murphy , sacó a la luz que durante los últimos 30 años por lo menos 400 niños fueron víctimas de abusos cometidos por 46 sacerdotes de la archidiócesis de Dublín.