kokoro20
ANÓNIMO
Para vacilar un poco !!
♫ Ore-wa Morado Sapurishisuta ♫
♫ Sore-ga ore-no hokori! ♫
♫ Ore-wa Morado Sapurishisuta ♫
♫ Ore-no hahto-no chimu ♫
— OP de Kamen Rider Himno del equipo cuando fue al Mundial de Clubes en Japón
No se preocupen manos, sé que tengo derecho a cambiar la nueva franquicia y dejarla irreconocible, pero por respeto a la afición que no conozco, voy a dejar todo como estaba. — Jorge Vergara diciendo una mentira piadosa tras comprar al equipo
'Deportivo Saprissa
El Monstruo Morado'
Y su glorioso escudo
Nombre completo El Moradísimo Equipo Deportivo de Don Ricardo Saprissa Aymamá
Creación En una humilde zapatería
Liga UNAFUT
Presidente Jorge El Vergaras
Entrenador Cualquier ex-jugador en riesgo de retiro
Año de fundación Ni idea, en ese entonces no existían almanaques en Costa Rica
Estadio El Moradísimo Estadio de Don Ricardo Saprissa Aymamá
Posición A veces primeros, a veces segundos, más bien aburre
El Deportivo Saprissa (también conocido como El Sapri, El Monstruo Morado, La (Hece) Ese y el Deportivo Darrisa) es uno de los equipos más importantes de la PrimeraDivisión de Fútbol de Costa Rica, y posiblemente el menos malo de todos.
Origen
Allá por 1935, cuando se sacó a la venta el primer tablero de Monopoly, nació el famoso Elvis Presley, la no menos talentosa Mercedes Sosa, y el no menos grande Luciano Pavarotti, un humilde zapatero llamado Gepetto Roberto Fernández tuvo la peregrina idea de armarse un equipo de fútbol con los chiquillos del barrio. Gracias a la suerte de principiante, logró que los mocosos en cuestión quedaran campeones al año siguiente.
Curiosamente, en ese año se acordaron nuestras primitivas autoridades futbolísticas sobre la obligatoriedad de los uniformes (y no, no se valía usar los de la escuela). El equipillo no tenía ni uniforme ni nombre (simplemente los llamaban "Los Chiquillos de Don Beto") por lo que Fernández no tuvo de otra que contratar a un textilero para que le hiciera las camisetas. A pesar de que demostró ser un textilero exageradamente despistado (las camisas, que se suponía iban a ser rojas con blanco, salieron moradas, pero las dejaron así porque les pareció un color muy original), dio la casualidad que el contratado, además de textilero, era excelente futbolista, y bien dotado (de dinero, entiéndase). De origen catalán, Ricardo Saprissa estuvo de acuerdo en patrocinar al equipillo, máxime que le habían dado el honor de bautizarlo como deseara, siempre y cuando jurara no volver a diseñarles uniforme alguno. El resto es historia.
Un equipo en ascenso, un eterno rival
El famoso Clásico entre La S y La Liga se vuelve cada vez más apreciado con el tiempo
A pesar de haber empezado en la categoría infantil, el afán de mejorar pudo más, conquistando rápidamente los escalones para llegar a la (entonces) prestigiosa Primera División en 1949, y ganando su primer título nacional en 1952. Los (para entonces) veteranos jugadores de la Liga Deportiva Alajuelense eran los rivales en la final. El partido terminó empatado, pero gracias a ciertas intervenciones de don Ricardo Saprissa (y a que el árbitro deseaba que ganaran los novatos en ascenso), el gane fue dado a los saprissistas. La dirigencia liguista respondió con un escueto "Soborno. Clásico.". Desde entonces ambos equipos son rivales deportivos, los partidos entre los dos se denominan los Clásicos, y cada vez que se juegan, las barras de ambos equipos (hoy día La Ultra Morada y La 12, de las que hablaremos luego) se pelean con diversas armas de fuego y de contusión, como buenos hooligans que son.
La vuelta al mundo en 22 partidos
Los saprissistas, animados con el triunfo, y ya sin opciones para escoger dentro del territorio nacional, decidieron darle la vuelta al mundo a probar suerte contra diversos equipos del orbe. Los resultados fueron prometedores: 14 ganes, 1 empate, 7 partidos perdidos, 3 países a los que fueron a vagabundear vacacionar, y una deuda en pases de avión que, aparentemente, todavía no han terminado de pagar. De paso impusieron el Récord Mundial Guinness como "Primer equipo de soccer en hacer una gira mundial", pero eso vino por añadidura.
Por fin en casa
Al volver, los saprissistas notaron que los demás equipos habían empezado a mejorar, dándoles más reto futbolístico. Esa fue la única razón plausible, según ellos, para que hubieran perdido los campeonatos del 61, 63 y 66.
Don Ricardo Saprissa, en su afán por desperdiciar su fortuna ayudar al equipo, propuso financiarles un estadio decente, a cambio de que le pusieran su nombre al estadio (por aquello de la continuidad) y de que su nombre fuera escrito siempre en letras negritas y de color morado (como acá), cada vez que se le mencionara en un artículo serio. El Estadio Ricardo Saprissa fue inaugurado en 1972.
El Monstruo Morado
Efectivamente, es monstruoso.
Ya por los 80's, el Deportivo Saprissa era conocido como el "Monstruo Morado", por lo terrible que lucía el color de su camiseta. Tras oír el apelativo numerosas veces en los medios, los dirigentes del Saprissa decidieron hacerse una mascota lo más monstruosa posible, a ver si ya los llamaban así por una buena razón. Desafortunadamente, como demuestra la historia, volvieron a contratar al textilero equivocado, y el resultado parece haber sido el cruce de Barney con un trapeador de conserje. Sin embargo, por razones similares a las del triunfo del susodicho dinosaurio morado, este monstruo fue la delicia de los chicos y desde entonces se quedó así, a pesar de los esfuerzos de hacerlo más atlético.
La era Vergara
"Nadie notará el cambio, ¿cierto?"
Por ahí del año 2000, a la dirigencia se le acababan los fondos, no le alcanzaba para mantener el estadio o pagarle a sus jugadores, e incluso llegó al colmo de tener que rematar el Estadio Ricardo Saprissa. Lo que casi llegó a suceder antes de que llegara Jorge Vergara, presidente en ese entonces de las Chivas del Guadalajara. Por supuesto, el cambio de administración implicó algunos cambios:
Más de uno se muere por unirse a tan selecto club como la Ultra Morada.
Los aficionados al siempre glorioso Deportivo Saprissa suelen ser chusmas, chapulines, exconvictos y otros con orden de captura pendiente personas humildes que se unen en el prestigioso club denominado La Ultra Morada. Suelen vestir como bufones de color morado-blanco, brincar como el conejo de Duracell sin camisa, recitar letanías aún sin descifrar, y usar todo tipo de técnicas de lucha libre en contra de las otras barras (muy especialmente la de la Liga Deportiva Alajuelense, alias La 12). Sobra decir que son injustamente estigmatizados.
Jugadores más importantes
Como equipo de respeto, el Saprissa ha cosechado múltiples logros durante su existencia deportiva, incluyendo:
♫ Ore-wa Morado Sapurishisuta ♫
♫ Sore-ga ore-no hokori! ♫
♫ Ore-wa Morado Sapurishisuta ♫
♫ Ore-no hahto-no chimu ♫
— OP de Kamen Rider Himno del equipo cuando fue al Mundial de Clubes en Japón
No se preocupen manos, sé que tengo derecho a cambiar la nueva franquicia y dejarla irreconocible, pero por respeto a la afición que no conozco, voy a dejar todo como estaba. — Jorge Vergara diciendo una mentira piadosa tras comprar al equipo'Deportivo Saprissa
El Monstruo Morado'
Y su glorioso escudoNombre completo El Moradísimo Equipo Deportivo de Don Ricardo Saprissa Aymamá
Creación En una humilde zapatería
Liga UNAFUT
Presidente Jorge El Vergaras
Entrenador Cualquier ex-jugador en riesgo de retiro
Año de fundación Ni idea, en ese entonces no existían almanaques en Costa Rica
Estadio El Moradísimo Estadio de Don Ricardo Saprissa Aymamá
Posición A veces primeros, a veces segundos, más bien aburre
El Deportivo Saprissa (también conocido como El Sapri, El Monstruo Morado, La (Hece) Ese y el Deportivo Darrisa) es uno de los equipos más importantes de la PrimeraDivisión de Fútbol de Costa Rica, y posiblemente el menos malo de todos.
Origen
Allá por 1935, cuando se sacó a la venta el primer tablero de Monopoly, nació el famoso Elvis Presley, la no menos talentosa Mercedes Sosa, y el no menos grande Luciano Pavarotti, un humilde zapatero llamado Gepetto Roberto Fernández tuvo la peregrina idea de armarse un equipo de fútbol con los chiquillos del barrio. Gracias a la suerte de principiante, logró que los mocosos en cuestión quedaran campeones al año siguiente.
Curiosamente, en ese año se acordaron nuestras primitivas autoridades futbolísticas sobre la obligatoriedad de los uniformes (y no, no se valía usar los de la escuela). El equipillo no tenía ni uniforme ni nombre (simplemente los llamaban "Los Chiquillos de Don Beto") por lo que Fernández no tuvo de otra que contratar a un textilero para que le hiciera las camisetas. A pesar de que demostró ser un textilero exageradamente despistado (las camisas, que se suponía iban a ser rojas con blanco, salieron moradas, pero las dejaron así porque les pareció un color muy original), dio la casualidad que el contratado, además de textilero, era excelente futbolista, y bien dotado (de dinero, entiéndase). De origen catalán, Ricardo Saprissa estuvo de acuerdo en patrocinar al equipillo, máxime que le habían dado el honor de bautizarlo como deseara, siempre y cuando jurara no volver a diseñarles uniforme alguno. El resto es historia.
Un equipo en ascenso, un eterno rival
El famoso Clásico entre La S y La Liga se vuelve cada vez más apreciado con el tiempoA pesar de haber empezado en la categoría infantil, el afán de mejorar pudo más, conquistando rápidamente los escalones para llegar a la (entonces) prestigiosa Primera División en 1949, y ganando su primer título nacional en 1952. Los (para entonces) veteranos jugadores de la Liga Deportiva Alajuelense eran los rivales en la final. El partido terminó empatado, pero gracias a ciertas intervenciones de don Ricardo Saprissa (y a que el árbitro deseaba que ganaran los novatos en ascenso), el gane fue dado a los saprissistas. La dirigencia liguista respondió con un escueto "Soborno. Clásico.". Desde entonces ambos equipos son rivales deportivos, los partidos entre los dos se denominan los Clásicos, y cada vez que se juegan, las barras de ambos equipos (hoy día La Ultra Morada y La 12, de las que hablaremos luego) se pelean con diversas armas de fuego y de contusión, como buenos hooligans que son.
La vuelta al mundo en 22 partidos
Los saprissistas, animados con el triunfo, y ya sin opciones para escoger dentro del territorio nacional, decidieron darle la vuelta al mundo a probar suerte contra diversos equipos del orbe. Los resultados fueron prometedores: 14 ganes, 1 empate, 7 partidos perdidos, 3 países a los que fueron a vagabundear vacacionar, y una deuda en pases de avión que, aparentemente, todavía no han terminado de pagar. De paso impusieron el Récord Mundial Guinness como "Primer equipo de soccer en hacer una gira mundial", pero eso vino por añadidura.
Por fin en casa
Al volver, los saprissistas notaron que los demás equipos habían empezado a mejorar, dándoles más reto futbolístico. Esa fue la única razón plausible, según ellos, para que hubieran perdido los campeonatos del 61, 63 y 66.
Don Ricardo Saprissa, en su afán por desperdiciar su fortuna ayudar al equipo, propuso financiarles un estadio decente, a cambio de que le pusieran su nombre al estadio (por aquello de la continuidad) y de que su nombre fuera escrito siempre en letras negritas y de color morado (como acá), cada vez que se le mencionara en un artículo serio. El Estadio Ricardo Saprissa fue inaugurado en 1972.
El Monstruo Morado
Efectivamente, es monstruoso.Ya por los 80's, el Deportivo Saprissa era conocido como el "Monstruo Morado", por lo terrible que lucía el color de su camiseta. Tras oír el apelativo numerosas veces en los medios, los dirigentes del Saprissa decidieron hacerse una mascota lo más monstruosa posible, a ver si ya los llamaban así por una buena razón. Desafortunadamente, como demuestra la historia, volvieron a contratar al textilero equivocado, y el resultado parece haber sido el cruce de Barney con un trapeador de conserje. Sin embargo, por razones similares a las del triunfo del susodicho dinosaurio morado, este monstruo fue la delicia de los chicos y desde entonces se quedó así, a pesar de los esfuerzos de hacerlo más atlético.
La era Vergara
"Nadie notará el cambio, ¿cierto?"Por ahí del año 2000, a la dirigencia se le acababan los fondos, no le alcanzaba para mantener el estadio o pagarle a sus jugadores, e incluso llegó al colmo de tener que rematar el Estadio Ricardo Saprissa. Lo que casi llegó a suceder antes de que llegara Jorge Vergara, presidente en ese entonces de las Chivas del Guadalajara. Por supuesto, el cambio de administración implicó algunos cambios:
- El Monstruo Morado sería reemplazado por la mascota de cierta revista para nerds
- Todos los jugadores deberían consumir exclusivamente los productos de su empresa Omnilife, especialmente la nueva y mejorada SapriCola
- No se permitiría el ingreso de monedas al estadio, para evitar que las arrojaran al árbitro, y de paso obligar a los asistentes al estadio a comprar todo a ₡1000 como mínimo
- El uniforme ahora tendría rayas naranjas por aquello de la teoría del color
- La cancha sería de césped sintético de importación, para hacer que los jugadores se sintieran importantes al menos una vez en la vida
- Para evitar gastos extraordinarios, las deudas se dejarían pendientes de pago; en vez de eso se aplicarían medidas como...
- Alquilar el estadio para conciertos, deportes extremos y fiestas infantiles
- Desviar fondos de Omnilife y las Chivas para financiar los antojos de don Jorge los gastos de emergencia
- Si todo fallaba, la aplicación de diversos métodos de evasión fiscal
Más de uno se muere por unirse a tan selecto club como la Ultra Morada.Los aficionados al siempre glorioso Deportivo Saprissa suelen ser chusmas, chapulines, exconvictos y otros con orden de captura pendiente personas humildes que se unen en el prestigioso club denominado La Ultra Morada. Suelen vestir como bufones de color morado-blanco, brincar como el conejo de Duracell sin camisa, recitar letanías aún sin descifrar, y usar todo tipo de técnicas de lucha libre en contra de las otras barras (muy especialmente la de la Liga Deportiva Alajuelense, alias La 12). Sobra decir que son injustamente estigmatizados.
Jugadores más importantes
- Catato Cordero, uno de los mejores defensas de tiempos de tu abuelita
- Evaristo Coronado, el llamado Caballero del Fútbol por haber agarrado una vez al Monstruo Morado a pelotazos, como lo hubiera hecho Don Quijote
- Juan Payaso Cayasso, que aunque haya jugado con el otro bando, se reformó
- Alexandre "Guima" Guimaraes, hablante nativo de portuñol nacionalizado tico
- Celso "Celsinho" Borges, su hijo, excelente jugador, pero nadie sabe dónde fue a parar
- Erick Lonnis, el que atajaba de todas, todas; se presume que su posición como portero le causaba estreñimiento
- Jose Luis Porras, alias Porritas, que agarró el campo de Lonnis cuando este salió del juego para ir al baño y nunca volvió
- Keylor Navas, que hizo lo mismo cuando Porritas fue al baño
- Hernán Medford, conocido como El Pelícano por las rajonadas que se gasta
- Y por supuesto El Moradito, que siempre juega de vivo
Como equipo de respeto, el Saprissa ha cosechado múltiples logros durante su existencia deportiva, incluyendo:
- 29 campeonatos nacionales, incluyendo 6 en hilo allá cuando tu mamá era joven
- Otro montón de récords nacionales que a nadie le importan
- 11 campeonatos internacionales, la mayoría de los cuales ni siquiera conocía que existieran
- Designado equipo del siglo de CONCACAF, ni idea de por qué
- Único equipo costarricense en ir al Mundial de Clubes (sólo nos acordamos porque somos otakus y el Mundial fue en Japón)
- Ser considerados la base de la Selección nacional de fútbol de Costa Rica (lo que, por supuesto, le duele a la mitad del país y ha desembocado en el apelativo "Saprisele" para el cuadro patrio, además de sendos ridículos donde quiera que se presente la selección nacional)
