Claro, aunque es de viejitos ese truco, mayormente de campo.
Bueno... tenga la seguridad que no me avergonzaría ser viejito y de campo. De hecho, la vida del campo, si bien es dura y difícil... es también más saludable y tranquila. Y el llegar a ancianos, pues... todos vamos para allá... inclusive usted... solo que usted nos lleva ya un poco más de ventaja en ese camino.
Por otra parte... su afirmación está más que alejada de la realidad. La técnica de sacar de mentiras verdad, se pueden ver en películas, series, investigaciones de la vida real y literatura actual. Son los que conforman esos "giros de tuerca", que al final son los que impactan.
Yo utilizo otros métodos más efectivos, soy mujer, un ser místico, mágico, bruja por naturaleza. Ahhhh y también me gusta sacar provecho de la anti materia de la existencia
Resalto que al menos reconoce que son brujas. Eso de que son seres místicos y mágicos... bah!!!... eso solo ustedes se lo creen... pura vanidad y egocentrismo. Seres humanos re-comunes y silvestres es lo que son.
El Rey Salomón si concuerda con usted, en cuanto la forma en que viven y se conducen ustedes:
Hijo mío, guarda mis palabras, y atesora mis mandamientos contigo. Guarda mis mandamientos y vivirás, y mi enseñanza como la niña de tus ojos. Atalos a tus dedos, escríbelos en la tabla de tu corazón. Di a la sabiduría: Tú eres mi hermana, y llama a la inteligencia tu mejor amiga, para que te guarden de la mujer extraña, de la desconocida que lisonjea con sus palabras. Porque desde la ventana de mi casa miraba por la celosía, y vi entre los simples, distinguí entre los muchachos a un joven falto de juicio, pasando por la calle cerca de su esquina; iba camino de su casa, al atardecer, al anochecer, en medio de la noche y la oscuridad. Y he aquí, una mujer le sale al encuentro, vestida como ramera y astuta de corazón. Es alborotadora y rebelde, sus pies no permanecen en casa; está ya en las calles, ya en las plazas, y acecha por todas las esquinas. Y lo agarra y lo besa, y descarada le dice: Tenía que ofrecer ofrendas de paz, y hoy he cumplido mis votos; por eso he salido a encontrarte, buscando tu rostro con ansiedad, y te he hallado. He tendido mi lecho con colchas, con linos de Egipto en colores; he rociado mi cama con mirra, áloes y canela. Ven, embriaguémonos de amor hasta la mañana, deleitémonos con caricias. Porque mi marido no está en casa,
se ha ido a un largo viaje; se ha llevado en la mano la bolsa del dinero, volverá a casa para la luna llena. Con sus palabras persuasivas lo atrae,
lo seduce con sus labios lisonjeros. Al instante la sigue, como va el buey al matadero, o como uno en grillos al castigo de un necio, hasta que una flecha le traspasa el hígado; como el ave que se precipita en la trampa, y no sabe que esto le costará la vida. Ahora pues, hijos míos, escuchadme, y prestad atención a las palabras de mi boca. No se desvíe tu corazón hacia sus caminos, no te extravíes en sus sendas. Porque muchas son las víctimas derribadas por ella, y numerosos los que ha matado. Su casa es el camino al Seol, que desciende a las cámaras de la muerte.
Dice Carl Gustav Jung:
"Eres esclavo de lo que tu alma necesita. El hombre más masculino necesita a la mujer, y por lo tanto es su esclavo."
Esta frase es muy real y tiene aplicación, si nos ubicamos en el contexto de la historia, sociedad y la realidad que vivía la generación a la cual pertenecía Carl Jung (1875-1961).
Pensar que actualmente esa idea tiene vigencia... es no vivir en la realidad y querer negar muchas verdades.
Usted como mujer piensa que tiene o ha "esclavizados" a muchos hombres (alimento para el ego y la vanidad), tal y como se refleja en este tema. Pero lo que pasa en realidad, es que el hombre cae en la trampa porque no controla sus instintos... en realidad es un esclavo pero de su propio libido.
En el momento en que el hombre toma las riendas de su vida, instintos, deseos y libido... es un hombre libre!!!
La sabiduría de los antiguos es digna de atender y reflexionar... el mismo Rey Salomón, quien no se privó de riquezas, mujeres y lujos, dijo en una ocasión:
[FONT="]... más vale el dominio propio que conquistar ciudades.[/FONT]
Sabe por qué lo dijo?... Porque a pesar de gozar de sabiduría, poder, lujo y riquezas... fue esclavo de las mujeres... y perdió una de las cosas más valiosas que puede tener un hombre... se perdió a sí mismo.