¡Imagínate la escena, pura vida! El ambiente en el Congreso estaba que ardía ayer, con los diputados de oposición sacándose chivos del saco por la bronca que le tocó vivir Don Roy Fallas, un agricultor de Puntarenas. Resulta que el pobre hombre, que encima es presidente del comité regional de ferias, terminó detenido durante una manifestación frente a Casa Presidencial, ¡una verdadera pena!
La cosa es que los congresistas no estaban precisamente contentos con la actuación de la Fuerza Pública y empezaron a lanzar fuertes acusaciones al gobierno actual, alegando que le están dando hartazo al sector agrícola. Dicen que han empezado con los arroceros y luego fueron otros sectores, parece que quieren acabar con la producción nacional, ¡qué carga!
En medio de toda esta tensión, apareció Pilar Cisneros, diputada oficialista, decidida a defender a capa y espada a su partido. Pero en lugar de quedarse a debatir y aportar soluciones, la diputada, pa’lante, se levantó y se fue corriendo del plenario, ¡como si fuera gallina asustada! Según dicen, ni siquiera dio tiempo a escuchar las quejas de la presidenta interina, Vanessa Castro.
Pero eso no es todo, porque varios otros diputados del gobierno, viendo cómo la cosa se ponía fea, decidieron hacerle eco a Cisneros y también se largaron a correr, aparentemente para romper el quórum y evitar que se votaran medidas urgentes para apoyar a los agricultores. ¡Una jugada baja, diay!
Rocío Alfaro, jefa de la fracción del Frente Amplio, no tardó en soltarle la lengua y criticar duramente a los diputados fugaces, asegurando que la marcha demostró “quién es pueblo y quién es élite”. Dijo que el pueblo es valiente, digno y no se arruga, y que espera que pronto se haga justicia y que el gobierno rinda cuentas por sus acciones. ¡Con razón, la señora está encendida!
Luis Fernando Mendoza, del PLN, no se quedó atrás y sentenció que lo de la Fuerza Pública capturando a un agricultor es reflejo de lo que este gobierno nos ha traído. Cargó contra la administración por haber “agarrado del pescuezo” a los agricultores, especialmente al sector arroceros, y afirmó que están “matando a los agricultores”, ¡qué sal!
Paulina Ramírez, también liberacionista, agregó que al llegar a Casa Presidencial no encontraron diálogo, sino represión policial. Denunció que no hubo apertura, escucha ni disposición por parte del gobierno y advirtió que esto no puede seguir sucediendo en un país democrático. Hizo referencia a los agricultores – paperos, cebolleros, arroceros – sufriendo una el embate de una política de importación salvaje.
Ahora, Don Roy Fallas, nuestro agricultor protagonista, se encuentra recluido en el Primer Circuito Judicial de San José, esperando a ver qué pasa con todo este rollo. La verdad es que la situación pinta complicada, pero los agricultores no se van a rendir fácilmente. ¿Crees tú que el gobierno debería ofrecer disculpas públicas y tomar medidas concretas para proteger a los agricultores costarricenses, o simplemente esto es otro episodio más en la larga lista de problemas agrícolas del país?
La cosa es que los congresistas no estaban precisamente contentos con la actuación de la Fuerza Pública y empezaron a lanzar fuertes acusaciones al gobierno actual, alegando que le están dando hartazo al sector agrícola. Dicen que han empezado con los arroceros y luego fueron otros sectores, parece que quieren acabar con la producción nacional, ¡qué carga!
En medio de toda esta tensión, apareció Pilar Cisneros, diputada oficialista, decidida a defender a capa y espada a su partido. Pero en lugar de quedarse a debatir y aportar soluciones, la diputada, pa’lante, se levantó y se fue corriendo del plenario, ¡como si fuera gallina asustada! Según dicen, ni siquiera dio tiempo a escuchar las quejas de la presidenta interina, Vanessa Castro.
Pero eso no es todo, porque varios otros diputados del gobierno, viendo cómo la cosa se ponía fea, decidieron hacerle eco a Cisneros y también se largaron a correr, aparentemente para romper el quórum y evitar que se votaran medidas urgentes para apoyar a los agricultores. ¡Una jugada baja, diay!
Rocío Alfaro, jefa de la fracción del Frente Amplio, no tardó en soltarle la lengua y criticar duramente a los diputados fugaces, asegurando que la marcha demostró “quién es pueblo y quién es élite”. Dijo que el pueblo es valiente, digno y no se arruga, y que espera que pronto se haga justicia y que el gobierno rinda cuentas por sus acciones. ¡Con razón, la señora está encendida!
Luis Fernando Mendoza, del PLN, no se quedó atrás y sentenció que lo de la Fuerza Pública capturando a un agricultor es reflejo de lo que este gobierno nos ha traído. Cargó contra la administración por haber “agarrado del pescuezo” a los agricultores, especialmente al sector arroceros, y afirmó que están “matando a los agricultores”, ¡qué sal!
Paulina Ramírez, también liberacionista, agregó que al llegar a Casa Presidencial no encontraron diálogo, sino represión policial. Denunció que no hubo apertura, escucha ni disposición por parte del gobierno y advirtió que esto no puede seguir sucediendo en un país democrático. Hizo referencia a los agricultores – paperos, cebolleros, arroceros – sufriendo una el embate de una política de importación salvaje.
Ahora, Don Roy Fallas, nuestro agricultor protagonista, se encuentra recluido en el Primer Circuito Judicial de San José, esperando a ver qué pasa con todo este rollo. La verdad es que la situación pinta complicada, pero los agricultores no se van a rendir fácilmente. ¿Crees tú que el gobierno debería ofrecer disculpas públicas y tomar medidas concretas para proteger a los agricultores costarricenses, o simplemente esto es otro episodio más en la larga lista de problemas agrícolas del país?
