¡Ay, Dios mío! Otro golpe certero a las mafias que intentan echar a perder nuestro país. Esta vez, la Policía de Control de Drogas (PCD) le pegó duro a una operación de venta de drogas que funcionaba a pleno en medio de Caldera, Puntarenas. Parece que algunos pensaban que podían operar impune, pero bueno, ¡pa' eso estamos nosotros!
La PCD lleva varios meses investigando este caso, rastreando movimientos y recopilando pruebas. Al parecer, un bar restaurante, un lugar donde la gente iba a relajarse, comer un casado y tomarse unas cervezas, se había convertido en fachada para el negocio ilícito. Detrás del mismo establecimiento, encontraron otra propiedad que utilizaban para empaquetar y distribuir la mercancía. ¡Qué cosas, mae!
En el operativo sorpresa, lograron detener a una mujer identificada como Torres, quien ya tenía antecedentes por problemas similares. La señora, con 43 años y un historial turbio, ahora tendrá que enfrentar la justicia por sus actos. Esto demuestra que ni los antecedentes limpian la conciencia, chunche.
Las autoridades decomisaron una buena cantidad de evidencia: dosis de marihuana, crack, cocaína... ¡una chimba!, además de casi trescientos mil colones, presumiblemente producto de las ventas ilegales. También encontraron utensilios para preparar y dosificar las drogas, hasta una picadora. Claramente, esto no era un chiquitaje, sino una operación organizada.
Este tipo de situaciones nos recuerdan que la lucha contra el narcotráfico es constante y requiere de la colaboración de todos. No podemos permitir que nuestras comunidades sean invadidas por estas actividades ilegales que destruyen familias y ponen en riesgo la seguridad de todos los costarricenses. ¡Que nadie piense que puede meter droga en nuestro país impunemente!
Las autoridades quieren hacer énfasis en la importancia de denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con el narcotráfico. Por eso, instan a la ciudadanía a utilizar la línea confidencial y gratuita 1-1-7-6 o enviar mensajes de WhatsApp al 8888-1176. ¡Denunciemos, protejamos a nuestros barrios y construyamos un país más seguro para todos!
Este caso de Caldera debería servirnos de ejemplo a todos. Demuestra que la policía está trabajando duro para combatir el crimen organizado, pero también resalta la necesidad de estar atentos y colaborar activamente. Un saludo especial a esos oficiales de la PCD que le pusieron empeño a esta investigación; ¡ustedes sí que son cargas!
Ahora bien, queridos lectores del Foro de Costa Rica, ¿creen que deberíamos implementar medidas más estrictas para controlar la venta de licencias de bares y restaurantes, o consideran que el problema radica más en la supervisión y aplicación de las leyes existentes? ¿Ustedes qué opinan, diay?
La PCD lleva varios meses investigando este caso, rastreando movimientos y recopilando pruebas. Al parecer, un bar restaurante, un lugar donde la gente iba a relajarse, comer un casado y tomarse unas cervezas, se había convertido en fachada para el negocio ilícito. Detrás del mismo establecimiento, encontraron otra propiedad que utilizaban para empaquetar y distribuir la mercancía. ¡Qué cosas, mae!
En el operativo sorpresa, lograron detener a una mujer identificada como Torres, quien ya tenía antecedentes por problemas similares. La señora, con 43 años y un historial turbio, ahora tendrá que enfrentar la justicia por sus actos. Esto demuestra que ni los antecedentes limpian la conciencia, chunche.
Las autoridades decomisaron una buena cantidad de evidencia: dosis de marihuana, crack, cocaína... ¡una chimba!, además de casi trescientos mil colones, presumiblemente producto de las ventas ilegales. También encontraron utensilios para preparar y dosificar las drogas, hasta una picadora. Claramente, esto no era un chiquitaje, sino una operación organizada.
Este tipo de situaciones nos recuerdan que la lucha contra el narcotráfico es constante y requiere de la colaboración de todos. No podemos permitir que nuestras comunidades sean invadidas por estas actividades ilegales que destruyen familias y ponen en riesgo la seguridad de todos los costarricenses. ¡Que nadie piense que puede meter droga en nuestro país impunemente!
Las autoridades quieren hacer énfasis en la importancia de denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con el narcotráfico. Por eso, instan a la ciudadanía a utilizar la línea confidencial y gratuita 1-1-7-6 o enviar mensajes de WhatsApp al 8888-1176. ¡Denunciemos, protejamos a nuestros barrios y construyamos un país más seguro para todos!
Este caso de Caldera debería servirnos de ejemplo a todos. Demuestra que la policía está trabajando duro para combatir el crimen organizado, pero también resalta la necesidad de estar atentos y colaborar activamente. Un saludo especial a esos oficiales de la PCD que le pusieron empeño a esta investigación; ¡ustedes sí que son cargas!
Ahora bien, queridos lectores del Foro de Costa Rica, ¿creen que deberíamos implementar medidas más estrictas para controlar la venta de licencias de bares y restaurantes, o consideran que el problema radica más en la supervisión y aplicación de las leyes existentes? ¿Ustedes qué opinan, diay?