¡Ay, mi Dios! Qué chimba de triunfo para Bad Bunny en los Grammy Latinos, fíjate tú. El Conejo Malo se llevó el botín en grande, acumulando cinco premios y demostrando que es el rey indiscutible del género urbano. Dejé caer unas cuántas cervezas por la victoria de Benito, porque pa’ eso somos ticos y celebramos lo bueno, ¿verdad?
La 26ª edición de estos premios, que se rifaron en Las Vegas, estuvieron cargaditas de talento latinoamericano, desde el boricua Bad Bunny hasta el español Alejandro Sanz, pasando por los argentinos Ca7riel y Paco Amoroso, que también se llevaron unos cuantos gramófonos pa' casa. Pero bueno, la noche le perteneció a Benito, quien llegó como el claro favorito y no defraudó a nadie.
El disco “DeBÍ TiRAR Más Fotos” fue el protagonista absoluto, llevándose el codiciado premio al Álbum del Año, además de otros reconocimientos como Mejor Álbum de Música Urbana, Mejor Canción Urbana, Mejor Fusión/Interpretación Urbana y Mejor Interpretación de Reguetón. Se nota que el brete le metió duro a Benito, pero así se hace, ¿eh? Trabajo, sudor y lágrimas... y un Grammy encima!
Al recoger su premio, Benito se mostró agradecido con toda la gente que trabajó en el álbum, diciendo que los llevaba a todos en su corazón. Ese mae sí sabe valorar a sus compañeros, qué buena onda. Además, dedicó el premio a “todos los niños y jóvenes de Latinoamérica”, diciéndoles que no olvidaran de dónde venían. ¡Un mensaje poderoso, máster!
Pero la noche no solo tuvo triunfos para Bad Bunny. El español Alejandro Sanz se robó el show con “Palmeras en el Jardín”, alzándose con el premio a la Mejor Grabación del Año. Él mismo bromeó con haberle “robado” el premio a Benito, mostrando un buen sentido del humor. Que viva la camaradería entre artistas, diay!
Y ni hablar de Karol G, que también brilló con luz propia al ganar el premio a la Mejor Canción del Año con “Si Antes Te Hubiera Conocido”. La cantante colombiana aprovechó la ocasión para hablar sobre el precio de la fama y el impacto negativo de las críticas en su carrera, pero recalcó la importancia de volver a las raíces y a la intención original. Uno se pone pensar, ¿no?
Además, hubo espacio para nuevas figuras como Paloma Morphy, que se alzó con el premio a la Mejor Artista Revelación, y para el talento lusófono, representado por Liniker, quien conquistó tres gramófonos con su aclamado álbum “Caju”. Con tanta variedad de estilos y culturas, los Grammy Latinos siguen siendo una verdadera fiesta de la música latina. ¡Qué vibra!
En fin, una noche llena de emociones, sorpresas y mucho talento. Ahora me pregunto: ¿Crees que Bad Bunny seguirá dominando la escena musical latina en los próximos años, o hay nuevos talentos que podrían darle pelea? ¡Déjanos tus comentarios en el foro, vamos a ver qué dice la gente!
La 26ª edición de estos premios, que se rifaron en Las Vegas, estuvieron cargaditas de talento latinoamericano, desde el boricua Bad Bunny hasta el español Alejandro Sanz, pasando por los argentinos Ca7riel y Paco Amoroso, que también se llevaron unos cuantos gramófonos pa' casa. Pero bueno, la noche le perteneció a Benito, quien llegó como el claro favorito y no defraudó a nadie.
El disco “DeBÍ TiRAR Más Fotos” fue el protagonista absoluto, llevándose el codiciado premio al Álbum del Año, además de otros reconocimientos como Mejor Álbum de Música Urbana, Mejor Canción Urbana, Mejor Fusión/Interpretación Urbana y Mejor Interpretación de Reguetón. Se nota que el brete le metió duro a Benito, pero así se hace, ¿eh? Trabajo, sudor y lágrimas... y un Grammy encima!
Al recoger su premio, Benito se mostró agradecido con toda la gente que trabajó en el álbum, diciendo que los llevaba a todos en su corazón. Ese mae sí sabe valorar a sus compañeros, qué buena onda. Además, dedicó el premio a “todos los niños y jóvenes de Latinoamérica”, diciéndoles que no olvidaran de dónde venían. ¡Un mensaje poderoso, máster!
Pero la noche no solo tuvo triunfos para Bad Bunny. El español Alejandro Sanz se robó el show con “Palmeras en el Jardín”, alzándose con el premio a la Mejor Grabación del Año. Él mismo bromeó con haberle “robado” el premio a Benito, mostrando un buen sentido del humor. Que viva la camaradería entre artistas, diay!
Y ni hablar de Karol G, que también brilló con luz propia al ganar el premio a la Mejor Canción del Año con “Si Antes Te Hubiera Conocido”. La cantante colombiana aprovechó la ocasión para hablar sobre el precio de la fama y el impacto negativo de las críticas en su carrera, pero recalcó la importancia de volver a las raíces y a la intención original. Uno se pone pensar, ¿no?
Además, hubo espacio para nuevas figuras como Paloma Morphy, que se alzó con el premio a la Mejor Artista Revelación, y para el talento lusófono, representado por Liniker, quien conquistó tres gramófonos con su aclamado álbum “Caju”. Con tanta variedad de estilos y culturas, los Grammy Latinos siguen siendo una verdadera fiesta de la música latina. ¡Qué vibra!
En fin, una noche llena de emociones, sorpresas y mucho talento. Ahora me pregunto: ¿Crees que Bad Bunny seguirá dominando la escena musical latina en los próximos años, o hay nuevos talentos que podrían darle pelea? ¡Déjanos tus comentarios en el foro, vamos a ver qué dice la gente!