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Wilas

Curiosidad: robot sexuales

El otro día he leído un artículo sobre lo que podríamos llamar las muñecas sexuales tecnológicas...o las sexdolls del siglo 21. Es algo curioso, porque nunca me animé a esto, pero me llamó la atención el artículo y se los quería compartir.

Una muñeca sexual extrañamente realista puede sonreír, gemir e incluso mantener una conversación

Desde que apareció el coronavirus, un nuevo "robot sexual", inquietantemente realista, que puede parpadear, sonreír, gemir, poner la piel de gallina y mantener una conversación, ha volado de las estanterías.

Las muñecas, vendidas por Sex Doll Genie y fabricadas por Gynoid, están hechas de silicona y, según los fundadores de SGD, Janet Stevenson y su marido Amit, parecen y se sienten como un humano real.

"Hay hombres solitarios de mediana edad que no quieren volver a pasearse por el campo de minas de las citas, hay personas discapacitadas para las que las muñecas sexuales son compañeras convenientes y sin prejuicios, y también hay parejas como nosotros que quieren añadir otra dimensión a su vida amorosa sin cargas emocionales adicionales", según el sitio web. "Además, cada vez hay más gente que simplemente piensa que una muñeca sexual se adapta mejor a su estilo de vida".

Sin embargo, ahora las utilizan personas preocupadas por el COVID-19 y las parejas. Desde la pandemia, la empresa con sede en Florida vio cómo los pedidos se disparaban en más de un 51% durante febrero y marzo, cuando empezaron los cierres en Estados Unidos y otros países.

"Son los más realistas del mercado. ... Dicen que el 90% del sexo está en la mente: cuando el muñeco con el que haces el amor parece tan real, hace que el sexo sea más placentero y gratificante", dijo Amit a Daily Star Online.

Las muñecas de alta gama -que vienen con cuerpo completo y equipadas con inteligencia artificial- parten de unos 6.000 dólares, pero pueden llegar a los 8.000 dólares.

"Están hechos a mano. Si miras el vídeo, puedes ver las venas en los brazos o en el pecho", dijo Amit al Star. "Es bastante loco, tengo algunos vídeos de su reciente pedido, y miras estos vídeos y piensas, ella podría parpadear en cualquier momento, parece así de real".
 
El otro día he leído un artículo sobre lo que podríamos llamar las muñecas sexuales tecnológicas...o las sexdolls del siglo 21. Es algo curioso, porque nunca me animé a esto, pero me llamó la atención el artículo y se los quería compartir.

Una muñeca sexual extrañamente realista puede sonreír, gemir e incluso mantener una conversación

Desde que apareció el coronavirus, un nuevo "robot sexual", inquietantemente realista, que puede parpadear, sonreír, gemir, poner la piel de gallina y mantener una conversación, ha volado de las estanterías.

Las muñecas, vendidas por Sex Doll Genie y fabricadas por Gynoid, están hechas de silicona y, según los fundadores de SGD, Janet Stevenson y su marido Amit, parecen y se sienten como un humano real.

"Hay hombres solitarios de mediana edad que no quieren volver a pasearse por el campo de minas de las citas, hay personas discapacitadas para las que las muñecas sexuales son compañeras convenientes y sin prejuicios, y también hay parejas como nosotros que quieren añadir otra dimensión a su vida amorosa sin cargas emocionales adicionales", según el sitio web. "Además, cada vez hay más gente que simplemente piensa que una muñeca sexual se adapta mejor a su estilo de vida".

Sin embargo, ahora las utilizan personas preocupadas por el COVID-19 y las parejas. Desde la pandemia, la empresa con sede en Florida vio cómo los pedidos se disparaban en más de un 51% durante febrero y marzo, cuando empezaron los cierres en Estados Unidos y otros países.

"Son los más realistas del mercado. ... Dicen que el 90% del sexo está en la mente: cuando el muñeco con el que haces el amor parece tan real, hace que el sexo sea más placentero y gratificante", dijo Amit a Daily Star Online.

Las sexdoll69 de alta gama -que vienen con cuerpo completo y equipadas con inteligencia artificial- parten de unos 6.000 dólares, pero pueden llegar a los 8.000 dólares.

"Están hechos a mano. Si miras el vídeo, puedes ver las venas en los brazos o en el pecho", dijo Amit al Star. "Es bastante loco, tengo algunos vídeos de su reciente pedido, y miras estos vídeos y piensas, ella podría parpadear en cualquier momento, parece así de real".
He leído el caso de un hombre que ha llevado la situación con estas muñecas al extremo. Es un japonés que decidió reemplazar a las mujeres con una serie de sexdolls.

Cuando este hombre de 45 años, que utiliza el seudónimo de Ta-Bo, vuelve a casa, no le espera una esposa o una novia, sino una hilera de muñecas alineadas ordenadamente en su sofá.

Cada una tiene un nombre. Ta-Bo suele ver la televisión con sus juguetes antes de bañarlos, empolvarlos para que su piel parezca más humana, vestirlos con lencería y llevarlos a la cama.

"Una chica humana puede engañarte o traicionarte a veces, pero estas muñecas nunca hacen esas cosas. Me pertenecen al cien por cien", dice el ingeniero, que ha gastado más de 2 millones de yenes (16.000 dólares) en la última década en las muñecas.

"A veces se necesita mucho tiempo antes de que pueda tener sexo con la persona que conozco. Pero con estas muñecas, es cuestión de un clic del ratón. Con un clic, te las entregan".

Este hombre, que dice haber tenido relaciones sexuales con cinco mujeres pero que prefiere las muñecas, forma parte de un grupo cada vez más numeroso, aunque reservado, de japoneses que han renunciado a las mujeres.

Un fabricante japonés dijo que empezó a producir sus muñecas de tamaño natural y anatómicamente correctas hace 30 años, dirigiéndose inicialmente a hombres discapacitados que podrían tener dificultades para encontrar pareja.

Orient Industry Co. fabrica ahora 80 muñecas al mes en una fábrica del este de Tokio con nueve diseños que se venden por entre 850 y 5.500 dólares cada uno. Los modelos más caros son de silicona y tienen 35 articulaciones móviles.

Casi todas las personas que compran estas muñecas son hombres solteros y cerca del 60% de ellos tienen más de 40 años, según un responsable de la empresa
"Hoy en día, las mujeres son a veces más dominantes que los hombres en el mundo real, y no siempre prestan atención a los hombres", dijo Hideo Tsuchiya, presidente de la empresa.

"Cada vez hay más hombres que se sienten desgraciados, así que hacemos estas muñecas en parte para apoyar a los hombres".

El anonimato de la compra de una muñeca sexual a través de Internet ha ayudado a que el negocio crezca, pero Orient Industry también tiene una sala de exposiciones en la que muestra sus productos.

Muchas tienen los labios separados, los pechos prominentes y se muestran extendidas sobre camas o sillas en poses similares a las que adoptan las prostitutas en los sex shops.

Ta-Bo dice que sus padres no conocen a sus compañeras porque nunca las ha invitado a su apartamento.

Admite que llevar a las muñecas, cambiarles la ropa y bañarlas es casi como cuidar a personas postradas en la cama, pero dice que para él y unos pocos amigos varones que comparten su afición, las muñecas son la única salida emocional.

"El sexo con chicas humanas era mejor, pero odio el proceso de las citas", dice.

Un tiende a pensar simplemente que está loco, tal vez, pero es su fantasía y quién puede negarlo?
 
He leído el caso de un hombre que ha llevado la situación con estas muñecas al extremo. Es un japonés que decidió reemplazar a las mujeres con una serie de sexdolls.

Cuando este hombre de 45 años, que utiliza el seudónimo de Ta-Bo, vuelve a casa, no le espera una esposa o una novia, sino una hilera de muñecas alineadas ordenadamente en su sofá.

Cada una tiene un nombre. Ta-Bo suele ver la televisión con sus juguetes antes de bañarlos, empolvarlos para que su piel parezca más humana, vestirlos con lencería y llevarlos a la cama.

"Una chica humana puede engañarte o traicionarte a veces, pero estas muñecas nunca hacen esas cosas. Me pertenecen al cien por cien", dice el ingeniero, que ha gastado más de 2 millones de yenes (16.000 dólares) en la última década en las muñecas.

"A veces se necesita mucho tiempo antes de que pueda tener sexo con la persona que conozco. Pero con estas muñecas, es cuestión de un clic del ratón. Con un clic, te las entregan".

Este hombre, que dice haber tenido relaciones sexuales con cinco mujeres pero que prefiere las muñecas, forma parte de un grupo cada vez más numeroso, aunque reservado, de japoneses que han renunciado a las mujeres.

Un fabricante japonés dijo que empezó a producir sus muñecas de tamaño natural y anatómicamente correctas hace 30 años, dirigiéndose inicialmente a hombres discapacitados que podrían tener dificultades para encontrar pareja.

Orient Industry Co. fabrica ahora 80 muñecas al mes en una fábrica del este de Tokio con nueve diseños que se venden por entre 850 y 5.500 dólares cada uno. Los modelos más caros son de silicona y tienen 35 articulaciones móviles.

Casi todas las personas que compran estas muñecas son hombres solteros y cerca del 60% de ellos tienen más de 40 años, según un responsable de la empresa
"Hoy en día, las mujeres son a veces más dominantes que los hombres en el mundo real, y no siempre prestan atención a los hombres", dijo Hideo Tsuchiya, presidente de la empresa.

"Cada vez hay más hombres que se sienten desgraciados, así que hacemos estas muñecas en parte para apoyar a los hombres".

El anonimato de la compra de una muñeca sexual a través de Internet ha ayudado a que el negocio crezca, pero Orient Industry también tiene una sala de exposiciones en la que muestra sus productos.

Muchas tienen los labios separados, los pechos prominentes y se muestran extendidas sobre camas o sillas en poses similares a las que adoptan las prostitutas en los sex shops.

Ta-Bo dice que sus padres no conocen a sus compañeras porque nunca las ha invitado a su apartamento.

Admite que llevar a las muñecas, cambiarles la ropa y bañarlas es casi como cuidar a personas postradas en la cama, pero dice que para él y unos pocos amigos varones que comparten su afición, las muñecas son la única salida emocional.

"El sexo con chicas humanas era mejor, pero odio el proceso de las citas", dice.

Un tiende a pensar simplemente que está loco, tal vez, pero es su fantasía y quién puede negarlo?
Pero sexo sin calentamiento y malicia antes de , en ,y despues de ningun robot o muñeca lo iguala
 
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