¡Ey, pura vida, comadres y compas del Foro! Se prendió el Avenidazo en el bulevar de la Avenida Central, y vaya que le puso chispa a la Navidad josefina. Desde las seis de la tarde, el centro se inundó de luces, música a todo volumen y esos personajes navideños que nos traen recuerdos de cuando éramos bien chicuelos. Al final, sí, estuvo bacán, pero también hubo unos bretes que dejaron a varios rayados.
Como ya saben, el Avenidazo es una tradición que viene dando vueltas desde hace años, buscando darle un empujón al espíritu navideño en la capital. La Municipalidad había prometido un espectáculo a lo grande, con pasacalles, coros, cimarronas… la onda completa. Y en eso, cumplieron, porque la verdad es que el colorido y el movimiento eran una maravilla. Parecía que hasta Santa Claus vino a bailar un poquito, ¡jeje!
Sin embargo, no todo fue miel sobre hojuelas, diay. Según algunos asistente que entrevistamos ahí mismo en el lugar, la organización dejó bastante que desear. Había filas kilométricas para conseguir comida, los baños estaban en condiciones deplorables (¡qué torta!) y el sonido en algunas zonas era tan bajo que parecíamos estar escuchando una canción desde la Luna. Algunos incluso comentaban que les faltaba agua, y con este calor que ha caído, eso es un verdadero problema.
Y ni hablar del estacionamiento, ¡ese fue un fiasco total! Muchísima gente tuvo que dejar sus carros abandonados en cualquier lado, generando un tremendo embotellamiento en las cercanías del bulevar. Parecía que la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) estaba tomando café mientras la ciudad entera estaba hecha un caos. Muchos llegaron tarde al evento porque se jalaron una torta tratando de encontrar dónde aparcar. ¿En serio, AMT?
Pero bueno, no todo es negativo, ¿verdad? Los artistas se lucieron, la gente bailó, cantó y se divirtió a pesar de los contratiempos. Vimos grupos de marimba, bandas de viento, bailarines folclóricos… ¡una verdadera explosión de talento nacional! Los malabaristas mostraron sus habilidades impresionantes, dejando a todos boquiabiertos. Además, los niños estaban felices de ver a Papá Noel y a los duendes repartiendo dulces.
Uno de los momentos más emocionantes fue cuando apareció un coro infantil interpretando villancicos tradicionales. ¡Qué cosita más linda! Hasta algunos adultos no pudieron evitar soltar unas lágrimas de emoción al escuchar esas canciones que nos recuerdan a nuestra infancia. Eso sí puso a muchos a recordar los tiempos aquellos, cuando las cosas eran más sencillas.
Ahora, la celebración continuará mañana en la Avenida 4, con otro Avenidazo similar al de hoy, aunque con un recorrido diferente. Así que si se perdieron la fiesta de hoy, todavía tienen una oportunidad de sumarse a la diversión. Pero ojo, vayan preparados para las filas y los posibles inconvenientes. Porque la verdad, parece que la Municipalidad necesita ponerle más carga a la logística de estos eventos. Que aprendan, ¡por favor!
En fin, el Avenidazo sigue siendo una tradición importante para San José y para Costa Rica en general. Pero, comadres y compas, díganme: ¿Ustedes creen que la Municipalidad debería invertir más en mejorar la organización de estos eventos para que todos puedan disfrutarla al máximo sin tener que pasar tantos disgustos? ¿Se deberían buscar alternativas para solucionar el problema del estacionamiento y la falta de servicios básicos?
Como ya saben, el Avenidazo es una tradición que viene dando vueltas desde hace años, buscando darle un empujón al espíritu navideño en la capital. La Municipalidad había prometido un espectáculo a lo grande, con pasacalles, coros, cimarronas… la onda completa. Y en eso, cumplieron, porque la verdad es que el colorido y el movimiento eran una maravilla. Parecía que hasta Santa Claus vino a bailar un poquito, ¡jeje!
Sin embargo, no todo fue miel sobre hojuelas, diay. Según algunos asistente que entrevistamos ahí mismo en el lugar, la organización dejó bastante que desear. Había filas kilométricas para conseguir comida, los baños estaban en condiciones deplorables (¡qué torta!) y el sonido en algunas zonas era tan bajo que parecíamos estar escuchando una canción desde la Luna. Algunos incluso comentaban que les faltaba agua, y con este calor que ha caído, eso es un verdadero problema.
Y ni hablar del estacionamiento, ¡ese fue un fiasco total! Muchísima gente tuvo que dejar sus carros abandonados en cualquier lado, generando un tremendo embotellamiento en las cercanías del bulevar. Parecía que la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) estaba tomando café mientras la ciudad entera estaba hecha un caos. Muchos llegaron tarde al evento porque se jalaron una torta tratando de encontrar dónde aparcar. ¿En serio, AMT?
Pero bueno, no todo es negativo, ¿verdad? Los artistas se lucieron, la gente bailó, cantó y se divirtió a pesar de los contratiempos. Vimos grupos de marimba, bandas de viento, bailarines folclóricos… ¡una verdadera explosión de talento nacional! Los malabaristas mostraron sus habilidades impresionantes, dejando a todos boquiabiertos. Además, los niños estaban felices de ver a Papá Noel y a los duendes repartiendo dulces.
Uno de los momentos más emocionantes fue cuando apareció un coro infantil interpretando villancicos tradicionales. ¡Qué cosita más linda! Hasta algunos adultos no pudieron evitar soltar unas lágrimas de emoción al escuchar esas canciones que nos recuerdan a nuestra infancia. Eso sí puso a muchos a recordar los tiempos aquellos, cuando las cosas eran más sencillas.
Ahora, la celebración continuará mañana en la Avenida 4, con otro Avenidazo similar al de hoy, aunque con un recorrido diferente. Así que si se perdieron la fiesta de hoy, todavía tienen una oportunidad de sumarse a la diversión. Pero ojo, vayan preparados para las filas y los posibles inconvenientes. Porque la verdad, parece que la Municipalidad necesita ponerle más carga a la logística de estos eventos. Que aprendan, ¡por favor!
En fin, el Avenidazo sigue siendo una tradición importante para San José y para Costa Rica en general. Pero, comadres y compas, díganme: ¿Ustedes creen que la Municipalidad debería invertir más en mejorar la organización de estos eventos para que todos puedan disfrutarla al máximo sin tener que pasar tantos disgustos? ¿Se deberían buscar alternativas para solucionar el problema del estacionamiento y la falta de servicios básicos?
