¡Ay, dios mío, qué rollo se armó! Resulta que el Presidente Chaves se encontró con una pared de ladrillo por parte de la Iglesia Católica en el tema de las frecuencias de radio. Después de toda la movida con las radios católicas y evangélicas, parece que la cosa se puso más caliente que un tamal en diciembre.
Como recordarán, la polémica comenzó cuando el Presidente Chaves criticó duramente a Monseñor Rafael Quirós y luego propuso dar un tratamiento especial a estas emisoras religiosas. Pero bueno, ahí estaban ellos, los obispos, dejando claro que esa idea no les cayó nada bien. Más bien, dijeron que parecía una jugada poco justa y que no iba con la onda de tener un juego limpio en el manejo del espectro radioeléctrico. ¡Un brete!
Según un comunicado emitido por la Conferencia Episcopal, la propuesta de Chaves de crear “beneficios especiales” para las radios religiosas era “imprudente”. Dijeron textualmente que el diálogo social debía basarse en la justicia y la igualdad, no en hacerle favores a unos y dejar a otros colgados. Claramente, no estaban pa’ bromear con esto, mae. Se nota que la Vara estaba pesada para el Presidente.
Y como si fuera poco, la Iglesia reafirmó que no busca privilegios ni andar pidiendo migajas. Que ellos quieren seguir haciendo su labor evangelizadora con los recursos que tienen, sin necesidad de que el gobierno les dé facilidades especiales. Lo cual, honestamente, suena bastante razonable, ¿no creen?
Ahora, Chaves salió a defenderse, diciendo que él no quiere meterse en broncas con la Iglesia. "No nos van a poner a pelear, nos amamos, que Dios los bendiga," enfatizó. Insistió en que simplemente quería encontrar una solución para las radios católicas y evangélicas, pero que ahora parece que todos se han ido al traste por un tema de orgullo. ¡Qué carga!
El Presidente también mencionó que las radios católicas no asistieron a la subasta inicial de frecuencias y que su propuesta era darle acceso diferenciado, pero ahora rechazan la oferta. Una situación digna de analizar, porque ahí hay mucho churrisgo detrás. Parece que el presidente está batallando contra corrientes internas y externas a la vez, y eso nunca es fácil, chunche.
Para rematar, el Presidente insistió en que él es una persona “temerosa de Dios” y que trata de actuar conforme a las enseñanzas cristianas. Pero bueno, entre tanta declaración y contradicción, cuesta entender cuál es exactamente su postura. Hay quienes dicen que esto es pura estrategia política para ganar votos, mientras que otros creen que realmente está confundido.
En fin, la cosa está servida. Un lío político-religioso que ha polarizado aún más a la sociedad costarricense. Parece que este cambio de mando 2025 va a estar cargado de sorpresas y controversias. Ahora, díganme ustedes: ¿Creen que el Presidente Chaves debería reconsiderar su postura frente a la Iglesia Católica, o deberían mantener firme su criterio de evitar concesiones especiales? ¿Y cómo ven el impacto de esta polémica en el panorama político nacional?
Como recordarán, la polémica comenzó cuando el Presidente Chaves criticó duramente a Monseñor Rafael Quirós y luego propuso dar un tratamiento especial a estas emisoras religiosas. Pero bueno, ahí estaban ellos, los obispos, dejando claro que esa idea no les cayó nada bien. Más bien, dijeron que parecía una jugada poco justa y que no iba con la onda de tener un juego limpio en el manejo del espectro radioeléctrico. ¡Un brete!
Según un comunicado emitido por la Conferencia Episcopal, la propuesta de Chaves de crear “beneficios especiales” para las radios religiosas era “imprudente”. Dijeron textualmente que el diálogo social debía basarse en la justicia y la igualdad, no en hacerle favores a unos y dejar a otros colgados. Claramente, no estaban pa’ bromear con esto, mae. Se nota que la Vara estaba pesada para el Presidente.
Y como si fuera poco, la Iglesia reafirmó que no busca privilegios ni andar pidiendo migajas. Que ellos quieren seguir haciendo su labor evangelizadora con los recursos que tienen, sin necesidad de que el gobierno les dé facilidades especiales. Lo cual, honestamente, suena bastante razonable, ¿no creen?
Ahora, Chaves salió a defenderse, diciendo que él no quiere meterse en broncas con la Iglesia. "No nos van a poner a pelear, nos amamos, que Dios los bendiga," enfatizó. Insistió en que simplemente quería encontrar una solución para las radios católicas y evangélicas, pero que ahora parece que todos se han ido al traste por un tema de orgullo. ¡Qué carga!
El Presidente también mencionó que las radios católicas no asistieron a la subasta inicial de frecuencias y que su propuesta era darle acceso diferenciado, pero ahora rechazan la oferta. Una situación digna de analizar, porque ahí hay mucho churrisgo detrás. Parece que el presidente está batallando contra corrientes internas y externas a la vez, y eso nunca es fácil, chunche.
Para rematar, el Presidente insistió en que él es una persona “temerosa de Dios” y que trata de actuar conforme a las enseñanzas cristianas. Pero bueno, entre tanta declaración y contradicción, cuesta entender cuál es exactamente su postura. Hay quienes dicen que esto es pura estrategia política para ganar votos, mientras que otros creen que realmente está confundido.
En fin, la cosa está servida. Un lío político-religioso que ha polarizado aún más a la sociedad costarricense. Parece que este cambio de mando 2025 va a estar cargado de sorpresas y controversias. Ahora, díganme ustedes: ¿Creen que el Presidente Chaves debería reconsiderar su postura frente a la Iglesia Católica, o deberían mantener firme su criterio de evitar concesiones especiales? ¿Y cómo ven el impacto de esta polémica en el panorama político nacional?
