¡Ay, Dios mío! Se armó un lingote en Las Vegas, mi gente. Bad Bunny se llevó la noche en los Grammy Latinos, acumulando cinco estatuillas y demostrando que sí sabe darle candela al escenario. El “conejo malo”, como le llamamos acá, dejó claro que no hay quien le gane en esto de la música urbana y que sigue siendo el rey indiscutible. ¡Un verdadero toke de oro!
Para los que andaban desconectados, los Grammy Latinos número 26 se celebraron este 13 de noviembre, y como era de esperarse, fueron pura fiesta y talento latinoamericano. Actuaciones a toda máquina, desde Gloria Estefan hasta Los Tigres del Norte, pasando por Karol G y Rauw Alejandro. Un verdadero espectáculo que nos recordó qué tan rica es nuestra música.
Pero bueno, vamos al grano. Bad Bunny se alzó con el codiciado premio al Álbum del Año gracias a su disco “DeBÍ TiRAR Más FOTOS”. También se quedó con Grabación del Año, Mejor Fusión/Interpretación Urbana, Mejor Interpretación de Reguetón y Mejor Álbum de Música Urbana, ¡una verdadera barrigada! Claramente, el disco que lo llevó a una exitosa temporada en Puerto Rico conectó con el público a nivel global.
Y ni hablar de Ca7riel & Paco Amoroso, esos bacanes argentinos que también hicieron moscas con dos premios, incluyendo el de Mejor Canción Pop con “El Día del Amigo”. ¡Demonios, qué tuanis ver cómo la música argentina y puertoriqueña se complementan así! Eso sí que es nivel, diay.
En cuanto a otros ganadores destacados, Fito Páez se llevó el premio al Mejor Álbum de Rock con su “Novela”, Paloma Morphy fue coronada como la Mejor Nueva Artista y Liniker brilló con sus propuestas en la categoría de Pop Contemporáneo en Lengua Portuguesa y Canción en Lengua Portuguesa. Reconocimientos merecidos para estos talentosos artistas.
Lo que realmente me cayó bien, y creo que hizo eco en muchísima gente, fue el discurso de Bad Bunny al recibir su galardón. El artista, conocido por su estilo directo y sincero, dedicó su premio “a todos los niños y jóvenes de Latinoamérica”, recordándoles que “no importa de dónde vengan, no olviden de dónde vienen”. Un mensaje poderoso que nos recuerda nuestras raíces y la importancia de representar nuestro origen con orgullo. Además, comentó que la colaboración con nuevos talentos de su isla fue fundamental para el éxito del álbum; ¡siempre apoyando a la cantera, eso lo hace un mae especial!
Y hablando de temas más polémicos, recordemos que Bad Bunny había declinado incluir a Estados Unidos en su gira mundial debido a las políticas migratorias del entonces presidente Donald Trump. Esto generó un revuelo enorme y demostró su compromiso con la comunidad latina. Este gesto solidario, sumado a su reciente participación en el medio tiempo de la Liga de Fútbol Americano, lo consolidan como un referente cultural de alcance global. ¡Un verdadero ejemplo a seguir!
Bueno, mi gente, ya vieron la nota completa. Ahora quiero saber qué les pareció la premiación de este año. ¿Están de acuerdo con los ganadores? ¿Creen que Bad Bunny se merece todo el reconocimiento que ha recibido? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios! Y díganme, ¿qué artista latinoamericano creen que dará la batalla el próximo año?
Para los que andaban desconectados, los Grammy Latinos número 26 se celebraron este 13 de noviembre, y como era de esperarse, fueron pura fiesta y talento latinoamericano. Actuaciones a toda máquina, desde Gloria Estefan hasta Los Tigres del Norte, pasando por Karol G y Rauw Alejandro. Un verdadero espectáculo que nos recordó qué tan rica es nuestra música.
Pero bueno, vamos al grano. Bad Bunny se alzó con el codiciado premio al Álbum del Año gracias a su disco “DeBÍ TiRAR Más FOTOS”. También se quedó con Grabación del Año, Mejor Fusión/Interpretación Urbana, Mejor Interpretación de Reguetón y Mejor Álbum de Música Urbana, ¡una verdadera barrigada! Claramente, el disco que lo llevó a una exitosa temporada en Puerto Rico conectó con el público a nivel global.
Y ni hablar de Ca7riel & Paco Amoroso, esos bacanes argentinos que también hicieron moscas con dos premios, incluyendo el de Mejor Canción Pop con “El Día del Amigo”. ¡Demonios, qué tuanis ver cómo la música argentina y puertoriqueña se complementan así! Eso sí que es nivel, diay.
En cuanto a otros ganadores destacados, Fito Páez se llevó el premio al Mejor Álbum de Rock con su “Novela”, Paloma Morphy fue coronada como la Mejor Nueva Artista y Liniker brilló con sus propuestas en la categoría de Pop Contemporáneo en Lengua Portuguesa y Canción en Lengua Portuguesa. Reconocimientos merecidos para estos talentosos artistas.
Lo que realmente me cayó bien, y creo que hizo eco en muchísima gente, fue el discurso de Bad Bunny al recibir su galardón. El artista, conocido por su estilo directo y sincero, dedicó su premio “a todos los niños y jóvenes de Latinoamérica”, recordándoles que “no importa de dónde vengan, no olviden de dónde vienen”. Un mensaje poderoso que nos recuerda nuestras raíces y la importancia de representar nuestro origen con orgullo. Además, comentó que la colaboración con nuevos talentos de su isla fue fundamental para el éxito del álbum; ¡siempre apoyando a la cantera, eso lo hace un mae especial!
Y hablando de temas más polémicos, recordemos que Bad Bunny había declinado incluir a Estados Unidos en su gira mundial debido a las políticas migratorias del entonces presidente Donald Trump. Esto generó un revuelo enorme y demostró su compromiso con la comunidad latina. Este gesto solidario, sumado a su reciente participación en el medio tiempo de la Liga de Fútbol Americano, lo consolidan como un referente cultural de alcance global. ¡Un verdadero ejemplo a seguir!
Bueno, mi gente, ya vieron la nota completa. Ahora quiero saber qué les pareció la premiación de este año. ¿Están de acuerdo con los ganadores? ¿Creen que Bad Bunny se merece todo el reconocimiento que ha recibido? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios! Y díganme, ¿qué artista latinoamericano creen que dará la batalla el próximo año?