¡Ay, Dios mío, qué bochornito de alegría! Ya empezó la temporada navideña en Costa Rica y nuestros parques se ven más bonitos que nunca gracias a la iluminación que han puesto nuestras municipalidades. Parece que hasta el sol se puso celoso de tanta luz.
Este fin de semana y durante la próxima semana, prácticamente todos los cantones del país han estado inaugurando sus parques con espectáculos de luces, música y, claro, ¡la típica rifa para echarle ganas! Las familias se reunieron desde temprano, algunas con sus churros en mano, buscando el mejor lugar para ver la iluminación y tomarse unas fotos para presumir en Facebook. ¡Un chivazo tremendo!
Desde Guápiles hasta Zarcero, pasando por Grecia, Santa Ana, San Ramón y Heredia, los parques se han transformado en escenarios mágicos con árboles gigantes cubiertos de luces multicolores, personajes navideños inflables y hasta presagios de Reyes Magos que ya andan dando vueltas. Se nota que las autoridades locales le pusieronle garra para hacer de estas fiestas algo especial.
Según fuentes municipales, la inversión en iluminación varió dependiendo del tamaño del parque y las posibilidades económicas de cada cantón. Algunos optaron por luces LED de bajo consumo energético para cuidar el planeta, mientras que otros se lucieron con sistemas de proyección de imágenes y efectos especiales que dejaban a propios y extraños con la boca abierta. ¡Qué carga de creatividad!
Pero no todo es brillo y color, porque también hay que recordar que estas fiestas suelen venir acompañadas de algunos inconvenientes, como el aumento del tráfico, la venta ambulante y, para algunos, la preocupación por el gasto económico. Unos dicen que gastamos más en decoración que en comida, ¡y ahí hay que ponerle pausa a eso!
Sin embargo, el ambiente general es de optimismo y celebración. Muchos aprovechan estos días para fortalecer los lazos familiares, compartir momentos especiales y agradecer por las bendiciones recibidas. Además, la iluminación de los parques es un atractivo turístico importante que beneficia a los negocios locales y fomenta el desarrollo económico de cada cantón. ¡Un win-win pa’ tó!
Y ni hablar de la seguridad. La policía ha reforzado la vigilancia en las zonas turísticas y alrededor de los parques para prevenir robos y otros delitos. Así que, aunque nos pongamos a gozar, ¡hay que estar atentos a nuestras pertenencias y cuidar a nuestros niños! Porque, diay, nadie quiere empezar el Año Nuevo con una vara mala.
En fin, ¡parece que la Navidad llegó para quedarse! Con luces, música, alegría y mucho cariño tico. Ahora me pregunto, ¿cuál es el recuerdo más lindo que tienes de las navidades pasadas en algún parque iluminado de nuestro hermoso país?
Este fin de semana y durante la próxima semana, prácticamente todos los cantones del país han estado inaugurando sus parques con espectáculos de luces, música y, claro, ¡la típica rifa para echarle ganas! Las familias se reunieron desde temprano, algunas con sus churros en mano, buscando el mejor lugar para ver la iluminación y tomarse unas fotos para presumir en Facebook. ¡Un chivazo tremendo!
Desde Guápiles hasta Zarcero, pasando por Grecia, Santa Ana, San Ramón y Heredia, los parques se han transformado en escenarios mágicos con árboles gigantes cubiertos de luces multicolores, personajes navideños inflables y hasta presagios de Reyes Magos que ya andan dando vueltas. Se nota que las autoridades locales le pusieronle garra para hacer de estas fiestas algo especial.
Según fuentes municipales, la inversión en iluminación varió dependiendo del tamaño del parque y las posibilidades económicas de cada cantón. Algunos optaron por luces LED de bajo consumo energético para cuidar el planeta, mientras que otros se lucieron con sistemas de proyección de imágenes y efectos especiales que dejaban a propios y extraños con la boca abierta. ¡Qué carga de creatividad!
Pero no todo es brillo y color, porque también hay que recordar que estas fiestas suelen venir acompañadas de algunos inconvenientes, como el aumento del tráfico, la venta ambulante y, para algunos, la preocupación por el gasto económico. Unos dicen que gastamos más en decoración que en comida, ¡y ahí hay que ponerle pausa a eso!
Sin embargo, el ambiente general es de optimismo y celebración. Muchos aprovechan estos días para fortalecer los lazos familiares, compartir momentos especiales y agradecer por las bendiciones recibidas. Además, la iluminación de los parques es un atractivo turístico importante que beneficia a los negocios locales y fomenta el desarrollo económico de cada cantón. ¡Un win-win pa’ tó!
Y ni hablar de la seguridad. La policía ha reforzado la vigilancia en las zonas turísticas y alrededor de los parques para prevenir robos y otros delitos. Así que, aunque nos pongamos a gozar, ¡hay que estar atentos a nuestras pertenencias y cuidar a nuestros niños! Porque, diay, nadie quiere empezar el Año Nuevo con una vara mala.
En fin, ¡parece que la Navidad llegó para quedarse! Con luces, música, alegría y mucho cariño tico. Ahora me pregunto, ¿cuál es el recuerdo más lindo que tienes de las navidades pasadas en algún parque iluminado de nuestro hermoso país?
