Ay, Dios mío, qué vaina. El Presidente Chaves se echó un hombrón en la comisión de desafuero y soltó verdades que parecían sacadas de un partido de pool. Desde temprano se notaba que iba a haber bronca, pero nadie esperaba que el tipo se descargara tanto contra la presidenta de la comisión, Doña Alejandra Larios. Parece que la aplicación del reglamento no le cayó nada agridulce, ¡para nada!
Para refrescarles la memoria, todo esto viene porque el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) metió 15 denuncias por supuesta beligerancia contra el Presidente. Por eso, la comisión estaba analizando si se levanta o no su fuerito. Pero bueno, ahí entraron las movidas, las mociones, los tiempos… y Chaves explotó como un volcán.
Según la presidenta de la comisión, Larios Trejos, quien está representando al PLN, dictaminó quién hablaba primero y cuánto tiempo tenían para exponer sus argumentos, basándose en una resolución de la presidenta interina de la Asamblea Legislativa, Vanessa Castro Mora (PUSC). Esto, aparentemente, no le gustó para nada al mandatario, que sintió que se estaba armando un plan en su contra. Diay, parece que las cosas se pusieron bastante calientes.
Y ahí empezó el show, mis queridos lectores. Chaves no se anduvo con rodeos y acusó a Larios y a la diputada Rocio Alfaro (FA) de organizar un “linchamiento político”. Las frases que salió disparando eran de otro mundo: ‘No quisiera estar en sus zapatos’, ‘me da pena ajena’, ‘esto es un circo, una ópera bufa’. Hasta le dijo a Larios que aprendiera bien de su “amiga” Eugenia Zamora a ponerle “mordazas”, ¡qué valentía!
Además, tampoco perdonó a Vanessa Castro, a quien fustigó duramente por emitir esa resolución en ausencia de Rodrigo Arias Sánchez. Se agarró a su inmunidad con uñas y dientes, afirmando que no renunciaría ni aunque le ofrecieran oro de Etiopía. El mae parece decidido a pelearla hasta el final, asegurando que defenderá su nombre y su posición. Ustedes ya saben cómo es, siempre buscando la salida.
Después de la audiencia, la comisión ahora tiene hasta el 30 de noviembre para presentar un informe al Plenario Legislativo. Ese informe deberá recomendar si se levanta o no el fuerito del Presidente. Lo que sí se sabe es que la decisión final estará en manos de los diputados, quienes tendrán entre 8 y 10 días hábiles para votar. O sea, todavía tenemos unos buenos días de intriga y moviditas políticas por delante. Este brete va para largo, chunches.
Ahora, hablando claro, la escena parecía sacada de una telenovela. Un lado dice que Chaves está haciendo un escándalo innecesario, mientras que otros aseguran que la comisión está tratando de acallarlo. La verdad es que aquí hay mucha tela que cortar y cada quien defiende su postura. Al final, lo importante es ver si la justicia prevalece y se hace lo correcto, diay. Eso sí, que no se venga alguien a llorarle a nadie si las cosas no salen como quieren.
En fin, viendo todo este rollo, me pregunto: ¿Creen ustedes que el Presidente debería haber aceptado la investigación sin aferrarse a su inmunidad, o tiene derecho a defenderse ante estas acusaciones? Déjenme saber su opinión en los comentarios, ¡queremos escuchar sus puntos de vista sobre este asunto!
Para refrescarles la memoria, todo esto viene porque el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) metió 15 denuncias por supuesta beligerancia contra el Presidente. Por eso, la comisión estaba analizando si se levanta o no su fuerito. Pero bueno, ahí entraron las movidas, las mociones, los tiempos… y Chaves explotó como un volcán.
Según la presidenta de la comisión, Larios Trejos, quien está representando al PLN, dictaminó quién hablaba primero y cuánto tiempo tenían para exponer sus argumentos, basándose en una resolución de la presidenta interina de la Asamblea Legislativa, Vanessa Castro Mora (PUSC). Esto, aparentemente, no le gustó para nada al mandatario, que sintió que se estaba armando un plan en su contra. Diay, parece que las cosas se pusieron bastante calientes.
Y ahí empezó el show, mis queridos lectores. Chaves no se anduvo con rodeos y acusó a Larios y a la diputada Rocio Alfaro (FA) de organizar un “linchamiento político”. Las frases que salió disparando eran de otro mundo: ‘No quisiera estar en sus zapatos’, ‘me da pena ajena’, ‘esto es un circo, una ópera bufa’. Hasta le dijo a Larios que aprendiera bien de su “amiga” Eugenia Zamora a ponerle “mordazas”, ¡qué valentía!
Además, tampoco perdonó a Vanessa Castro, a quien fustigó duramente por emitir esa resolución en ausencia de Rodrigo Arias Sánchez. Se agarró a su inmunidad con uñas y dientes, afirmando que no renunciaría ni aunque le ofrecieran oro de Etiopía. El mae parece decidido a pelearla hasta el final, asegurando que defenderá su nombre y su posición. Ustedes ya saben cómo es, siempre buscando la salida.
Después de la audiencia, la comisión ahora tiene hasta el 30 de noviembre para presentar un informe al Plenario Legislativo. Ese informe deberá recomendar si se levanta o no el fuerito del Presidente. Lo que sí se sabe es que la decisión final estará en manos de los diputados, quienes tendrán entre 8 y 10 días hábiles para votar. O sea, todavía tenemos unos buenos días de intriga y moviditas políticas por delante. Este brete va para largo, chunches.
Ahora, hablando claro, la escena parecía sacada de una telenovela. Un lado dice que Chaves está haciendo un escándalo innecesario, mientras que otros aseguran que la comisión está tratando de acallarlo. La verdad es que aquí hay mucha tela que cortar y cada quien defiende su postura. Al final, lo importante es ver si la justicia prevalece y se hace lo correcto, diay. Eso sí, que no se venga alguien a llorarle a nadie si las cosas no salen como quieren.
En fin, viendo todo este rollo, me pregunto: ¿Creen ustedes que el Presidente debería haber aceptado la investigación sin aferrarse a su inmunidad, o tiene derecho a defenderse ante estas acusaciones? Déjenme saber su opinión en los comentarios, ¡queremos escuchar sus puntos de vista sobre este asunto!