¡Ay, Dios mío, qué historia nos cayó encima! Resulta que la presidenta del Instituto Nacional de la Mujer (Inamu), Yerlin Zúñiga, intentó agarrar la gallina equivocada tratando de salirse de responder preguntas ante los diputados. Quiso usar un truco barato, alegando que estaba bajo investigación, pero ¡boom!, los diputados le descubrieron la jugada y resultó que el expediente que mencionó era pura invención. Una verdadera torta, mae.
Todo este brete comenzó porque los legisladores querían preguntarle a Zúñiga sobre unos ofrecimientos de beneficios estatales a una señora de Turrialba. Parece ser que la señora en cuestión acusó al director separado del OIJ, Randall Zúñiga López (sí, el mismo apellido, ¡qué diay!), de delitos sexuales. La idea era aclarar la situación, pero la presidenta del Inamu decidió ponerle pausa a la cosa usando un argumento que, como vemos ahora, era más falso que billete de banco.
Cuando llegó el momento de la audiencia, Zúñiga soltó la bomba: “No me voy a referir en detalle a los casos…existe una denuncia relacionada…el Ministerio Público ha abierto una investigación bajo el expediente 25-000974-359-PE”. Se creyó lista, pensando que así se la podía pasar de astuta, pero olvidó un detalle crucial: ¡los diputados tienen acceso a la información!
La diputada Dinorah Barquero (PLN) fue la primera en levantar la ceja. Directamente le preguntó a Zúñiga si había sido notificada de esa supuesta causa. La respuesta fue un simple “No, señora”. Y Barquero, sin darle respiro, insistió: “Entonces usted no es parte de ningún proceso”. ¡Como si fuera tan sencillo evadir responsabilidades, eh!
Pero Zúñiga no se quedó callada. Afirmó estar “bajo la figura de sospechosa”, lo que, según sus propias palabras, le impedía dar más detalles. ¡Una excusa más grande que el Volcán Arenal, mae! Parecía sacada directamente del manual de ‘cómo evadir preguntas a toda costa’.
El diputado Nicolás Alvarado fue quien desenmascaró la mentira. Reveló que el expediente mencionado por Zúñiga no tenía a nadie identificado, sino que se seguía una causa contra “persona ignorada”. ¡Imagínate eso! Un juicio contra alguien que ni siquiera saben quién es. Claramente, Zúñiga se había inventado la historia completa.
Y lo más impactante vino después. La diputada Barquero informó que la Fiscalía les había confirmado oficialmente que el número de expediente proporcionado por Zúñiga simplemente no existía en su sistema. ¡Ni siquiera figuraba! La respuesta llegó puntualmente a las 17:15. Resulta que el expediente más cercano era el 25-000971-0359-PE, relacionado con un abuso de autoridad contra “persona ignorada” y sin ninguna conexión con Zúñiga ni con la abogada del Inamu, Claudia Blanco. ¡Un verdadero chinchorreo de papeles y falsedades!
Ante esta evidencia irrefutable, la diputada Barquero sentenció: “Usted está presentando a esta comisión el número de una causa que no existe en la Fiscalía. Por lo tanto, su argumento de que está siendo investigada o que forma parte de una causa no es veraz.” Ahora, los diputados están debatiendo si citarla a declarar nuevamente y si pudo haber cometido falta a la verdad. ¡Esto promete, mae! ¿Creen que Yerlin Zúñiga debería renunciar a su puesto tras este bochinche o deberían esperar a que avance la investigación? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero saber qué piensa la gente!
Todo este brete comenzó porque los legisladores querían preguntarle a Zúñiga sobre unos ofrecimientos de beneficios estatales a una señora de Turrialba. Parece ser que la señora en cuestión acusó al director separado del OIJ, Randall Zúñiga López (sí, el mismo apellido, ¡qué diay!), de delitos sexuales. La idea era aclarar la situación, pero la presidenta del Inamu decidió ponerle pausa a la cosa usando un argumento que, como vemos ahora, era más falso que billete de banco.
Cuando llegó el momento de la audiencia, Zúñiga soltó la bomba: “No me voy a referir en detalle a los casos…existe una denuncia relacionada…el Ministerio Público ha abierto una investigación bajo el expediente 25-000974-359-PE”. Se creyó lista, pensando que así se la podía pasar de astuta, pero olvidó un detalle crucial: ¡los diputados tienen acceso a la información!
La diputada Dinorah Barquero (PLN) fue la primera en levantar la ceja. Directamente le preguntó a Zúñiga si había sido notificada de esa supuesta causa. La respuesta fue un simple “No, señora”. Y Barquero, sin darle respiro, insistió: “Entonces usted no es parte de ningún proceso”. ¡Como si fuera tan sencillo evadir responsabilidades, eh!
Pero Zúñiga no se quedó callada. Afirmó estar “bajo la figura de sospechosa”, lo que, según sus propias palabras, le impedía dar más detalles. ¡Una excusa más grande que el Volcán Arenal, mae! Parecía sacada directamente del manual de ‘cómo evadir preguntas a toda costa’.
El diputado Nicolás Alvarado fue quien desenmascaró la mentira. Reveló que el expediente mencionado por Zúñiga no tenía a nadie identificado, sino que se seguía una causa contra “persona ignorada”. ¡Imagínate eso! Un juicio contra alguien que ni siquiera saben quién es. Claramente, Zúñiga se había inventado la historia completa.
Y lo más impactante vino después. La diputada Barquero informó que la Fiscalía les había confirmado oficialmente que el número de expediente proporcionado por Zúñiga simplemente no existía en su sistema. ¡Ni siquiera figuraba! La respuesta llegó puntualmente a las 17:15. Resulta que el expediente más cercano era el 25-000971-0359-PE, relacionado con un abuso de autoridad contra “persona ignorada” y sin ninguna conexión con Zúñiga ni con la abogada del Inamu, Claudia Blanco. ¡Un verdadero chinchorreo de papeles y falsedades!
Ante esta evidencia irrefutable, la diputada Barquero sentenció: “Usted está presentando a esta comisión el número de una causa que no existe en la Fiscalía. Por lo tanto, su argumento de que está siendo investigada o que forma parte de una causa no es veraz.” Ahora, los diputados están debatiendo si citarla a declarar nuevamente y si pudo haber cometido falta a la verdad. ¡Esto promete, mae! ¿Creen que Yerlin Zúñiga debería renunciar a su puesto tras este bochinche o deberían esperar a que avance la investigación? Dejen sus opiniones abajo, ¡quiero saber qué piensa la gente!