¡Ay, Dios mío! Quién iba a decir que Santa Ana se pondría tan green, ¿eh? Resulta que nuestros ayuntamiento se rifaron y se llevaron siete Banderas Azules Ecológicas este año. Sí, señor, ¡sieteeee! Una verdadera loa para la administración local y un espaldarazo pa’ demostrarle al país que sí podemos andar haciendo las cosas bien con el medio ambiente.
La movida, como ustedes saben, es que el Programa Bandera Azul Ecológica premia a los gobiernos locales que le dan duro a las prácticas sustentables. No es cosa sencilla, se trata de cumplir con un montón de requisitos ambientales desde la gestión de residuos hasta el ahorro de energía. Y parece que los edificios municipales de Santa Ana han estado sudando la camiseta para lograrlo, ¡y les salió provechoso!
Lo más impresionante es que el edificio principal, donde hacen todas las gestiones y trámites –el lugar donde nos toca pasar horas esperando–, se ganó incluso el codiciado distintivo de tres estrellas. Esto significa que cumplieron con el Plan de Gestión Ambiental Institucional, se pusieron las pilas con el reciclaje e hicieron un buen trabajo protegiendo nuestras cuencas hidrográficas. ¡Eso sí que es trabajar!
Este programa, vamos a ser honestos, no es nuevo. Ya lleva varios años incentivando a las municipalidades a cuidar el planeta y mejorar sus procesos. Pero Santa Ana se lució este año, uniéndose a otras 23 municipalidades que también recibieron el premio. Imagínense, ¡casi un cuarto de las municipalidades del país aplaudiendo por hacer lo correcto!
El comité evaluador, que no es cualquier vaina, está compuesto por gente seria de instituciones como la UNGL, el IFAM, el AYA y el MINAE. Estos señores se dedican a revisar si realmente estamos cumpliendo con los estándares ambientales. Así que no es fácil hacerse con este galardón, requiere esfuerzo y constancia.
Más allá de la foto bonita y el reconocimiento público, esto significa que Santa Ana está comprometiéndose a largo plazo con el cuidado del medio ambiente. Según Rosa Muñoz, la encargada del Proceso de Gestión Ambiental, “reportan resultados muy positivos” en temas como la gestión hídrica, el uso de combustibles, la eficiencia energética y, claro, la gestión de residuos. En tiempos de crisis nacional en materia de residuos, esto es más importante que nunca, ¿verdad?
Ahora, con la iza oficial de la Bandera Azul Ecológica programada para el 8 de diciembre en el Edificio Municipal, todos tendremos la oportunidad de celebrar estos logros. Es un momento para sentirnos orgullosos de nuestro cantón y de saber que estamos caminando por el camino correcto hacia un futuro más sostenible. Ojalá que todos los municipios tomen nota y se pongan las pilas como Santa Ana.
Entre tanto, me pregunto... ¿Ustedes creen que esta iniciativa se extenderá a otros sectores de Santa Ana, como las escuelas y los negocios locales? ¿Será que pronto veremos más edificios y espacios verdes con la bandera azul ondeando al viento? ¡Dígame qué piensa al respecto!
La movida, como ustedes saben, es que el Programa Bandera Azul Ecológica premia a los gobiernos locales que le dan duro a las prácticas sustentables. No es cosa sencilla, se trata de cumplir con un montón de requisitos ambientales desde la gestión de residuos hasta el ahorro de energía. Y parece que los edificios municipales de Santa Ana han estado sudando la camiseta para lograrlo, ¡y les salió provechoso!
Lo más impresionante es que el edificio principal, donde hacen todas las gestiones y trámites –el lugar donde nos toca pasar horas esperando–, se ganó incluso el codiciado distintivo de tres estrellas. Esto significa que cumplieron con el Plan de Gestión Ambiental Institucional, se pusieron las pilas con el reciclaje e hicieron un buen trabajo protegiendo nuestras cuencas hidrográficas. ¡Eso sí que es trabajar!
Este programa, vamos a ser honestos, no es nuevo. Ya lleva varios años incentivando a las municipalidades a cuidar el planeta y mejorar sus procesos. Pero Santa Ana se lució este año, uniéndose a otras 23 municipalidades que también recibieron el premio. Imagínense, ¡casi un cuarto de las municipalidades del país aplaudiendo por hacer lo correcto!
El comité evaluador, que no es cualquier vaina, está compuesto por gente seria de instituciones como la UNGL, el IFAM, el AYA y el MINAE. Estos señores se dedican a revisar si realmente estamos cumpliendo con los estándares ambientales. Así que no es fácil hacerse con este galardón, requiere esfuerzo y constancia.
Más allá de la foto bonita y el reconocimiento público, esto significa que Santa Ana está comprometiéndose a largo plazo con el cuidado del medio ambiente. Según Rosa Muñoz, la encargada del Proceso de Gestión Ambiental, “reportan resultados muy positivos” en temas como la gestión hídrica, el uso de combustibles, la eficiencia energética y, claro, la gestión de residuos. En tiempos de crisis nacional en materia de residuos, esto es más importante que nunca, ¿verdad?
Ahora, con la iza oficial de la Bandera Azul Ecológica programada para el 8 de diciembre en el Edificio Municipal, todos tendremos la oportunidad de celebrar estos logros. Es un momento para sentirnos orgullosos de nuestro cantón y de saber que estamos caminando por el camino correcto hacia un futuro más sostenible. Ojalá que todos los municipios tomen nota y se pongan las pilas como Santa Ana.
Entre tanto, me pregunto... ¿Ustedes creen que esta iniciativa se extenderá a otros sectores de Santa Ana, como las escuelas y los negocios locales? ¿Será que pronto veremos más edificios y espacios verdes con la bandera azul ondeando al viento? ¡Dígame qué piensa al respecto!
