¡Ay, Dios mío, qué despiche con esto de las elecciones! Resulta que el Partido Pueblo Soberano (PPSO) andaba echándole humo a la olla, diciendo que el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) tenía fallas gordísimas en cómo estaban registrando a los nuevos miembros de las juntas receptoras. Contaban que había incongruencias en la plataforma y que eso estaba creando un maje, un lío tremendo en las capacitaciones y juramentos.
Según el PPSO, iban a “proteger el voto” metiendo a sus propios muchachos en las mesas, como si fuera el planazo perfecto. Pero resulta que el TSE salió con todo a rebatirles la jugada, diciendo que se jalaron una torta de principio a fin. Afirmaron que las acusaciones eran pura invención y que el sistema funciona como relojito, o bueno, casi…
"Los partidos políticos tienen dos caminos para proponer sus gente a las juntas receptoras: por la Plataforma de Servicios de Partidos Políticos (PSPP), que usamos desde el 2016, o físicamente en las juntas cantonales", le dijeron al PPSO, bien directos. Además, enfatizaron que nadie más que ellos había levantado objeciones a la plataforma, así que ahí quedó claro quién anda buscando atajos.
Y ni hablar de las nominaciones que entregaron en físico. Según el TSE, esas sí traían inconsistencias a montones, que les señalaron y que ya corrigieron. Parece que el PPSO no se enteró de que hay que revisar bien los papeles antes de mandar cualquier cosa. ¡Qué carga!
Lo poco que salió mal, contaron, fue un fallo técnico el 2 de diciembre, cuando la Fundación Omar Dengo, donde estaban capacitando a los miembros de las juntas, sufrió un problemón con Microsoft Azure. Pero lo arreglaron rapidísimo, así que tampoco fue drama mayor. Un chuche técnico, nada más.
Esto demuestra que a veces, los partidos andan buscando motivos para criticar sin razón. En lugar de colaborar para que las elecciones sean limpias y transparentes, prefieren echarle arena al mecanismo democrático. Y cuando los atrapan, pues salen con excusas baratas. Ya saben, la política es un brete, pero hay que saber jugar limpio.
Ahora, el TSE va tranquilo con los preparativos para las elecciones, esperando que todos los partidos jueguen limpio y respeten las reglas. Porque al final del día, lo importante es que la voz del pueblo se escuche fuerte y clara, sin tanto rodeos ni desvíos. Imaginen el fiaco si se sale todo de madre porque alguien no cumplió con su parte.
Pero dígame usted, ¿cree que este tipo de acusaciones sin fundamento son parte de la estrategia de algunos partidos para confundir a la población y ganar simpatías, o simplemente son resultado de la torpeza y la falta de planificación interna? ¿Le parece justo que los partidos manipulen el proceso electoral de esta manera?
Según el PPSO, iban a “proteger el voto” metiendo a sus propios muchachos en las mesas, como si fuera el planazo perfecto. Pero resulta que el TSE salió con todo a rebatirles la jugada, diciendo que se jalaron una torta de principio a fin. Afirmaron que las acusaciones eran pura invención y que el sistema funciona como relojito, o bueno, casi…
"Los partidos políticos tienen dos caminos para proponer sus gente a las juntas receptoras: por la Plataforma de Servicios de Partidos Políticos (PSPP), que usamos desde el 2016, o físicamente en las juntas cantonales", le dijeron al PPSO, bien directos. Además, enfatizaron que nadie más que ellos había levantado objeciones a la plataforma, así que ahí quedó claro quién anda buscando atajos.
Y ni hablar de las nominaciones que entregaron en físico. Según el TSE, esas sí traían inconsistencias a montones, que les señalaron y que ya corrigieron. Parece que el PPSO no se enteró de que hay que revisar bien los papeles antes de mandar cualquier cosa. ¡Qué carga!
Lo poco que salió mal, contaron, fue un fallo técnico el 2 de diciembre, cuando la Fundación Omar Dengo, donde estaban capacitando a los miembros de las juntas, sufrió un problemón con Microsoft Azure. Pero lo arreglaron rapidísimo, así que tampoco fue drama mayor. Un chuche técnico, nada más.
Esto demuestra que a veces, los partidos andan buscando motivos para criticar sin razón. En lugar de colaborar para que las elecciones sean limpias y transparentes, prefieren echarle arena al mecanismo democrático. Y cuando los atrapan, pues salen con excusas baratas. Ya saben, la política es un brete, pero hay que saber jugar limpio.
Ahora, el TSE va tranquilo con los preparativos para las elecciones, esperando que todos los partidos jueguen limpio y respeten las reglas. Porque al final del día, lo importante es que la voz del pueblo se escuche fuerte y clara, sin tanto rodeos ni desvíos. Imaginen el fiaco si se sale todo de madre porque alguien no cumplió con su parte.
Pero dígame usted, ¿cree que este tipo de acusaciones sin fundamento son parte de la estrategia de algunos partidos para confundir a la población y ganar simpatías, o simplemente son resultado de la torpeza y la falta de planificación interna? ¿Le parece justo que los partidos manipulen el proceso electoral de esta manera?
