El Presidente Oscar Arias está cansado, dice, porque la oposición no lo deja gobernar y porque son obstaculizadas sus intenciones de implementar decisiones urgentes ¿En qué no lo dejamos gobernar señor Presidente? ¿No fuimos nosotros los que encabezamos la lucha por la aprobación del TLC? ¿No llamamos la atención sobre la necesidad de utilizar los procedimientos correctos en la aprobación legislativa de la agenda de Implementación? ¿No hemos sido nosotros, acaso, los que hemos encabezado la lucha legislativa para enfrentar la inseguridad ciudadana, a pesar de su indiferencia inicial sobre este tema? ¿No hemos sido nosotros los que hemos llamado la atención sobre el papel que hoy juega el Banco Central en la inflación interna? ¿No somos acaso los que insistimos en la incidencia de la mala administración del ICE y RECOPE en el incremento del costo de vida? ¿En qué no lo hemos dejado gobernar, señor Presidente? ¿Cansado de qué, señor Presidente?
En realidad, somos los costarricenses quienes estamos cansados. Cansados de escuchar siempre las mismas promesas y lamentos, las excusas de siempre. Cansados de la mediocridad, despilfarro y negligencia con que se administran los recursos públicos. Fatigados de la inflación creciente y deterioro de nuestra calidad de vida. Fatigados, señor Presidente, de ver cómo la delincuencia nos arrebata, impunemente, vidas de seres queridos y nos roba la propiedad y los bienes que adquirimos con nuestro propio y legítimo esfuerzo.
Agotados de esperar que alguna obra pública se concluya, que el sistema público educativo sea de calidad o de esperar el fin de esa humillación que significan las grandes filas o las citas de meses en nuestro sistema de salud. Estamos cansados de ver la pobreza como una constante en nuestra realidad y, de ver, más lejana, la posibilidad de prosperar y disfrutar los beneficios del desarrollo.
Está cansado el inversionista nacional o extranjero que debe cumplir al menos 12 procedimientos diferentes para abrir un negocio, 23 procedimientos diferentes y más de 6 meses para obtener un permiso de construcción, más de 21 días y 6 pasos para registrar una propiedad, 877 días para que se resuelva una demanda legal por incumplimiento de contratos, sin dejar de mencionar los 25 días para realizar una importación.
Su cansancio, señor Presidente, en realidad, es parte del cansancio de los políticos de siempre. Para resolver este triste panorama no hacen falta más recursos o más impuestos. En lugar de lamentos y pesimismo, decisiones y voluntad política, transparencia, eficiencia y eficacia en todas las áreas de la gestión pública, empresarialismo y emprendedores, desregulación interna y apertura externa, competencia y competitividad interna.
Lamentamos el falso cansancio del señor Presidente que, sin embargo, irremediablemente confirma, una vez más, la necesidad de un nuevo liderazgo político que saque al país de las nefastas consecuencias que los políticos de siempre han producido en el pueblo costarricense. Un liderazgo sin cansancios, propios o extraños.
Movimiento Libertario!
En realidad, somos los costarricenses quienes estamos cansados. Cansados de escuchar siempre las mismas promesas y lamentos, las excusas de siempre. Cansados de la mediocridad, despilfarro y negligencia con que se administran los recursos públicos. Fatigados de la inflación creciente y deterioro de nuestra calidad de vida. Fatigados, señor Presidente, de ver cómo la delincuencia nos arrebata, impunemente, vidas de seres queridos y nos roba la propiedad y los bienes que adquirimos con nuestro propio y legítimo esfuerzo.
Agotados de esperar que alguna obra pública se concluya, que el sistema público educativo sea de calidad o de esperar el fin de esa humillación que significan las grandes filas o las citas de meses en nuestro sistema de salud. Estamos cansados de ver la pobreza como una constante en nuestra realidad y, de ver, más lejana, la posibilidad de prosperar y disfrutar los beneficios del desarrollo.
Está cansado el inversionista nacional o extranjero que debe cumplir al menos 12 procedimientos diferentes para abrir un negocio, 23 procedimientos diferentes y más de 6 meses para obtener un permiso de construcción, más de 21 días y 6 pasos para registrar una propiedad, 877 días para que se resuelva una demanda legal por incumplimiento de contratos, sin dejar de mencionar los 25 días para realizar una importación.
Su cansancio, señor Presidente, en realidad, es parte del cansancio de los políticos de siempre. Para resolver este triste panorama no hacen falta más recursos o más impuestos. En lugar de lamentos y pesimismo, decisiones y voluntad política, transparencia, eficiencia y eficacia en todas las áreas de la gestión pública, empresarialismo y emprendedores, desregulación interna y apertura externa, competencia y competitividad interna.
Lamentamos el falso cansancio del señor Presidente que, sin embargo, irremediablemente confirma, una vez más, la necesidad de un nuevo liderazgo político que saque al país de las nefastas consecuencias que los políticos de siempre han producido en el pueblo costarricense. Un liderazgo sin cansancios, propios o extraños.
Movimiento Libertario!