Yo antes solía ir mucho, pero dejé de ir, no había nada bueno allí
La dueña, súper arrogante, las que atendían en aquel entonces había una gordita repugnante que me miraba feo porque consumía muy poco y nunca invité a ninguna de las feas del salón
Hace mucho tiempo entraba a las habitaciones y verdaderamente son un asco, sábanas hediondas, fundas de almohada hediondas, un calor hediondo y no dan paño para uno bañarse
Más antes de eso había una señora que limpiaba y le pedía a uno la propina cuando entraba a la habitación
En una ocasión el que estaba de guarda era un viejo asqueroso, que me requisó con un cigarro en la boca, y luego me dejó ir todo el humo en la cara, esa fue la última vez que fui
Todo esto sin contar que la zona también es bien desagradable, entonces definitivamente no vale la pena