¡Aguafiestas ninguna! El MEIC soltó la nota de que esta Navidad prepararle unos buenos tamales al vecino no nos va a dejar boquiabiertos con los gastos. Parece que este año sí podremos rifar unos tamales decentes sin tener que pedir prestado al banco. Según sus cálculos, preparar 25 piñas nos costará alrededor de ¢20.159, lo cual representa una rebaja considerable con respecto al año anterior.
Para llegar a esta conclusión, los muchachos del Ministerio hicieron un rastreo exhaustivo de los precios de 14 ingredientes esenciales de la famosa “canasta tamalera”. Nos referimos al arroz, la harina de maíz, las papas, la zanahoria, la cebolla, el chile dulce, el ajo, el culantro… la lista sigue. También incluyeron cosas como la manteca, los guisantes, las hojas de plátano, el pabilo para atar, la bomba (esa mezcla de especias que le da el toque final) y hasta la posta de cerdo. Todo un brete de investigación, ¡pero al final valió la pena!
Y cómo hicieron esta magia de calcular los precios? Pues dicen que usaron varias fuentes: el aplicativo MiMejorCompraCR (para estar al tanto de los precios), las recomendaciones del Consejo Nacional de Producción (CNP) y, ojo, también visitaron mercados municipales en San José, Heredia, Alajuela y Cartago. Fueron desde el 7 hasta el 30 de noviembre, revisando los precios directamente en la fuente. Eso sí que es trabajo serio, mae.
El resultado final es que cada piña de tamal, aproximadamente, te va a salir en ¢806. Esto es bastante menos que el año pasado, cuando el costo por piña se había inflado a ¢1.032. Imagínate la diferencia si haces una docena... ¡Podrías comprarte unas gaseosas extra para acompañar!
Pero la buena onda no termina ahí. Lo más sorprendente es que algunos ingredientes experimentaron caídas drásticas de precios. El chile dulce, las papas, el culantro, las cebollas, el ajo y las zanahorias fueron los que más bajaron. Hablando de porcentajes, estamos viendo reducciones que van desde un 34% hasta un asombroso 110%. ¡Eso sí que es una ganga! Ahora sí podemos disfrutar de la temporada navideña sin que nuestros bolsillos griten '¡sal!'
Este informe del MEIC no es solo para saber cuánto vamos a gastar. Sirve como guía para los consumidores, especialmente ahora que la demanda de ingredientes para tamales se dispara. Así, todos tendremos una idea clara de qué precios deberíamos estar encontrando en los mercados y supermercados. Es importante que estemos alerta y comparemos precios antes de comprar, para asegurarnos de hacer la mejor elección posible. ¡No nos dejemos engañar por vendedores buscando aprovecharse de la temporada!
En fin, parece que esta Navidad los tamales serán protagonistas de nuestras mesas y, gracias a esta reducción de costos, también de nuestro bolsillo. Tenemos motivos para celebrar y disfrutar de estas festividades tradicionales con la familia y amigos. Pero dime tú, ¿qué ingrediente crees que es indispensable para un buen tamal y por qué? ¿Cuál es tu receta secreta?
Sin embargo, queda la interrogante: ¿Esta rebaja se traducirá realmente en precios más bajos en los mercados, o los comerciantes buscarán mantener sus márgenes de ganancia? ¿Será esta una verdadera oportunidad para ahorrar, o solo un truco estadístico? ¿Debería el gobierno tomar medidas más firmes para regular los precios de los productos básicos durante la temporada navideña?
Para llegar a esta conclusión, los muchachos del Ministerio hicieron un rastreo exhaustivo de los precios de 14 ingredientes esenciales de la famosa “canasta tamalera”. Nos referimos al arroz, la harina de maíz, las papas, la zanahoria, la cebolla, el chile dulce, el ajo, el culantro… la lista sigue. También incluyeron cosas como la manteca, los guisantes, las hojas de plátano, el pabilo para atar, la bomba (esa mezcla de especias que le da el toque final) y hasta la posta de cerdo. Todo un brete de investigación, ¡pero al final valió la pena!
Y cómo hicieron esta magia de calcular los precios? Pues dicen que usaron varias fuentes: el aplicativo MiMejorCompraCR (para estar al tanto de los precios), las recomendaciones del Consejo Nacional de Producción (CNP) y, ojo, también visitaron mercados municipales en San José, Heredia, Alajuela y Cartago. Fueron desde el 7 hasta el 30 de noviembre, revisando los precios directamente en la fuente. Eso sí que es trabajo serio, mae.
El resultado final es que cada piña de tamal, aproximadamente, te va a salir en ¢806. Esto es bastante menos que el año pasado, cuando el costo por piña se había inflado a ¢1.032. Imagínate la diferencia si haces una docena... ¡Podrías comprarte unas gaseosas extra para acompañar!
Pero la buena onda no termina ahí. Lo más sorprendente es que algunos ingredientes experimentaron caídas drásticas de precios. El chile dulce, las papas, el culantro, las cebollas, el ajo y las zanahorias fueron los que más bajaron. Hablando de porcentajes, estamos viendo reducciones que van desde un 34% hasta un asombroso 110%. ¡Eso sí que es una ganga! Ahora sí podemos disfrutar de la temporada navideña sin que nuestros bolsillos griten '¡sal!'
Este informe del MEIC no es solo para saber cuánto vamos a gastar. Sirve como guía para los consumidores, especialmente ahora que la demanda de ingredientes para tamales se dispara. Así, todos tendremos una idea clara de qué precios deberíamos estar encontrando en los mercados y supermercados. Es importante que estemos alerta y comparemos precios antes de comprar, para asegurarnos de hacer la mejor elección posible. ¡No nos dejemos engañar por vendedores buscando aprovecharse de la temporada!
En fin, parece que esta Navidad los tamales serán protagonistas de nuestras mesas y, gracias a esta reducción de costos, también de nuestro bolsillo. Tenemos motivos para celebrar y disfrutar de estas festividades tradicionales con la familia y amigos. Pero dime tú, ¿qué ingrediente crees que es indispensable para un buen tamal y por qué? ¿Cuál es tu receta secreta?
Sin embargo, queda la interrogante: ¿Esta rebaja se traducirá realmente en precios más bajos en los mercados, o los comerciantes buscarán mantener sus márgenes de ganancia? ¿Será esta una verdadera oportunidad para ahorrar, o solo un truco estadístico? ¿Debería el gobierno tomar medidas más firmes para regular los precios de los productos básicos durante la temporada navideña?
