Mae, a veces uno lee noticias y de verdad que no sabe si reír o entrar en cólera. Esta semana el plato fuerte del menú político fue, una vez más, el arroz. Resulta que la diputada oficialista, Pilar Cisneros, se mandó a decir sin pelos en la lengua que los productores de arroz de aquí son ineficientes y que, básicamente, si no la pegan, que mejor se dediquen a otra vara. ¡Así, a calzón quitado! Uno esperaría que una afirmación de ese calibre venga con un Power Point lleno de gráficos y datos hasta para tirar para arriba. Pero diay, parece que la tarea se quedó a medio palo, porque la gente de Conarroz (la Corporación Arrocera Nacional) brincó de una y les aguó la fiesta con números en mano.
Aquí es donde la vara se pone buena. Según Conarroz, la diputada no solo se equivocó, sino que se jaló una torta monumental. Lejos de ser ineficientes, los productores ticos aparentemente están jugando en las grandes ligas. Sacaron a relucir datos del mismísimo Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (el USDA, para los compas), que no es cualquier chunche. Según estos informes, Costa Rica produce entre 4.25 y 4.64 toneladas de arroz por hectárea. ¿Y eso es mucho o poco? Pues resulta que es más que Tailandia (que anda por 2.86 t/ha), uno de los exportadores más salvajes del planeta. Y para rematar, estamos taco a taco, e incluso a veces por encima, de la India (4.32 t/ha), que es el papá de los tomates en exportación de arroz.
Entonces, ¿qué pasó aquí? ¿De dónde sacó la diputada su información? Porque una cosa es tener una opinión o una línea política, y otra muy distinta es ignorar evidencia técnica que te ponen en la cara. Conarroz fue clarísimo: el señalamiento de que los productores son "ineficientes" es una falacia que no se sostiene con datos reales. Argumentan que claro que siempre se puede mejorar, como en cualquier brete, pero de ahí a decir que deberían cerrar el boliche hay un trecho enorme. Es como decirle a Keylor Navas que mejor se dedique al baloncesto porque de vez en cuando le meten un gol. ¡No tiene sentido!
Pero seamos malpensados un toque, porque en la política tica nada es gratis. Este encontronazo no es un despiche aislado. Todo esto es la banda sonora de la famosa "Ruta del Arroz", esa política del gobierno que le bajó un montón los impuestos a las importaciones del grano. Los productores nacionales llevan meses diciendo que esa medida los está ahogando y que los pone a competir en condiciones injustas. Por eso están pulseando un proyecto de ley (el 24.211) para crear un fondo que les eche una mano. Las declaraciones de Cisneros suenan, entonces, más a una justificación política para defender esa ruta que a un análisis técnico serio. Es más fácil decir "son ineficientes" que admitir que "nuestra política los está quebrando".
Al final del día, esto va más allá de un simple pleito por el precio de la bolsa de arroz en el súper. Estamos hablando de seguridad alimentaria. Depender de lo que nos quieran vender afuera nos hace increíblemente vulnerables a cualquier crisis mundial, a los cambios de precios o a que un país decida cerrar el tubo. El arroz es sagrado en la mesa del tico, es parte de nuestro ADN culinario. Entonces, la pregunta que queda en el aire es bastante seria. Más allá del arroz, ¿creen que estas declaraciones son pura hablada para justificar una política, o de verdad hay un desconocimiento técnico tan grande en la Asamblea? ¿O es una mezcla de las dos varas? ¡Los leo, maes!
Aquí es donde la vara se pone buena. Según Conarroz, la diputada no solo se equivocó, sino que se jaló una torta monumental. Lejos de ser ineficientes, los productores ticos aparentemente están jugando en las grandes ligas. Sacaron a relucir datos del mismísimo Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (el USDA, para los compas), que no es cualquier chunche. Según estos informes, Costa Rica produce entre 4.25 y 4.64 toneladas de arroz por hectárea. ¿Y eso es mucho o poco? Pues resulta que es más que Tailandia (que anda por 2.86 t/ha), uno de los exportadores más salvajes del planeta. Y para rematar, estamos taco a taco, e incluso a veces por encima, de la India (4.32 t/ha), que es el papá de los tomates en exportación de arroz.
Entonces, ¿qué pasó aquí? ¿De dónde sacó la diputada su información? Porque una cosa es tener una opinión o una línea política, y otra muy distinta es ignorar evidencia técnica que te ponen en la cara. Conarroz fue clarísimo: el señalamiento de que los productores son "ineficientes" es una falacia que no se sostiene con datos reales. Argumentan que claro que siempre se puede mejorar, como en cualquier brete, pero de ahí a decir que deberían cerrar el boliche hay un trecho enorme. Es como decirle a Keylor Navas que mejor se dedique al baloncesto porque de vez en cuando le meten un gol. ¡No tiene sentido!
Pero seamos malpensados un toque, porque en la política tica nada es gratis. Este encontronazo no es un despiche aislado. Todo esto es la banda sonora de la famosa "Ruta del Arroz", esa política del gobierno que le bajó un montón los impuestos a las importaciones del grano. Los productores nacionales llevan meses diciendo que esa medida los está ahogando y que los pone a competir en condiciones injustas. Por eso están pulseando un proyecto de ley (el 24.211) para crear un fondo que les eche una mano. Las declaraciones de Cisneros suenan, entonces, más a una justificación política para defender esa ruta que a un análisis técnico serio. Es más fácil decir "son ineficientes" que admitir que "nuestra política los está quebrando".
Al final del día, esto va más allá de un simple pleito por el precio de la bolsa de arroz en el súper. Estamos hablando de seguridad alimentaria. Depender de lo que nos quieran vender afuera nos hace increíblemente vulnerables a cualquier crisis mundial, a los cambios de precios o a que un país decida cerrar el tubo. El arroz es sagrado en la mesa del tico, es parte de nuestro ADN culinario. Entonces, la pregunta que queda en el aire es bastante seria. Más allá del arroz, ¿creen que estas declaraciones son pura hablada para justificar una política, o de verdad hay un desconocimiento técnico tan grande en la Asamblea? ¿O es una mezcla de las dos varas? ¡Los leo, maes!