¡Ay, Dios mío! El PLN le dio un soponcio a sus seguidores con este cambio de última hora. A menos de noventa días para las elecciones presidenciales, decidieron mandar a correr al jefe de campaña, Álvaro Ramírez. Uno se queda pensando, ¿qué habrá pasado que toman una decisión así tan cerca del día D?
Parece que la directriz verdiblanca, encabezada por el candidato Álvaro Ramos, sintió que necesitaban darle otro brío a la campaña. Según el comunicado oficial (que, obviamente, se filtró como buen chorro), ahora asume el mando César Rodríguez Barrantes. Este señor viene con currículum largo, lleno de títulos y experiencia en ONG’s y centros educativos, pa' que sepan que no es cualquier pelao.
Dicen que Rodríguez Barrantes trae consigo una visión fresca y un enfoque en la ejecución, buscando más eficiencia y disciplina operativa. Eso sí, ya saben cómo van estas cosas, siempre hay murmullos detrás de cámaras sobre quién tiene más poder y quién realmente está manejando las riendas del asunto. ¿Será que esto es una estrategia maquiavélica para recuperar terreno en las encuestas o simplemente una necesidad real de reacomodo?
Lo curioso es que Ramírez no desaparece del todo. Lo movieron a coordinador nacional de Políticas y Alianzas, donde tendrá que lidiar con el “Plan Costa Rica que Resuelve”. Ramírez, que recordemos, fue candidato a la vicepresidencia en 2022 y va encabezando la lista por San José, sigue pegado a la campaña, aunque ahora desde otra posición. Parece que quieren aprovechar su experiencia, pero lejos de estar a la cabeza visible, ¿no creen?
Este movimiento, según la campaña, busca agilizar procesos, fortalecer la disciplina y darle más mordiente a la propuesta del PLN. El objetivo, claro, es llegar al balotaje con fuerza renovada, dejando atrás posibles tropiezos o errores de cálculo previos. El tiempo dirá si esta apuesta resulta efectiva o si se trata de una jugada arriesgada que podría salirles rana.
Rodríguez Barrantes, por su parte, ha tenido una trayectoria marcada por la gestión de proyectos sociales y la evaluación de políticas públicas. Participó activamente en la campaña presidencial del 2014, coordinando los eventos masivos. Eso demuestra que sabe mover gente y organizar situaciones complejas, lo cual puede ser clave en un momento crucial como éste. Pero también sabemos que tener un buen CV no garantiza el éxito en la arena política, ¿verdad?
Aunque Diario Extra intentó hablar con el nuevo jefe de campaña para conocer sus planes y estrategias, Rodríguez prefirió guardarse silencio. Dicen que prefiere trabajar a marchas forzadas antes que andar dando entrevistas. Entendemos, a veces es mejor dejar que los hechos hablen por sí solos. Veremos qué tan rápido empiezan a ver resultados tangibles con estos cambios.
Con todo este panorama, uno no puede evitar preguntarse: ¿este cambio de timón será suficiente para impulsar al PLN hacia la victoria o estamos ante una simple maniobra desesperada para intentar remontar una desventaja que parece insalvable? ¡Díganme, ustedes qué piensan! ¿Les parece que el PLN anda bien encaminado o todavía les falta mucho camino por recorrer para convencer al electorado?
Parece que la directriz verdiblanca, encabezada por el candidato Álvaro Ramos, sintió que necesitaban darle otro brío a la campaña. Según el comunicado oficial (que, obviamente, se filtró como buen chorro), ahora asume el mando César Rodríguez Barrantes. Este señor viene con currículum largo, lleno de títulos y experiencia en ONG’s y centros educativos, pa' que sepan que no es cualquier pelao.
Dicen que Rodríguez Barrantes trae consigo una visión fresca y un enfoque en la ejecución, buscando más eficiencia y disciplina operativa. Eso sí, ya saben cómo van estas cosas, siempre hay murmullos detrás de cámaras sobre quién tiene más poder y quién realmente está manejando las riendas del asunto. ¿Será que esto es una estrategia maquiavélica para recuperar terreno en las encuestas o simplemente una necesidad real de reacomodo?
Lo curioso es que Ramírez no desaparece del todo. Lo movieron a coordinador nacional de Políticas y Alianzas, donde tendrá que lidiar con el “Plan Costa Rica que Resuelve”. Ramírez, que recordemos, fue candidato a la vicepresidencia en 2022 y va encabezando la lista por San José, sigue pegado a la campaña, aunque ahora desde otra posición. Parece que quieren aprovechar su experiencia, pero lejos de estar a la cabeza visible, ¿no creen?
Este movimiento, según la campaña, busca agilizar procesos, fortalecer la disciplina y darle más mordiente a la propuesta del PLN. El objetivo, claro, es llegar al balotaje con fuerza renovada, dejando atrás posibles tropiezos o errores de cálculo previos. El tiempo dirá si esta apuesta resulta efectiva o si se trata de una jugada arriesgada que podría salirles rana.
Rodríguez Barrantes, por su parte, ha tenido una trayectoria marcada por la gestión de proyectos sociales y la evaluación de políticas públicas. Participó activamente en la campaña presidencial del 2014, coordinando los eventos masivos. Eso demuestra que sabe mover gente y organizar situaciones complejas, lo cual puede ser clave en un momento crucial como éste. Pero también sabemos que tener un buen CV no garantiza el éxito en la arena política, ¿verdad?
Aunque Diario Extra intentó hablar con el nuevo jefe de campaña para conocer sus planes y estrategias, Rodríguez prefirió guardarse silencio. Dicen que prefiere trabajar a marchas forzadas antes que andar dando entrevistas. Entendemos, a veces es mejor dejar que los hechos hablen por sí solos. Veremos qué tan rápido empiezan a ver resultados tangibles con estos cambios.
Con todo este panorama, uno no puede evitar preguntarse: ¿este cambio de timón será suficiente para impulsar al PLN hacia la victoria o estamos ante una simple maniobra desesperada para intentar remontar una desventaja que parece insalvable? ¡Díganme, ustedes qué piensan! ¿Les parece que el PLN anda bien encaminado o todavía les falta mucho camino por recorrer para convencer al electorado?