¡Ay, mándale! Así nos dejan a nosotros, diay... Beni Rubido, el profe español que dirigió a la Selección Femenina de fútbol por estos últimos dos años, ya puso el clavo. La Federación Costarricense de Fútbol (FCRF) soltó la bomba ayer a través de un comunicado, confirmando que ya no seguirá al mando de nuestras muchachas a partir del 14 de octubre. Parece que esto se cocinaba a fuego lento, y ahora salió a la luz.
Para refrescarle la memoria a algunos, Rubido llegó para reemplazar a Amelia Valverde allá por septiembre del 2021. Tenía apenas 31 añitos cuando asumió el reto, y venía con aires de grandeza, diciendo que conocía el futuro del fútbol y todo eso. Recuerdo que en su presentación hablaba de estar 'de sobra preparado', con la ilusión de llevar a la Tricolor a cotas más altas. Bueno, la vida siempre te da sorpresas, ¿no creen?
Según la información que ha circulado, y vaya que ha corrido la voz por todos lados, parece que Rubido tiene una jugosa oferta en el extranjero. No sabemos exactamente qué equipo le espera, pero dicen que es una oportunidad que no podía rechazar. ¡Uno entiende, claro!, hay que buscar el pan de cada día. Pero aquí, entre nosotros, queda el sabor agridulce de ver cómo se va otro talento joven a buscar fortuna afuera.
No quiero decir que Rubido hizo un mal trabajo, para nada. Bajo su batuta, la selección dio algunas alegrías, aunque también sufrió derrotas dolorosas. Lo importante es reconocer el esfuerzo y la dedicación que puso en cada partido. De todas formas, una pena perderlo, porque tenía potencial para seguir creciendo y aportando al fútbol femenino nacional. Ahora toca buscar reemplazo, y eso nunca es fácil.
La FCRF, como buen ente federativo, mandó un comunicado agradeciéndole a Rubido por su tiempo y profesionalismo. Dicen que le agradecen su ‘dedicación, compromiso y profesionalismo’, todo muy formal. Pero bueno, así son estas cosas. Lo cierto es que el fútbol femenino necesita estabilidad, y estos cambios constantes no ayudan mucho al crecimiento del deporte.
Y hablando de crecimiento, hay que recordar que el fútbol femenino en Costa Rica todavía tiene mucho camino por recorrer. Le falta inversión, visibilidad y, sobre todo, apoyo. Tenemos talentosas jugadoras, pero necesitan mejores condiciones para poder desarrollar su máximo potencial. Ojalá que este cambio de entrenador sirva para darle un impulso renovado al programa y atraer nuevas figuras al deporte rey.
Ahora bien, la pregunta que ronda en la mente de muchos aficionados es: ¿quién será el próximo técnico? La FCRF promete anunciar pronto el nombre del nuevo entrenador, y ahí empieza la expectativa. Esperemos que esta vez sí acierten en la elección y traigan a alguien con experiencia, visión y pasión por el fútbol femenino. Porque las muchachas se lo merecen, y el país entero anhela verlas triunfar. Además, ¿será que la federación considera buscar una entrenadora local, echándole mano a alguna mae que tiene oficio?
En fin, Rubido se marcha, dejando atrás un ciclo cumplido. Ahora solo nos queda esperar a ver quién toma las riendas de la Tricolor femenina y si logrará llevarla al siguiente nivel. Pero díganme ustedes, ¿creen que la salida de Rubido es una oportunidad para revitalizar el fútbol femenino costarricense, o simplemente un tropiezo más en el largo camino hacia el éxito? ¡Déjenme sus opiniones en el foro!
Para refrescarle la memoria a algunos, Rubido llegó para reemplazar a Amelia Valverde allá por septiembre del 2021. Tenía apenas 31 añitos cuando asumió el reto, y venía con aires de grandeza, diciendo que conocía el futuro del fútbol y todo eso. Recuerdo que en su presentación hablaba de estar 'de sobra preparado', con la ilusión de llevar a la Tricolor a cotas más altas. Bueno, la vida siempre te da sorpresas, ¿no creen?
Según la información que ha circulado, y vaya que ha corrido la voz por todos lados, parece que Rubido tiene una jugosa oferta en el extranjero. No sabemos exactamente qué equipo le espera, pero dicen que es una oportunidad que no podía rechazar. ¡Uno entiende, claro!, hay que buscar el pan de cada día. Pero aquí, entre nosotros, queda el sabor agridulce de ver cómo se va otro talento joven a buscar fortuna afuera.
No quiero decir que Rubido hizo un mal trabajo, para nada. Bajo su batuta, la selección dio algunas alegrías, aunque también sufrió derrotas dolorosas. Lo importante es reconocer el esfuerzo y la dedicación que puso en cada partido. De todas formas, una pena perderlo, porque tenía potencial para seguir creciendo y aportando al fútbol femenino nacional. Ahora toca buscar reemplazo, y eso nunca es fácil.
La FCRF, como buen ente federativo, mandó un comunicado agradeciéndole a Rubido por su tiempo y profesionalismo. Dicen que le agradecen su ‘dedicación, compromiso y profesionalismo’, todo muy formal. Pero bueno, así son estas cosas. Lo cierto es que el fútbol femenino necesita estabilidad, y estos cambios constantes no ayudan mucho al crecimiento del deporte.
Y hablando de crecimiento, hay que recordar que el fútbol femenino en Costa Rica todavía tiene mucho camino por recorrer. Le falta inversión, visibilidad y, sobre todo, apoyo. Tenemos talentosas jugadoras, pero necesitan mejores condiciones para poder desarrollar su máximo potencial. Ojalá que este cambio de entrenador sirva para darle un impulso renovado al programa y atraer nuevas figuras al deporte rey.
Ahora bien, la pregunta que ronda en la mente de muchos aficionados es: ¿quién será el próximo técnico? La FCRF promete anunciar pronto el nombre del nuevo entrenador, y ahí empieza la expectativa. Esperemos que esta vez sí acierten en la elección y traigan a alguien con experiencia, visión y pasión por el fútbol femenino. Porque las muchachas se lo merecen, y el país entero anhela verlas triunfar. Además, ¿será que la federación considera buscar una entrenadora local, echándole mano a alguna mae que tiene oficio?
En fin, Rubido se marcha, dejando atrás un ciclo cumplido. Ahora solo nos queda esperar a ver quién toma las riendas de la Tricolor femenina y si logrará llevarla al siguiente nivel. Pero díganme ustedes, ¿creen que la salida de Rubido es una oportunidad para revitalizar el fútbol femenino costarricense, o simplemente un tropiezo más en el largo camino hacia el éxito? ¡Déjenme sus opiniones en el foro!