Al grito de "¡Muerte al dictador!", decenas de universitarios repudiaron al presidente en la Universidad de Teherán cuando acudió la centro educativo para inaugurar el comienzo del ciclo académico.
En una inusual manifestación, unos 100 jóvenes se reunieron ayer en la Universidad de Teherán para protestar contra el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, que acudió al centro educativo para inaugurar el comienzo del ciclo académico.
Los estudiantes se reunieron frente a las puertas de la sala donde el mandatario pronunciaba un discurso ante un selecto grupo de universitarios, y, al grito de "¡Muerte al dictador!", repudiaron a Ahmadinejad, a quien compararon con el fallecido ex dictador chileno Augusto Pinochet.
El presidente iraní hizo caso omiso de los cánticos de protesta y continuó con su disertación sobre los méritos de la ciencia y los obstáculos de la democracia occidental en el mundo islámico.
Si bien el recinto universitario estaba fuertemente custodiado, los manifestantes no se enfrentaron con la policía antidisturbios, aunque sí lo hicieron con otro grupo de estudiantes islamistas leales al presidente, que apoyaron a su líder gritando: "¡Gracias, presidente revolucionario! ¡Nosotros te apoyamos!".
Los disturbios finalizaron cuando Ahmadinejad abandonó la universidad, y no hubo detenidos.
El presidente ya había enfrentado una situación similar durante un discurso en diciembre del año pasado, cuando un grupo de estudiantes de la Universidad Técnica Amir Kabir lo calificó de "dictador" e incendió un cartel con su imagen.
Para evitar hechos de este tipo, los organizadores habían dispuesto fuertes medidas de seguridad: se revisaron los documentos de identidad de todos los estudiantes que ingresaron en la universidad y sólo permitieron que algunos de ellos entraran a la sala donde Ahmadinejad ofreció su discurso. Pero de alguna manera los manifestantes pudieron ingresar.
Tras las protestas, además, los activistas difundieron un comunicado en el que se quejaron de la reciente visita del mandatario a la Universidad de Columbia, en Nueva York, para responder a las preguntas de los estudiantes, durante su paso por Estados Unidos para participar de la Asamblea General de las Naciones Unidas. "¿Por qué sólo Columbia? También nosotros tenemos preguntas para Ahmadinejad", decía el comunicado.
Paradójicamente, durante su discurso, Ahmadinejad invitó a las autoridades norteamericanas a visitar la Universidad de Teherán: "Invito al presidente Bush y al rector de la Universidad de Columbia a venir a ofrecer un discurso en esta universidad y así aprender cómo se recibe a un invitado", dijo el presidente, en referencia a las duras críticas que enfrentó durante su visita a Columbia.
Los estudiantes fueron en el pasado la principal base de poder del movimiento reformista de Irán, pero en los últimos años se han visto bajo fuerte presión por parte del gobierno radical de Ahmadinejad, y las protestas se han convertido en algo inusual.
De hecho, Tahkim Vahdat, la mayor organización de estudiantes reformistas, difundió días atrás un informe que indicaba que 43 centros estudiantiles y culturales fueron cerrados durante el gobierno de Ahmadinejad. Unos 70 fueron jóvenes arrestados y más de 500 convocados por los comités disciplinarios.
Ayer, el presidente iraní aprovechó su discurso para atacar una vez más a Estados Unidos, al que acusó de no tener más argumentos para la confrontación.
En referencia a su controvertido programa nuclear, señaló que las amenazas procedentes de Washington "son inútiles y ya no tienen efecto".
"Estados Unidos sólo ve la bomba atómica en la investigación de energía nuclear, pero nosotros vemos su uso civil. El mundo no se cambia con bombas, sino con ciencia y espiritualidad", dijo Ahmadinejad.
El mandatario también sostuvo que el sistema democrático liberal llegó a su fase final y que no puede ser instaurado en el mundo islámico.
Fuente: La Nación - AP - DPA - EFE - ANSA.
