¡Ay, Dios mío! ¿Se imaginan esto, raza? Nuestra salsa, ese tesoro nacional que nos corre por las venas, va a trascender fronteras... literalmente. Banquete, esos que nos han acompañado desde siempre en la mesa, se rifaron lanzando una movida que ni en nuestros sueños más locos habíamos pensado: crear la canción de salsa más larga del mundo, ¡con nosotros!
Como bien saben, en Costa Rica la salsa es más que un género musical; es un estilo de vida. La escuchamos en casa, en la calle, en la radio... ¡hasta los abuelitos la tienen guardada en el celular! Banquete, entendiendo esta conexión profunda, decidió apostarle a un proyecto ambicioso que celebra nuestra cultura y nuestro amor por el buen ritmo.
La idea es simple pero revolucionaria: juntar a un montón de gente talentosa y dejar que la creatividad fluya. Contrataron al grandísimo Jean Félix Quintana, la voz que ha marcado generaciones, y al maestro Carlos Aguilar, compositor de lujo, para transformar nuestras ideas en melodías pegajosas. Pero ojo, porque la clave está en nosotros, los costarricenses, que vamos a aportar las frases, las historias, los recuerdos… todo aquello que hace especial a nuestra tierra.
“Nosotros somos la salsa”, así lo manifestó María José Bolaños, la encargada de la marca. “Queremos darle al pueblo un espacio para expresarse, para sentirse escuchado, para ser parte de algo grande”. Y vaya que sí lo es, mi pana. Imagínate el impacto de una canción que lleve la esencia de miles de personas, transmitiendo alegría, nostalgia, pasión... ¡pura sabrosura!”.
Para participar, solo hay que meterse en somoslasalsa.com y soltar la imaginación. Pueden enviar frases cortas, versos improvisados, hasta un pedacito de conversación que les recuerde a sus familiares o amigos. Cada contribución suma puntos al “salsómetro”, un contador visual que mostrará cómo avanzamos hacia el récord mundial. ¡Y encima, hay premios! ¿Qué esperan para echarle ganas?
Además de la página web, Banquete estará llevando la fiesta a diferentes rincones del país. Habrá conciertos, actividades interactivas, y hasta la participación de Sofía Chaverri, quien se convirtió en la imagen oficial de esta celebración. Se espera que estos eventos sean un verdadero punto de encuentro para bailar, reír, cantar y fortalecer ese sentido de comunidad que nos caracteriza como ticos. ¡Imaginen la vibra!
Lo que me parece súper interesante de todo esto es que va mucho más allá de una simple campaña publicitaria. Es una apuesta por rescatar ese espíritu de unión y camaradería que solíamos vivir en los salones de baile de antaño, donde la música era el pretexto perfecto para conectar con los demás. Banquete quiere recordarnos que la salsa, ya sea en el plato o en el oído, es un símbolo de nuestra identidad, un hilo invisible que nos conecta unos a otros.
Así que, mi gente, ¡no se queden atrás! Sumen a esta aventura, compartan sus ideas, bailen con sus panas, y hagamos historia juntos. ¿Les parece una movida chiva para reactivar la escena salsera del país y demostrar al mundo de qué estamos hechos?
Como bien saben, en Costa Rica la salsa es más que un género musical; es un estilo de vida. La escuchamos en casa, en la calle, en la radio... ¡hasta los abuelitos la tienen guardada en el celular! Banquete, entendiendo esta conexión profunda, decidió apostarle a un proyecto ambicioso que celebra nuestra cultura y nuestro amor por el buen ritmo.
La idea es simple pero revolucionaria: juntar a un montón de gente talentosa y dejar que la creatividad fluya. Contrataron al grandísimo Jean Félix Quintana, la voz que ha marcado generaciones, y al maestro Carlos Aguilar, compositor de lujo, para transformar nuestras ideas en melodías pegajosas. Pero ojo, porque la clave está en nosotros, los costarricenses, que vamos a aportar las frases, las historias, los recuerdos… todo aquello que hace especial a nuestra tierra.
“Nosotros somos la salsa”, así lo manifestó María José Bolaños, la encargada de la marca. “Queremos darle al pueblo un espacio para expresarse, para sentirse escuchado, para ser parte de algo grande”. Y vaya que sí lo es, mi pana. Imagínate el impacto de una canción que lleve la esencia de miles de personas, transmitiendo alegría, nostalgia, pasión... ¡pura sabrosura!”.
Para participar, solo hay que meterse en somoslasalsa.com y soltar la imaginación. Pueden enviar frases cortas, versos improvisados, hasta un pedacito de conversación que les recuerde a sus familiares o amigos. Cada contribución suma puntos al “salsómetro”, un contador visual que mostrará cómo avanzamos hacia el récord mundial. ¡Y encima, hay premios! ¿Qué esperan para echarle ganas?
Además de la página web, Banquete estará llevando la fiesta a diferentes rincones del país. Habrá conciertos, actividades interactivas, y hasta la participación de Sofía Chaverri, quien se convirtió en la imagen oficial de esta celebración. Se espera que estos eventos sean un verdadero punto de encuentro para bailar, reír, cantar y fortalecer ese sentido de comunidad que nos caracteriza como ticos. ¡Imaginen la vibra!
Lo que me parece súper interesante de todo esto es que va mucho más allá de una simple campaña publicitaria. Es una apuesta por rescatar ese espíritu de unión y camaradería que solíamos vivir en los salones de baile de antaño, donde la música era el pretexto perfecto para conectar con los demás. Banquete quiere recordarnos que la salsa, ya sea en el plato o en el oído, es un símbolo de nuestra identidad, un hilo invisible que nos conecta unos a otros.
Así que, mi gente, ¡no se queden atrás! Sumen a esta aventura, compartan sus ideas, bailen con sus panas, y hagamos historia juntos. ¿Les parece una movida chiva para reactivar la escena salsera del país y demostrar al mundo de qué estamos hechos?
