¡Ay, Dios mío! Pues resulta que el Banco Central, esos señores que siempre andan midiendo el pulso de la economía, decidieron meterle freno a la Tasa de Política Monetaria (TPM). Bajaron 25 puntitos básicos, dejando la cosa en 3,25%, así que ya saben, pa’ los que estén pensando en pedir prestao’, ahí puede haber alguna pequeña diferencia… aunque no esperen milagros, ¿eh?
Para ponerlos al día, la TPM es como el termostato de las tasas de interés. Influye directamente en cuánto les cobran por sus créditos, hipotecas, hasta en qué intereses les pagan si tienen billetes guardados en el banco. Por eso es tan importante, porque afecta a todos nosotros, desde el vecino que quiere comprarse un carro hasta la señora que necesita un crédito pa’ echar pa’lante su pequeño negocio.
Hace poquito, en octubre, los directivos del BCCR dijeron “aguante, vamos a esperar”. Pensaban que la TPM estaba en una especie de punto medio, ni muy alta ni muy baja, buscando un equilibrio. Pero luego, en septiembre, sí le dieron una bajadita, y ahora van por otra. Ya van dos veces este año que ajustan la tasa. La primera fue en julio, cuando pasó de 4% a 3,75%. Se nota que están tratando de seguir la corriente, viendo cómo se mueven los mercados internacionales…
Y bueno, ¿por qué hacen esto? Parece ser que la inflación anda bastante tranquila últimamente. Las proyecciones dicen que estará entre 1,4% y 2,3% en los próximos 12 y 24 meses. Eso significa que las cosas no se están encareciendo tan rápido como antes. Además, el tipo de energía también anda bajando, y eso ayuda porque la luz es un churro pa’ cualquier familia tica.
Según el comunicado oficial del Banco Central, esta reducción es “congruente” con su objetivo. Básicamente, quieren mantener la estabilidad económica y evitar que la inflación se salga de control. Dijeron que están echando ojo a lo que pasa afuera, donde otros países también están recortando tasas, especialmente Estados Unidos, donde la Reserva Federal dio un vuelco recientemente, pues... ¡qué se dice!
Pablo González, un gestor de portafolio de Mercado de Valores, comentó que esta decisión del BCCR se alinea con la tendencia mundial de flexibilización monetaria. Es decir, muchos bancos centrales están dando señales de que pueden empezar a bajar las tasas para estimular la economía. Pero la pregunta es: ¿Será suficiente? Porque aunque la inflación esté contenida, todavía estamos lejos del rango ideal que busca el Banco Central, que es entre 2% y 4%. Ahora mismo, estamos en terreno negativo, con una variación interanual de -0,38% en noviembre, ¡eso da que pensar!
Algunos analistas consideran que esta bajada podría impulsar un poco la actividad económica, animando a la gente a consumir y a invertir. Otros, más cautelosos, advierten que aún hay incertidumbre a nivel global, con conflictos geopolíticos y tensiones comerciales que podrían afectar nuestra economía. Además, la deuda pública sigue siendo un tema que preocupa, y necesitamos encontrar formas de controlarla sin frenar el crecimiento.
En fin, la pelota está en el tejado de todos nosotros. ¿Crees que esta reducción de la TPM será realmente efectiva para reactivar la economía o simplemente estamos aplazando problemas futuros? ¿Debería el Banco Central ser más agresivo en sus recortes o mantenerse prudente ante la volatilidad del panorama económico mundial? ¡Déjanos tus opiniones en el foro, queremos saber qué piensas tú!
Para ponerlos al día, la TPM es como el termostato de las tasas de interés. Influye directamente en cuánto les cobran por sus créditos, hipotecas, hasta en qué intereses les pagan si tienen billetes guardados en el banco. Por eso es tan importante, porque afecta a todos nosotros, desde el vecino que quiere comprarse un carro hasta la señora que necesita un crédito pa’ echar pa’lante su pequeño negocio.
Hace poquito, en octubre, los directivos del BCCR dijeron “aguante, vamos a esperar”. Pensaban que la TPM estaba en una especie de punto medio, ni muy alta ni muy baja, buscando un equilibrio. Pero luego, en septiembre, sí le dieron una bajadita, y ahora van por otra. Ya van dos veces este año que ajustan la tasa. La primera fue en julio, cuando pasó de 4% a 3,75%. Se nota que están tratando de seguir la corriente, viendo cómo se mueven los mercados internacionales…
Y bueno, ¿por qué hacen esto? Parece ser que la inflación anda bastante tranquila últimamente. Las proyecciones dicen que estará entre 1,4% y 2,3% en los próximos 12 y 24 meses. Eso significa que las cosas no se están encareciendo tan rápido como antes. Además, el tipo de energía también anda bajando, y eso ayuda porque la luz es un churro pa’ cualquier familia tica.
Según el comunicado oficial del Banco Central, esta reducción es “congruente” con su objetivo. Básicamente, quieren mantener la estabilidad económica y evitar que la inflación se salga de control. Dijeron que están echando ojo a lo que pasa afuera, donde otros países también están recortando tasas, especialmente Estados Unidos, donde la Reserva Federal dio un vuelco recientemente, pues... ¡qué se dice!
Pablo González, un gestor de portafolio de Mercado de Valores, comentó que esta decisión del BCCR se alinea con la tendencia mundial de flexibilización monetaria. Es decir, muchos bancos centrales están dando señales de que pueden empezar a bajar las tasas para estimular la economía. Pero la pregunta es: ¿Será suficiente? Porque aunque la inflación esté contenida, todavía estamos lejos del rango ideal que busca el Banco Central, que es entre 2% y 4%. Ahora mismo, estamos en terreno negativo, con una variación interanual de -0,38% en noviembre, ¡eso da que pensar!
Algunos analistas consideran que esta bajada podría impulsar un poco la actividad económica, animando a la gente a consumir y a invertir. Otros, más cautelosos, advierten que aún hay incertidumbre a nivel global, con conflictos geopolíticos y tensiones comerciales que podrían afectar nuestra economía. Además, la deuda pública sigue siendo un tema que preocupa, y necesitamos encontrar formas de controlarla sin frenar el crecimiento.
En fin, la pelota está en el tejado de todos nosotros. ¿Crees que esta reducción de la TPM será realmente efectiva para reactivar la economía o simplemente estamos aplazando problemas futuros? ¿Debería el Banco Central ser más agresivo en sus recortes o mantenerse prudente ante la volatilidad del panorama económico mundial? ¡Déjanos tus opiniones en el foro, queremos saber qué piensas tú!
