¡Ay, Dios mío! Parece que el Partido Comunal Unido de San José está metido en un brete serio, tan serio que podrían quedarse afuera de las próximas elecciones nacionales. Imagínate, después de tanto alboroto, a las afueras del juego. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) los tiene en la mira, y parece que no han cumplido con los requisitos mínimos. ¡Qué despiche!
La jefa del Departamento de Registro de Partidos Políticos del TSE, Marta Castillo, soltó la bomba: faltó la foto y la biografía de sus candidatos. ¡Imagínatelo! Como si fuera un chiste barato. Esto ha generado toda una novela legal, con recursos y apelaciones que parecen no tener fin. Aparentemente, presentaron unas nóminas, pero sin los datos esenciales, lo que generó 23 rechazos iniciales.
Todo esto comenzó hace unos años, pero se agravó con la reforma al artículo 148 del Código Electoral en 2021. La exdiputada Silvia Hernández, con su “Voto Informado”, impuso la obligación de presentar fotos, biografías y planes de gobierno. Desde 2022, todos los partidos debían cumplir con estos requisitos para poder siquiera pensar en inscribir a sus candidatos. Parecía una medida sensata para que la gente votara con conciencia, pero a algunos, aparentemente, les costó entenderlo.
Y es que el IFED, el Instituto de Formación y Estudios en Democracia, se esforzó por capacitar a todos los partidos, explicando los requisitos y mostrando cómo usar la plataforma. Le mandaron circulares, pusieron funcionarios a disposición... ¡Hicieron de todo para evitar esta chincha! Pero, al parecer, algunos siguieron viviendo en la edad de piedra. Una verdadera pena, porque esto resta credibilidad a todo el proceso democrático.
Castillo insiste en que hicieron todo lo posible para orientarlos. Que hubo capacitaciones, recordatorios, funcionarios dedicados… Pero, ¿será suficiente eso? ¿Cómo es posible que un partido político, supuestamente organizado, llegue tan mal preparado a la hora de inscribir a sus candidatos? Uno se pregunta si realmente entienden la importancia de cumplir con las reglas del juego.
Ahora, el caso está en manos de los magistrados electorales, quienes deberán decidir si aceptan la apelación del Comunal Unido. Mientras tanto, el tiempo corre y las emociones están a flor de piel. Si el Tribunal ratifica la decisión, adiós a las esperanzas de verlos en la boleta electoral. Sería un golpe duro para el partido y una decepción para sus seguidores, aunque muchos dirán que se lo tienen hecho.
Esto nos lleva a reflexionar sobre el nivel de compromiso y organización de algunos actores políticos. No basta con arengas y promesas vacías; hay que demostrar capacidad y responsabilidad. Este caso sirve como una advertencia para todos los partidos: cumplan con las normas o sufrirán las consecuencias. Porque, díganlo claro, el TSE no va a ceder ante nadie. ¡Eso no es andar fiándose!
En fin, la cosa pinta fea para el Comunal Unido, y la verdad es que no sé yo si merecen otra oportunidad. ¿Ustedes creen que el TSE debería darle una última chance a este partido o deberían confirmar la resolución y dejarlos afuera de la contienda? ¡Déjenme saber su opinión en los comentarios!
	
		
			
		
		
	
				
			La jefa del Departamento de Registro de Partidos Políticos del TSE, Marta Castillo, soltó la bomba: faltó la foto y la biografía de sus candidatos. ¡Imagínatelo! Como si fuera un chiste barato. Esto ha generado toda una novela legal, con recursos y apelaciones que parecen no tener fin. Aparentemente, presentaron unas nóminas, pero sin los datos esenciales, lo que generó 23 rechazos iniciales.
Todo esto comenzó hace unos años, pero se agravó con la reforma al artículo 148 del Código Electoral en 2021. La exdiputada Silvia Hernández, con su “Voto Informado”, impuso la obligación de presentar fotos, biografías y planes de gobierno. Desde 2022, todos los partidos debían cumplir con estos requisitos para poder siquiera pensar en inscribir a sus candidatos. Parecía una medida sensata para que la gente votara con conciencia, pero a algunos, aparentemente, les costó entenderlo.
Y es que el IFED, el Instituto de Formación y Estudios en Democracia, se esforzó por capacitar a todos los partidos, explicando los requisitos y mostrando cómo usar la plataforma. Le mandaron circulares, pusieron funcionarios a disposición... ¡Hicieron de todo para evitar esta chincha! Pero, al parecer, algunos siguieron viviendo en la edad de piedra. Una verdadera pena, porque esto resta credibilidad a todo el proceso democrático.
Castillo insiste en que hicieron todo lo posible para orientarlos. Que hubo capacitaciones, recordatorios, funcionarios dedicados… Pero, ¿será suficiente eso? ¿Cómo es posible que un partido político, supuestamente organizado, llegue tan mal preparado a la hora de inscribir a sus candidatos? Uno se pregunta si realmente entienden la importancia de cumplir con las reglas del juego.
Ahora, el caso está en manos de los magistrados electorales, quienes deberán decidir si aceptan la apelación del Comunal Unido. Mientras tanto, el tiempo corre y las emociones están a flor de piel. Si el Tribunal ratifica la decisión, adiós a las esperanzas de verlos en la boleta electoral. Sería un golpe duro para el partido y una decepción para sus seguidores, aunque muchos dirán que se lo tienen hecho.
Esto nos lleva a reflexionar sobre el nivel de compromiso y organización de algunos actores políticos. No basta con arengas y promesas vacías; hay que demostrar capacidad y responsabilidad. Este caso sirve como una advertencia para todos los partidos: cumplan con las normas o sufrirán las consecuencias. Porque, díganlo claro, el TSE no va a ceder ante nadie. ¡Eso no es andar fiándose!
En fin, la cosa pinta fea para el Comunal Unido, y la verdad es que no sé yo si merecen otra oportunidad. ¿Ustedes creen que el TSE debería darle una última chance a este partido o deberían confirmar la resolución y dejarlos afuera de la contienda? ¡Déjenme saber su opinión en los comentarios!