¡Ay, Dios mío! Quién lo diría… resulta que tenemos un europeo escondido por acá, tranquilamente manejando su carro por Curridabat. Pero no era cualquier turista paseándose por nuestro país, ¡no señor! Este man resultó estar siendo buscado en Francia por cosas muy feas: extorsión y homicidio. Una verdadera 'torta' nos cayó encima con este caso.
Según nos cuentan desde el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el tipo, identificado como Basile, tiene 67 años y era objeto de búsqueda internacional por parte de la justicia francesa. Todo esto salió a luz gracias a la colaboración con Interpol Costa Rica, quienes recibieron datos de que el sujeto andaba rondando por nuestras tierras. Después de dos meses de ‘pisarle’ el rastro, lograron ubicarlo viviendo tranqui en Escazú y finalmente capturarlo mientras se daba una vuelta por Curridabat. ¡Imagínate la sorpresa!
La vara es complicada, porque estamos hablando de un homicidio, un asesinato, para ser exactos. Parece que en 2021 hubo un incidente fatal con un tal Gazel en Francia, y este señor Basile es el principal sospechoso. El caso había quedado prácticamente congelado allá, pero ahora parece que la justicia va a tener otra oportunidad para aclarar qué pasó realmente. Uno se pregunta, ¿qué hacía un tipo así por acá, buscando refugio?
Las autoridades judiciales ya lo trasladaron al Tribunal Penal del Primer Circuito Judicial de San José, donde van a empezar a definir los próximos pasos legales. Lo que sí es seguro es que habrá bastante papeleo y seguramente, algún abogado tratando de sacar al tipo de este brete. Ya sabemos cómo son las cosas por acá; siempre hay alguien dispuesto a defender a quien sea, aunque esté metido hasta las cejas en problemas.
Muchos se preguntan cómo pudo pasar esto, ¿cómo se le escapa a la justicia francesa y termina viviendo aquí, sin levantar sospechas? Es que a veces uno se da cuenta de que nuestra seguridad fronteriza necesita un buen repasito. No digo que estemos llenos de maleantes internacionales, pero este caso pone de relieve que hay margen de mejora. Será interesante ver si esto impulsa alguna medida más estricta en los controles migratorios, aunque conociendo a nuestros políticos, probablemente terminen discutiéndolo durante meses sin llegar a ninguna conclusión concreta.
Lo que más me sorprende es cómo algunas personas pueden vivir tranquilas, sabiendo que tienen una orden de captura internacional pendiente. No sé yo, yo creo que tendría pesadillas todos los días. Además, imagínate la cara que puso cuando vio venir a los oficiales del OIJ… ¡seguro se le heló la sangre! Me pregunto qué pensará su familia, si es que la tiene. Seguramente estarán sacándose las castañas del fuego ahora.
Este caso ha levantado mucha polémica en redes sociales. Algunos dicen que deberíamos deportarlo inmediatamente a Francia, otros argumentan que debe enfrentar la justicia aquí también, si cometió algún delito en Costa Rica. Y claro, no faltan los que defienden ciegamente al tipo, diciendo que “todos merecen una segunda oportunidad”. ¡Pero vamos, mae! Esto es un homicidio, no un simple error de tráfico.
En fin, este asunto tiene tela que cortar y seguramente dará mucho de qué hablar en los próximos días. Ahora, díganme ustedes: ¿creen que Costa Rica debería extraditar a Basile a Francia sin importar las consecuencias, o deberían investigarlo a fondo por si hubiera cometido otros crímenes por acá? Dejen sus opiniones en la sección de comentarios, ¡quiero saber qué piensa la gente!
Según nos cuentan desde el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el tipo, identificado como Basile, tiene 67 años y era objeto de búsqueda internacional por parte de la justicia francesa. Todo esto salió a luz gracias a la colaboración con Interpol Costa Rica, quienes recibieron datos de que el sujeto andaba rondando por nuestras tierras. Después de dos meses de ‘pisarle’ el rastro, lograron ubicarlo viviendo tranqui en Escazú y finalmente capturarlo mientras se daba una vuelta por Curridabat. ¡Imagínate la sorpresa!
La vara es complicada, porque estamos hablando de un homicidio, un asesinato, para ser exactos. Parece que en 2021 hubo un incidente fatal con un tal Gazel en Francia, y este señor Basile es el principal sospechoso. El caso había quedado prácticamente congelado allá, pero ahora parece que la justicia va a tener otra oportunidad para aclarar qué pasó realmente. Uno se pregunta, ¿qué hacía un tipo así por acá, buscando refugio?
Las autoridades judiciales ya lo trasladaron al Tribunal Penal del Primer Circuito Judicial de San José, donde van a empezar a definir los próximos pasos legales. Lo que sí es seguro es que habrá bastante papeleo y seguramente, algún abogado tratando de sacar al tipo de este brete. Ya sabemos cómo son las cosas por acá; siempre hay alguien dispuesto a defender a quien sea, aunque esté metido hasta las cejas en problemas.
Muchos se preguntan cómo pudo pasar esto, ¿cómo se le escapa a la justicia francesa y termina viviendo aquí, sin levantar sospechas? Es que a veces uno se da cuenta de que nuestra seguridad fronteriza necesita un buen repasito. No digo que estemos llenos de maleantes internacionales, pero este caso pone de relieve que hay margen de mejora. Será interesante ver si esto impulsa alguna medida más estricta en los controles migratorios, aunque conociendo a nuestros políticos, probablemente terminen discutiéndolo durante meses sin llegar a ninguna conclusión concreta.
Lo que más me sorprende es cómo algunas personas pueden vivir tranquilas, sabiendo que tienen una orden de captura internacional pendiente. No sé yo, yo creo que tendría pesadillas todos los días. Además, imagínate la cara que puso cuando vio venir a los oficiales del OIJ… ¡seguro se le heló la sangre! Me pregunto qué pensará su familia, si es que la tiene. Seguramente estarán sacándose las castañas del fuego ahora.
Este caso ha levantado mucha polémica en redes sociales. Algunos dicen que deberíamos deportarlo inmediatamente a Francia, otros argumentan que debe enfrentar la justicia aquí también, si cometió algún delito en Costa Rica. Y claro, no faltan los que defienden ciegamente al tipo, diciendo que “todos merecen una segunda oportunidad”. ¡Pero vamos, mae! Esto es un homicidio, no un simple error de tráfico.
En fin, este asunto tiene tela que cortar y seguramente dará mucho de qué hablar en los próximos días. Ahora, díganme ustedes: ¿creen que Costa Rica debería extraditar a Basile a Francia sin importar las consecuencias, o deberían investigarlo a fondo por si hubiera cometido otros crímenes por acá? Dejen sus opiniones en la sección de comentarios, ¡quiero saber qué piensa la gente!