¡Ay, Dios mío! Esto se puso caliente ayer en Zapote. Una marcha que prometía ser pacífica en defensa de la democracia terminó con toques y un mae retenido por las autoridades. El ambiente estaba tenso, créeme, y vaya bronca que se armó.
Todo empezó tranquilo, con organizaciones sociales, sindicatos y estudiantes uniéndose para mostrarle al gobierno que no todo está rosa. Decían que ciertas decisiones que ha tomado el Presidente Chaves estaban afectando al país, y bueno, salió gente a decirles sus cosas, ¿sabes?. La idea era marchar desde el Parque Central hasta Casa Presidencial, mandar un mensaje directo al poder ejecutivo.
Pero ni les cuento la sorpresa que nos llevamos cuando vimos a varios diputados y candidatos caminando junto a la gente. Ahí estaba Don Óscar Izquierdo del PLN, buscando darle más fuerza a la movilización. Él mismo dijo que defender la democracia es como mantener viva la llama, que no podemos dejar que se apague, diay. Además, se le sumaron Álvaro Ramos (también PLN), Ana Virginia Calzada del PCDS, Ariel Robles, Jonathan Acuña, Johana Obando… hasta Claudio Alpízar y Ronny Castillo andaban por ahí, demostrando solidaridad.
La cosa se complicó cuando Tránsito bloqueó el camino con un camión pesado. Los manifestantes, especialmente los agricultores, estaban furiosos porque querían llegar hasta la puerta de Casa Presidencial y hablar con el Presidente. La tensión se palpaba en el aire, cada vez más palpable, y ustedes saben cómo son esas situaciones, que pueden escalar rápido.
Entonces llegaron los carros antimotines, y ahí fue donde se vino abajo todo. Empujones, algunos golpes leves, y el grito de la gente pidiendo que les permitieran pasar. Las autoridades insistían en que no podían avanzar porque el bloqueo seguía ahí, y los agricultores, hartos de la situación, empezaron a reclamar más fuerte. ¡Qué brete!
Lo peor de todo fue cuando detuvieron a un agricultor identificado como Don Fallas. Dicen que intentó quitar el camión de encima, pero las autoridades no lo dejaron hacer. Claro, generó mucha indignación entre los demás manifestantes, quienes argumentaban que estaban ejerciendo su derecho a la protesta pacífica. Vaya vara, esto escaló de más.
Ahora bien, analizando la situación, creo que esto refleja una creciente preocupación en la sociedad costarricense por el futuro del país. No solo es la economía, sino también la confianza en las instituciones y en el gobierno actual. Ver tantos políticos sumándose a la protesta demuestra que incluso dentro de la clase política hay inquietud por lo que está pasando. ¿Será que estamos viendo el principio de una crisis mayor, o simplemente una válvula de escape para la frustración acumulada?
En fin, una jornada intensa llena de emociones encontradas. Y ahora me pregunto: ¿Consideras que la respuesta del gobierno ante estas manifestaciones debería ser abrir un diálogo urgente con las organizaciones sociales, o mantener la postura actual de restringir las protestas para evitar conflictos?, ¡Déjame saber tu opinión en los comentarios!
Todo empezó tranquilo, con organizaciones sociales, sindicatos y estudiantes uniéndose para mostrarle al gobierno que no todo está rosa. Decían que ciertas decisiones que ha tomado el Presidente Chaves estaban afectando al país, y bueno, salió gente a decirles sus cosas, ¿sabes?. La idea era marchar desde el Parque Central hasta Casa Presidencial, mandar un mensaje directo al poder ejecutivo.
Pero ni les cuento la sorpresa que nos llevamos cuando vimos a varios diputados y candidatos caminando junto a la gente. Ahí estaba Don Óscar Izquierdo del PLN, buscando darle más fuerza a la movilización. Él mismo dijo que defender la democracia es como mantener viva la llama, que no podemos dejar que se apague, diay. Además, se le sumaron Álvaro Ramos (también PLN), Ana Virginia Calzada del PCDS, Ariel Robles, Jonathan Acuña, Johana Obando… hasta Claudio Alpízar y Ronny Castillo andaban por ahí, demostrando solidaridad.
La cosa se complicó cuando Tránsito bloqueó el camino con un camión pesado. Los manifestantes, especialmente los agricultores, estaban furiosos porque querían llegar hasta la puerta de Casa Presidencial y hablar con el Presidente. La tensión se palpaba en el aire, cada vez más palpable, y ustedes saben cómo son esas situaciones, que pueden escalar rápido.
Entonces llegaron los carros antimotines, y ahí fue donde se vino abajo todo. Empujones, algunos golpes leves, y el grito de la gente pidiendo que les permitieran pasar. Las autoridades insistían en que no podían avanzar porque el bloqueo seguía ahí, y los agricultores, hartos de la situación, empezaron a reclamar más fuerte. ¡Qué brete!
Lo peor de todo fue cuando detuvieron a un agricultor identificado como Don Fallas. Dicen que intentó quitar el camión de encima, pero las autoridades no lo dejaron hacer. Claro, generó mucha indignación entre los demás manifestantes, quienes argumentaban que estaban ejerciendo su derecho a la protesta pacífica. Vaya vara, esto escaló de más.
Ahora bien, analizando la situación, creo que esto refleja una creciente preocupación en la sociedad costarricense por el futuro del país. No solo es la economía, sino también la confianza en las instituciones y en el gobierno actual. Ver tantos políticos sumándose a la protesta demuestra que incluso dentro de la clase política hay inquietud por lo que está pasando. ¿Será que estamos viendo el principio de una crisis mayor, o simplemente una válvula de escape para la frustración acumulada?
En fin, una jornada intensa llena de emociones encontradas. Y ahora me pregunto: ¿Consideras que la respuesta del gobierno ante estas manifestaciones debería ser abrir un diálogo urgente con las organizaciones sociales, o mantener la postura actual de restringir las protestas para evitar conflictos?, ¡Déjame saber tu opinión en los comentarios!
