¡Aguante! Parece que este año sí nos dieron una mano, mae. La Hacienda Pública anunció que la exoneración del marchamo para los vehículos eléctricos estará lista mucho antes de lo que estábamos acostumbrados. Ya saben cómo es esto, siempre hasta el último momento con estas cosas, ¡y uno ahí preocupao’!
Durante años, hemos tenido que esperar hasta diciembre para ver reflejada la exoneración en nuestro recibo del marchamo. Un verdadero dolor de cabeza, especialmente si tenías planes de salir de viaje o simplemente querías tener claro cuánto ibas a pagar. Pero parece que esta vez le pusieronle ganas a la tecnología, dicen que ya no es todo manual.
Según el jerarca Rudolf Lücke, el proceso debería estar completo entre martes y miércoles de esta semana. Esto gracias a que ahora tienen un sistema automatizado, así que ya no hay funcionarios revisando cada solicitud una por una. Eso sí, dice que antes era todo hecho a mano, ¡imagínate la torta que debían estar viviendo esos señores!
Para quienes no estén enterados, este beneficio representa un 20% de descuento en el impuesto a la propiedad para más de 31 mil vehículos eléctricos circulando por el país. Una cifra considerable, demuestra que la movilidad eléctrica va ganando terreno poco a poco, aunque todavía queda bastante camino por recorrer.
Y hablando de números, durante las primeras dos horas del cobro del marchamo, el INS ya ha recaudado más de ¢164 millones. ¡No está mal para empezar! Además, la flota vehicular del país creció un 3%, sumando unos 58 mil autos nuevos. Hay que darle duro, mae, aunque el bolsillo a veces grite.
La Hacienda prevé una recaudación total de ¢162 mil millones en concepto de impuesto a la propiedad de vehículos este año. Eso significa que aunque haya exoneraciones, siguen esperando sacar buen dinero con estos temas. Pero bueno, al menos ahora los dueños de carros eléctricos podrán planificar sus finanzas con anticipación, ¡eso ya es un gran alivio!
Lo cierto es que esta agilización podría marcar un precedente positivo para otros trámites gubernamentales. Si pueden hacer esto con los vehículos eléctricos, ¿por qué no aplicar el mismo criterio a otras áreas donde la burocracia suele ser un brete? Ojalá que sirva de ejemplo para mejorar la eficiencia en general, porque estamos cansados de tanto papeleo y esperas innecesarias, diay.
Ahora bien, ¿ustedes creen que este cambio en el proceso de exoneración para vehículos eléctricos es un paso genuino hacia una administración pública más eficiente o solo una medida cosmética para calmar a los usuarios? ¿Les gustaría ver este tipo de agilización implementada en otros trámites cotidianos?
	
		
			
		
		
	
				
			Durante años, hemos tenido que esperar hasta diciembre para ver reflejada la exoneración en nuestro recibo del marchamo. Un verdadero dolor de cabeza, especialmente si tenías planes de salir de viaje o simplemente querías tener claro cuánto ibas a pagar. Pero parece que esta vez le pusieronle ganas a la tecnología, dicen que ya no es todo manual.
Según el jerarca Rudolf Lücke, el proceso debería estar completo entre martes y miércoles de esta semana. Esto gracias a que ahora tienen un sistema automatizado, así que ya no hay funcionarios revisando cada solicitud una por una. Eso sí, dice que antes era todo hecho a mano, ¡imagínate la torta que debían estar viviendo esos señores!
Para quienes no estén enterados, este beneficio representa un 20% de descuento en el impuesto a la propiedad para más de 31 mil vehículos eléctricos circulando por el país. Una cifra considerable, demuestra que la movilidad eléctrica va ganando terreno poco a poco, aunque todavía queda bastante camino por recorrer.
Y hablando de números, durante las primeras dos horas del cobro del marchamo, el INS ya ha recaudado más de ¢164 millones. ¡No está mal para empezar! Además, la flota vehicular del país creció un 3%, sumando unos 58 mil autos nuevos. Hay que darle duro, mae, aunque el bolsillo a veces grite.
La Hacienda prevé una recaudación total de ¢162 mil millones en concepto de impuesto a la propiedad de vehículos este año. Eso significa que aunque haya exoneraciones, siguen esperando sacar buen dinero con estos temas. Pero bueno, al menos ahora los dueños de carros eléctricos podrán planificar sus finanzas con anticipación, ¡eso ya es un gran alivio!
Lo cierto es que esta agilización podría marcar un precedente positivo para otros trámites gubernamentales. Si pueden hacer esto con los vehículos eléctricos, ¿por qué no aplicar el mismo criterio a otras áreas donde la burocracia suele ser un brete? Ojalá que sirva de ejemplo para mejorar la eficiencia en general, porque estamos cansados de tanto papeleo y esperas innecesarias, diay.
Ahora bien, ¿ustedes creen que este cambio en el proceso de exoneración para vehículos eléctricos es un paso genuino hacia una administración pública más eficiente o solo una medida cosmética para calmar a los usuarios? ¿Les gustaría ver este tipo de agilización implementada en otros trámites cotidianos?