¡Ay, Dios mío! La cosa está feísima en nuestras carreteras, raza. Literalmente, nos estamos matando a pedales. En tan solo 24 horas, dos motociclistas más se fueron al otro lado, sumándose a una lista negra que da escalofríos y haciendo que este 2025 cierre con números de récord negativos.
La Cruz Roja no se anda con rodeos: hasta ahora, 240 motociclistas ya le dijeron adiós al mundo sobre el asfalto. Imagínate el golpe que eso le da a las familias. No es bronca de estadísticas frías, es gente, mae, gente con sueños, con proyectos, con familia... que se fueron en un abrir y cerrar de ojos gracias a la irresponsabilidad ajena o, simplemente, a la mala suerte.
Y ni hablemos del resto. Si metemos toda la data, incluyendo choferes de carro, peatones y bicicleteros, llegamos a casi 500 personas que dejaron este mundo a causa de accidentes de tráfico este año. ¡Una verdadera tragedia nacional! Pero la cosa no termina ahí, porque hay miles –más de 3,000, para ser exactos– que llegaron a las salas de emergencia en condición crítica, buscando agarrarse de un clavo ardiendo.
Muchos lograron sobrevivir, sí, pero con secuelas de por vida. Amputaciones, discapacidades permanentes... Una carga que tendrán que llevar encima durante el resto de sus días. Y eso, raza, es algo que deberíamos tener muchísimo presente al subirnos a cualquier vehículo.
Según la oficial Andrea Segura de la Policía de Tránsito, el problema es simple, aunque complicado de solucionar: “El exceso de velocidad sigue siendo la principal culpable, y el alcohol al volante es otra maraña que tenemos que desenredar”. ¡Tiene razón la dama! Pero también hay que hablar del irrespeto a las señales, esos rayones amarillos que parecen invitaciones a un juego peligroso, y de esas maniobras de adelanto suicidas que te dejan helado.
Y ahora, con los aguinaldos en mano y ganas de salir de parranda, la cosa se pone peor. Diciembre se perfila como el mes más peligroso del año. Licor, velocidad y más tráfico… Una combinación explosiva que históricamente dispara las cifras de accidentes. Es hora de ponerle calma a las papas y recordar que llegar cinco minutos tarde es mil veces mejor que no llegar jamás.
Las autoridades están insistiendo en los revisiones mecánicas, especialmente para las motos. Llanta lisa o freno flojo en tiempos de lluvia o viento puede significar la diferencia entre volver a casa sano y salvo, o terminar convirtiéndote en una estadística más. Mejor prevenir que lamentar, ¿no?
En fin, la pregunta es esta, compas: ¿qué podemos hacer nosotros, como ciudadanos responsables, para cambiar esta realidad? ¿Debería haber sanciones más fuertes para los infractores? ¿Es suficiente la campaña de concientización actual? ¿O necesitamos urgentemente implementar nuevas medidas para proteger a todos los usuarios de las vías? ¡Déjenme sus opiniones en el foro!
La Cruz Roja no se anda con rodeos: hasta ahora, 240 motociclistas ya le dijeron adiós al mundo sobre el asfalto. Imagínate el golpe que eso le da a las familias. No es bronca de estadísticas frías, es gente, mae, gente con sueños, con proyectos, con familia... que se fueron en un abrir y cerrar de ojos gracias a la irresponsabilidad ajena o, simplemente, a la mala suerte.
Y ni hablemos del resto. Si metemos toda la data, incluyendo choferes de carro, peatones y bicicleteros, llegamos a casi 500 personas que dejaron este mundo a causa de accidentes de tráfico este año. ¡Una verdadera tragedia nacional! Pero la cosa no termina ahí, porque hay miles –más de 3,000, para ser exactos– que llegaron a las salas de emergencia en condición crítica, buscando agarrarse de un clavo ardiendo.
Muchos lograron sobrevivir, sí, pero con secuelas de por vida. Amputaciones, discapacidades permanentes... Una carga que tendrán que llevar encima durante el resto de sus días. Y eso, raza, es algo que deberíamos tener muchísimo presente al subirnos a cualquier vehículo.
Según la oficial Andrea Segura de la Policía de Tránsito, el problema es simple, aunque complicado de solucionar: “El exceso de velocidad sigue siendo la principal culpable, y el alcohol al volante es otra maraña que tenemos que desenredar”. ¡Tiene razón la dama! Pero también hay que hablar del irrespeto a las señales, esos rayones amarillos que parecen invitaciones a un juego peligroso, y de esas maniobras de adelanto suicidas que te dejan helado.
Y ahora, con los aguinaldos en mano y ganas de salir de parranda, la cosa se pone peor. Diciembre se perfila como el mes más peligroso del año. Licor, velocidad y más tráfico… Una combinación explosiva que históricamente dispara las cifras de accidentes. Es hora de ponerle calma a las papas y recordar que llegar cinco minutos tarde es mil veces mejor que no llegar jamás.
Las autoridades están insistiendo en los revisiones mecánicas, especialmente para las motos. Llanta lisa o freno flojo en tiempos de lluvia o viento puede significar la diferencia entre volver a casa sano y salvo, o terminar convirtiéndote en una estadística más. Mejor prevenir que lamentar, ¿no?
En fin, la pregunta es esta, compas: ¿qué podemos hacer nosotros, como ciudadanos responsables, para cambiar esta realidad? ¿Debería haber sanciones más fuertes para los infractores? ¿Es suficiente la campaña de concientización actual? ¿O necesitamos urgentemente implementar nuevas medidas para proteger a todos los usuarios de las vías? ¡Déjenme sus opiniones en el foro!
