¡Ay, ay, ay! Un notificador del Poder Judicial tuvo un susto tremendo este martes en Santa Cecilia de Santa Cruz. Resulta que Cristian Castillo, así se llama el pobre tipo, se descompuso al volante de su motocicleta y terminó dando un buen coscorrón contra el pavimento. Menos mal que no pasó peor, ¡pero qué torta!
Según nos cuentan los vecinos del sector, el incidente ocurrió alrededor del mediodía, casi pegadito al Bar El Bunker, justo donde queda el Súper de Johnny. Parecía un día normal, sol radiante, gente caminando… y de repente, ¡bam!, la moto tirada y el señor Castillo pidiendo auxilio. Parece que la presión del trabajo le jugó una mala pasada, diay.
Lo que pasó exactamente aún está bajo investigación, pero fuentes cercanas al caso nos comentan que el notificador iba apurado, seguramente llevando papeles importantes del Juzgado. Uno sabe cómo está eso, entre juicios, notificaciones y trámites burocráticos... el estrés acumula y a veces te puede pasar factura, como le pasó a este mae.
Al parecer, el señor Castillo venía manejando tranquilo por la calle cuando, súbitamente, sintió un mareo y perdió el control de la moto. La máquina salió disparada y terminó golpeando contra el suelo, encima de la pierna derecha del notificador. ¡Imagínate el dolor! Por suerte, la caída no fue peor, pero sí le dejó una lesión considerable.
En cuestión de minutos, llegó la policía de tránsito a controlar el tráfico y asegurar la zona. También acudieron paramédicos de Meditrans, quienes evaluaron al notificador en el lugar y determinaron que necesitaba ser trasladado a un centro médico para recibir atención especializada. Dicen que la pierna estaba bastante hinchada y con moretones, pero afortunadamente, no parece haber fracturas graves.
Las autoridades ya están investigando las causas exactas de la descompensación. No descartan factores como el cansancio, el estrés laboral o incluso alguna condición médica preexistente. Lo importante ahora es que el señor Castillo reciba la mejor atención posible y se recupere pronto. Esperemos que esto sirva de alerta para todos aquellos que trabajan duro y se olvidan de cuidarse un poquito.
Este incidente nos recuerda que hay que tomarle importancia al autocuidado. El trabajo es fundamental, sí, pero la salud siempre viene primero. A veces, un pequeño respiro, unas vacaciones o simplemente desconectarse unos minutos pueden hacer toda la diferencia. Y ojo con esas prisas, ¡que a veces nos llevan a comernos una torta como esta!
Ahora me pregunto, ¿cuánto creen ustedes que debería invertir el Poder Judicial en programas de bienestar y cuidado de la salud mental para sus funcionarios, considerando el alto nivel de estrés que enfrentan diariamente? ¡Compártanme sus opiniones en el foro!
Según nos cuentan los vecinos del sector, el incidente ocurrió alrededor del mediodía, casi pegadito al Bar El Bunker, justo donde queda el Súper de Johnny. Parecía un día normal, sol radiante, gente caminando… y de repente, ¡bam!, la moto tirada y el señor Castillo pidiendo auxilio. Parece que la presión del trabajo le jugó una mala pasada, diay.
Lo que pasó exactamente aún está bajo investigación, pero fuentes cercanas al caso nos comentan que el notificador iba apurado, seguramente llevando papeles importantes del Juzgado. Uno sabe cómo está eso, entre juicios, notificaciones y trámites burocráticos... el estrés acumula y a veces te puede pasar factura, como le pasó a este mae.
Al parecer, el señor Castillo venía manejando tranquilo por la calle cuando, súbitamente, sintió un mareo y perdió el control de la moto. La máquina salió disparada y terminó golpeando contra el suelo, encima de la pierna derecha del notificador. ¡Imagínate el dolor! Por suerte, la caída no fue peor, pero sí le dejó una lesión considerable.
En cuestión de minutos, llegó la policía de tránsito a controlar el tráfico y asegurar la zona. También acudieron paramédicos de Meditrans, quienes evaluaron al notificador en el lugar y determinaron que necesitaba ser trasladado a un centro médico para recibir atención especializada. Dicen que la pierna estaba bastante hinchada y con moretones, pero afortunadamente, no parece haber fracturas graves.
Las autoridades ya están investigando las causas exactas de la descompensación. No descartan factores como el cansancio, el estrés laboral o incluso alguna condición médica preexistente. Lo importante ahora es que el señor Castillo reciba la mejor atención posible y se recupere pronto. Esperemos que esto sirva de alerta para todos aquellos que trabajan duro y se olvidan de cuidarse un poquito.
Este incidente nos recuerda que hay que tomarle importancia al autocuidado. El trabajo es fundamental, sí, pero la salud siempre viene primero. A veces, un pequeño respiro, unas vacaciones o simplemente desconectarse unos minutos pueden hacer toda la diferencia. Y ojo con esas prisas, ¡que a veces nos llevan a comernos una torta como esta!
Ahora me pregunto, ¿cuánto creen ustedes que debería invertir el Poder Judicial en programas de bienestar y cuidado de la salud mental para sus funcionarios, considerando el alto nivel de estrés que enfrentan diariamente? ¡Compártanme sus opiniones en el foro!
