¡Ay, Dios mío! Aquí vamos otra vez, con este gobierno haciendo de las suyas. Resulta que ahora, en estas sesiones extraordinarias, parece que solo le interesa impulsar proyectos de sus panas, dejando a la oposición mordiéndose las uñas. Una pena, porque uno esperaría un poquito más de diálogo y acuerdos, pero parece que eso ya es cuento chino.
Según nos cuentan los pelones, el Ejecutivo decidió darle prioridad a iniciativas de Nueva República, el PUSC y, obviamente, del oficialismo. Entre estos proyectos, tenemos la armonización del mercado eléctrico, el famoso plan 4x3 (ese que siempre sale rana), y una reforma a la ley Japdeva. Además, andan buscando aprobar un plan contra el sicariato, cortesía de los “fabricistas”, y una reforma a la Ley de Extradición que, según dicen, tiene algunos resabios rarísimos. ¡Qué vaina!
Pero la cosa se pone más picante cuando vemos que los diputados del PLN y el Frente Amplio están reclamando a gritos que no les incluyen ninguna de sus propuestas en la agenda parlamentaria. Dicen que esto huele a revancha, como si quisieran castigar a la oposición por haber intentado destituir al Presidente Chaves hace poco. Al final, esas bancadas también tuvieron voto importante para defenderlo y ahora parecen estar pagando el precio. ¡Un chin de bronca!
Y ojo, que durante estas sesiones extraordinarias, el Ejecutivo tiene la sartén por el mango, manejando la agenda parlamentaria. Así que pueden convocar y desconvocar iniciativas como les dé la gana. Con esto, cualquiera puede ver que están moviendo los hilos a su antojo, sin preocuparse demasiado por escuchar otras voces. La verdad, da qué pensar, ¿no?
Lo curioso es que esta priorización viene justo después de la votación sobre la inmunidad de Chaves, donde varios diputados de la oposición se opusieron a levantarla. Entonces, ¿será que esta jugada del gobierno es una forma de pagarles con la misma moneda? Muchos creen que sí, y lo consideran una muestra de poca madurez política. ¡Una verdadera pena para el país, mijo!
Oscar Izquierdo, jefe de fracción del PLN, no se anduvo con rodeos y expresó su descontento en la última reunión de jefaturas de fracción. Dijo textualmente: “Parece que el interés es no permitir la participación de otros partidos, romper puentes nuevamente”. Y Kattia Cambronero, diputada independiente, fue aún más dura, calificando la actitud del Presidente como “una gran inmadurez en materia política”. ¡Qué palabras tan fuertes, eh!
Del lado del Frente Amplio, Jonathan Acuña Soto sigue insistiendo en que convoquen el proyecto de licencias de cuidado, que ya había sido aprobado en primer debate. Argumenta que el presidente y Pilar Cisneros están jugando con el tiempo y poniendo en riesgo los derechos de las familias costarricenses. Dice que no es necesario esperar la aprobación de la Contraloría para autorizar los fondos y que están tratando de convertir esto en un circo mediático para culpar a otros. ¡Cómo anda la cosa!
Ahora, la pregunta que queda flotando en el aire es: ¿Hasta dónde llegará esta polarización política? ¿Será posible encontrar puntos en común entre el gobierno y la oposición para trabajar juntos por el bienestar del país? O, ¿continuaremos viendo este tipo de maniobras políticas que solo sirven para dividirnos y entorpecer el desarrollo nacional? ¡Vamos a debatir sobre esto en el foro, mi gente!
Según nos cuentan los pelones, el Ejecutivo decidió darle prioridad a iniciativas de Nueva República, el PUSC y, obviamente, del oficialismo. Entre estos proyectos, tenemos la armonización del mercado eléctrico, el famoso plan 4x3 (ese que siempre sale rana), y una reforma a la ley Japdeva. Además, andan buscando aprobar un plan contra el sicariato, cortesía de los “fabricistas”, y una reforma a la Ley de Extradición que, según dicen, tiene algunos resabios rarísimos. ¡Qué vaina!
Pero la cosa se pone más picante cuando vemos que los diputados del PLN y el Frente Amplio están reclamando a gritos que no les incluyen ninguna de sus propuestas en la agenda parlamentaria. Dicen que esto huele a revancha, como si quisieran castigar a la oposición por haber intentado destituir al Presidente Chaves hace poco. Al final, esas bancadas también tuvieron voto importante para defenderlo y ahora parecen estar pagando el precio. ¡Un chin de bronca!
Y ojo, que durante estas sesiones extraordinarias, el Ejecutivo tiene la sartén por el mango, manejando la agenda parlamentaria. Así que pueden convocar y desconvocar iniciativas como les dé la gana. Con esto, cualquiera puede ver que están moviendo los hilos a su antojo, sin preocuparse demasiado por escuchar otras voces. La verdad, da qué pensar, ¿no?
Lo curioso es que esta priorización viene justo después de la votación sobre la inmunidad de Chaves, donde varios diputados de la oposición se opusieron a levantarla. Entonces, ¿será que esta jugada del gobierno es una forma de pagarles con la misma moneda? Muchos creen que sí, y lo consideran una muestra de poca madurez política. ¡Una verdadera pena para el país, mijo!
Oscar Izquierdo, jefe de fracción del PLN, no se anduvo con rodeos y expresó su descontento en la última reunión de jefaturas de fracción. Dijo textualmente: “Parece que el interés es no permitir la participación de otros partidos, romper puentes nuevamente”. Y Kattia Cambronero, diputada independiente, fue aún más dura, calificando la actitud del Presidente como “una gran inmadurez en materia política”. ¡Qué palabras tan fuertes, eh!
Del lado del Frente Amplio, Jonathan Acuña Soto sigue insistiendo en que convoquen el proyecto de licencias de cuidado, que ya había sido aprobado en primer debate. Argumenta que el presidente y Pilar Cisneros están jugando con el tiempo y poniendo en riesgo los derechos de las familias costarricenses. Dice que no es necesario esperar la aprobación de la Contraloría para autorizar los fondos y que están tratando de convertir esto en un circo mediático para culpar a otros. ¡Cómo anda la cosa!
Ahora, la pregunta que queda flotando en el aire es: ¿Hasta dónde llegará esta polarización política? ¿Será posible encontrar puntos en común entre el gobierno y la oposición para trabajar juntos por el bienestar del país? O, ¿continuaremos viendo este tipo de maniobras políticas que solo sirven para dividirnos y entorpecer el desarrollo nacional? ¡Vamos a debatir sobre esto en el foro, mi gente!
