¡Ay, Dios mío! Acá se puso candela, mi gente. El ambiente político ya andaba tenso, pero esto lo elevó a otro nivel. La bancada oficialista, liderada por Pilar Cisneros, le soltó la bronca al vocero del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Gustavo Román Jacobo, acusándolo de parcialidad y de meterse en política activa. Parece que algunos diputados no digieren muy bien sus declaraciones en los medios.
Para ponerlos en clima, la jugada va así: según la legisladora Cisneros, Román ha estado dejando caer comentarios en entrevistas que buscan desacreditar al gobierno actual y favorecer a otros actores políticos. Dicen que el mae se ha pasado de listo, opinando sobre temas que no le incumben directamente, y eso ha encendido alarmas en el oficialismo. Claro, estamos a pocos meses de la elección y la tensión es palpable, diay.
"Queda en absoluta evidencia su parcialidad y su deseo que este Gobierno no continúe," declaró Cisneros con toda la actitud, presentando la denuncia formal este lunes. El asunto no es broma, porque Román es asesor político del TSE, y su rol es precisamente garantizar la imparcialidad del ente electoral. Esto huele a gallina podrida, aunque todavía no hay pruebas contundentes más allá de las interpretaciones de la bancada oficialista.
Juan Luis Rivera, coordinador del Cuerpo de Letrados del TSE, confirmó que ya están tramitando ambas denuncias –una de los diputados y otra impulsada por un grupo de ciudadanos preocupados por la situación. Eso sí, el TSE no se queda de brazos cruzados ante estas acusaciones, y parece que van a investigar a fondo el caso para aclarar si hubo o no alguna irregularidad. Ahora, si se mete con la transparencia, ahí sí que vamos jodidos, ¿eh?
Cisneros, visiblemente molesta, expresó su esperanza de que el tribunal revise rápidamente el recurso y aplique una sanción ejemplar contra Román. Quiere mandar un mensaje claro: nadie, ni siquiera un vocero del TSE, puede permitirse politizar las elecciones. Yo creo que quiere quitarle importancia a las próximas elecciones, pero así no se puede ir jugando, ¿verdad? Porque sino, ¡qué torta!
La verdad, el TSE debería tomar cartas en el asunto. Un organismo encargado de velar por la integridad del proceso electoral no puede tener funcionarios involucrados en polémicas políticas. Siendo justos, Román siempre ha sido un tipo directo, pero quizás se excedió en sus comentarios. Lo importante ahora es que se haga una investigación exhaustiva y se determine si realmente hubo alguna infracción a la ley electoral. Si no, se le acabaron los churritos.
Este entuerto llega en un momento crucial, justo cuando todos estamos pendientes de los preparativos para las elecciones. Ya sabemos cómo se pone la cosa cuando se acerca la fecha, y cualquier incidente puede encender aún más los ánimos. Esperemos que el TSE actúe con prudencia y transparencia, y que se pueda resolver esta controversia sin afectar la confianza de los ciudadanos en el proceso democrático. Porque al final, lo que queremos es que las elecciones sean limpias y justas, ¿quién no?
Bueno, mi gente, ya vieron el lío en que nos hemos metido. Este caso promete darle bastante qué hablar a los próximos días, y seguramente veremos muchas idas y vueltas. ¿Ustedes creen que la denuncia de la bancada oficialista tiene fundamentos sólidos, o simplemente es una estrategia política para desgastar al TSE? Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensa la gente sobre esto. ¡Y cuidado con los ataques personales, eh! Aquí venimos a debatir ideas, no a echarnos puras pullas.
	
		
			
		
		
	
				
			Para ponerlos en clima, la jugada va así: según la legisladora Cisneros, Román ha estado dejando caer comentarios en entrevistas que buscan desacreditar al gobierno actual y favorecer a otros actores políticos. Dicen que el mae se ha pasado de listo, opinando sobre temas que no le incumben directamente, y eso ha encendido alarmas en el oficialismo. Claro, estamos a pocos meses de la elección y la tensión es palpable, diay.
"Queda en absoluta evidencia su parcialidad y su deseo que este Gobierno no continúe," declaró Cisneros con toda la actitud, presentando la denuncia formal este lunes. El asunto no es broma, porque Román es asesor político del TSE, y su rol es precisamente garantizar la imparcialidad del ente electoral. Esto huele a gallina podrida, aunque todavía no hay pruebas contundentes más allá de las interpretaciones de la bancada oficialista.
Juan Luis Rivera, coordinador del Cuerpo de Letrados del TSE, confirmó que ya están tramitando ambas denuncias –una de los diputados y otra impulsada por un grupo de ciudadanos preocupados por la situación. Eso sí, el TSE no se queda de brazos cruzados ante estas acusaciones, y parece que van a investigar a fondo el caso para aclarar si hubo o no alguna irregularidad. Ahora, si se mete con la transparencia, ahí sí que vamos jodidos, ¿eh?
Cisneros, visiblemente molesta, expresó su esperanza de que el tribunal revise rápidamente el recurso y aplique una sanción ejemplar contra Román. Quiere mandar un mensaje claro: nadie, ni siquiera un vocero del TSE, puede permitirse politizar las elecciones. Yo creo que quiere quitarle importancia a las próximas elecciones, pero así no se puede ir jugando, ¿verdad? Porque sino, ¡qué torta!
La verdad, el TSE debería tomar cartas en el asunto. Un organismo encargado de velar por la integridad del proceso electoral no puede tener funcionarios involucrados en polémicas políticas. Siendo justos, Román siempre ha sido un tipo directo, pero quizás se excedió en sus comentarios. Lo importante ahora es que se haga una investigación exhaustiva y se determine si realmente hubo alguna infracción a la ley electoral. Si no, se le acabaron los churritos.
Este entuerto llega en un momento crucial, justo cuando todos estamos pendientes de los preparativos para las elecciones. Ya sabemos cómo se pone la cosa cuando se acerca la fecha, y cualquier incidente puede encender aún más los ánimos. Esperemos que el TSE actúe con prudencia y transparencia, y que se pueda resolver esta controversia sin afectar la confianza de los ciudadanos en el proceso democrático. Porque al final, lo que queremos es que las elecciones sean limpias y justas, ¿quién no?
Bueno, mi gente, ya vieron el lío en que nos hemos metido. Este caso promete darle bastante qué hablar a los próximos días, y seguramente veremos muchas idas y vueltas. ¿Ustedes creen que la denuncia de la bancada oficialista tiene fundamentos sólidos, o simplemente es una estrategia política para desgastar al TSE? Déjenme sus opiniones en el foro, quiero saber qué piensa la gente sobre esto. ¡Y cuidado con los ataques personales, eh! Aquí venimos a debatir ideas, no a echarnos puras pullas.