¡Ay, Dios mío! Así amanecimos hoy, con el IMN soltando la bomba de que este sábado va a llover a mares en varias partes del país. De verdad, parece que el cielo nos quiere mojar hasta los huesos. Según los pronósticos, el panorama pinta mojado, especialmente para quienes viven en la parte brava del Caribe, pero también nos tocará aguantar algunos chaparrones si estamos por el Valle Central o paseándonos por Guanacaste. Prepárense, pues, porque no pinta para un día de paseo en la playa.
Como bien saben los nacionales, estos cambios climáticos no son novedad. Pero vaya que este aviso llegó con fuerza. El Instituto Meteorológico Nacional (IMN), esos que siempre andan ojo avizor, nos informaron que desde la madrugada y la mañana de este sábado vamos a sentir la humedad pegajosa, acompañada de lluvias y aguaceros intensos. Y eso, mis queridos lectores, significa que hay que sacar la impermeable, calzar las botas de llanta y prepararse mentalmente para el tráfico lento y frustrante que seguramente vendrá con todo este diluvio.
Pero no todo es tan malo, ¿eh? Al menos tendremos excusa para quedarnos en casa viendo series en Netflix o preparando un rico chocolate caliente. Y para los que vivimos en el Pacífico, aunque la probabilidad de lluvia sea menor, siempre existe la posibilidad de que nos caiga algún chuvasquito repentino en las montañas durante la tarde. Así que, nada de confiarse, ¡el clima tico nunca decepciona!
Lo que sí preocupa un poquito son los vientos. El IMN advierte que se mantendrán moderados a fuertes, con ráfagas que podrían alcanzar velocidades de hasta 80 kilómetros por hora en las montañas y en el norte de Guanacaste. Imagínense el jaleo que van a hacer las ramas de los árboles, ¡qué despiche! Hay que tener cuidado con las líneas eléctricas y evitar salir a lugares expuestos si no es estrictamente necesario. No queremos que nadie se jalé una torta por culpa del viento.
Ahora, hablando de Guanacaste, allá la cosa pinta aún más movida. Se esperan ráfagas de viento entre 30 y 50 kilómetros por hora, con máximos de hasta 80 km/h, especialmente en las zonas altas. Si están pensando en ir a disfrutar de la playa guanacasteca, mejor piénselo dos veces. Más vale prevenir que lamentar, ¿verdad? Además, con tanta agua, la arena no va a estar precisamente invitante para tomar el sol.
Y para los que vivimos en el Valle Central, tampoco podemos relajarnos. Aunque la probabilidad de lluvia sea menor en comparación con la Vertiente del Caribe, no nos exentos de recibir algunos aguaceros dispersos. Así que, si planean salir, lleven paraguas o impermeables, y conduzcan con precaución. Las carreteras pueden volverse resbaladizas y la visibilidad puede disminuir considerablemente.
En fin, parece que este sábado vamos a pasar encerrados escuchando la lluvia golpear contra las ventanas. Pero hey, ¡eso no es tan malo! Podemos aprovechar para leer ese libro que tenemos pendiente, ponernos al día con los mensajes de WhatsApp o simplemente descansar un poco. Después de todo, un día lluvioso también tiene sus ventajas. Además, recuerda que toda esta agua es necesaria para reponer nuestros ríos y lagos, ¡así que agradezcamos la bendición del cielo!
Así que ya saben, varones y damas, prepárense para enfrentar este temporal con actitud positiva y mucho sentido común. ¿Ustedes creen que con este tipo de pronósticos deberíamos empezar a invertir en sistemas de drenaje más eficientes en nuestras comunidades para evitar inundaciones y otros problemas? Compartan sus ideas en los comentarios, ¡queremos saber qué piensan al respecto!
Como bien saben los nacionales, estos cambios climáticos no son novedad. Pero vaya que este aviso llegó con fuerza. El Instituto Meteorológico Nacional (IMN), esos que siempre andan ojo avizor, nos informaron que desde la madrugada y la mañana de este sábado vamos a sentir la humedad pegajosa, acompañada de lluvias y aguaceros intensos. Y eso, mis queridos lectores, significa que hay que sacar la impermeable, calzar las botas de llanta y prepararse mentalmente para el tráfico lento y frustrante que seguramente vendrá con todo este diluvio.
Pero no todo es tan malo, ¿eh? Al menos tendremos excusa para quedarnos en casa viendo series en Netflix o preparando un rico chocolate caliente. Y para los que vivimos en el Pacífico, aunque la probabilidad de lluvia sea menor, siempre existe la posibilidad de que nos caiga algún chuvasquito repentino en las montañas durante la tarde. Así que, nada de confiarse, ¡el clima tico nunca decepciona!
Lo que sí preocupa un poquito son los vientos. El IMN advierte que se mantendrán moderados a fuertes, con ráfagas que podrían alcanzar velocidades de hasta 80 kilómetros por hora en las montañas y en el norte de Guanacaste. Imagínense el jaleo que van a hacer las ramas de los árboles, ¡qué despiche! Hay que tener cuidado con las líneas eléctricas y evitar salir a lugares expuestos si no es estrictamente necesario. No queremos que nadie se jalé una torta por culpa del viento.
Ahora, hablando de Guanacaste, allá la cosa pinta aún más movida. Se esperan ráfagas de viento entre 30 y 50 kilómetros por hora, con máximos de hasta 80 km/h, especialmente en las zonas altas. Si están pensando en ir a disfrutar de la playa guanacasteca, mejor piénselo dos veces. Más vale prevenir que lamentar, ¿verdad? Además, con tanta agua, la arena no va a estar precisamente invitante para tomar el sol.
Y para los que vivimos en el Valle Central, tampoco podemos relajarnos. Aunque la probabilidad de lluvia sea menor en comparación con la Vertiente del Caribe, no nos exentos de recibir algunos aguaceros dispersos. Así que, si planean salir, lleven paraguas o impermeables, y conduzcan con precaución. Las carreteras pueden volverse resbaladizas y la visibilidad puede disminuir considerablemente.
En fin, parece que este sábado vamos a pasar encerrados escuchando la lluvia golpear contra las ventanas. Pero hey, ¡eso no es tan malo! Podemos aprovechar para leer ese libro que tenemos pendiente, ponernos al día con los mensajes de WhatsApp o simplemente descansar un poco. Después de todo, un día lluvioso también tiene sus ventajas. Además, recuerda que toda esta agua es necesaria para reponer nuestros ríos y lagos, ¡así que agradezcamos la bendición del cielo!
Así que ya saben, varones y damas, prepárense para enfrentar este temporal con actitud positiva y mucho sentido común. ¿Ustedes creen que con este tipo de pronósticos deberíamos empezar a invertir en sistemas de drenaje más eficientes en nuestras comunidades para evitar inundaciones y otros problemas? Compartan sus ideas en los comentarios, ¡queremos saber qué piensan al respecto!