¡Ay, Dios mío! Quién lo diría, parece que el deslizamiento en Cambronero no quiere soltarlo. La Interamericana sur sigue cerrada, y pa' los que tenemos que movernos hacia el Pacífico, pues la cosa se pone complicada. Un mes, dicen las autoridades, para poner esos puentes modulares. Un mes varados, cambiando de ruta… ¡qué despiche!
Como muchos saben, la ruta 1, nuestra querida Interamericana, sufrió un golpe duro hace unas semanas. Una parte de la carretera cedió, dejándonos sin acceso directo al Pacífico. La tierra, parece que decidió hacerle cosquillas a la carretera y pum, ahí quedó todo parado. Se habló de lluvias intensas, de problemas geológicos… la verdad, qué vara tan mala nos cayó.
Pero bueno, no todo es drama, el MOPT (Ministerio de Obras Públicas y Transportes) ha estado buscando soluciones, y ofrece dos opciones para seguir avanzando. Pa’ los carros livianos, recomiendan desviarse por la ruta cantonal que va entre Río Jesús y Piedras Blancas. Es una alternativa, sí, pero no precisamente rápida ni cómoda. Imagínate el tráfico que habrá por ahí, ¡más vale salir temprano, mae!
Y si tienes un tráiler o un carro pesado, la cosa cambia. Te sugieren tomar la ruta nacional 27, esa que te lleva desde San José hasta Caldera. Otra opción es ir por la ruta 3 hasta Alajuela y luego conectar con Orotina y la 27. Eso sí, prepárate porque seguramente habrá movimiento, especialmente los fines de semana, cuando todos quieren aprovechar la playa. ¡Qué carga tener que planear así el viaje!
Muchos se preguntan, ¿por qué no se hizo esto antes? La verdad, la respuesta no es sencilla. Parece que hubo algunas complicaciones con los permisos, con la disponibilidad de materiales... el brete siempre aparece, diay. Pero bueno, ahora toca esperar y tratar de mantener la calma mientras arreglan la cosa. Lo importante es llegar seguros a destino, aunque sea dando rodeos.
Algunos choferes ya están quejándose, claro. Dicen que esas rutas alternativas no están preparadas para el volumen de tráfico que van a recibir. Que hay baches, curvas peligrosas y poca señalización. Esperemos que el MOPT tome cartas en el asunto y mejore las condiciones de estos caminos alternativos antes de que se conviertan en un verdadero problema. Porque sino, ¡será otro despiche encima del primero!
Y hablando de temas relacionados, me acuerdo de aquella vez que mi tío tuvo que llevar un contenedor lleno de mangos a Puntarenas y le tomó casi todo el día. Hablando de frutas, alguien sabe si este año la cosecha de maracuyá va a estar bien? Ya quiero preparar un batido bien rico, porque con todo este estrés necesito algo que me anime. El negocio es buscar el lado positivo en medio del caos, ¿verdad?
Así que, queridos lectores, mientras esperamos que arreglen la carretera en Cambronero, les pregunto: ¿Cuál creen ustedes sería la medida más efectiva para evitar futuros deslizamientos de este tipo en nuestras carreteras? ¿Deberíamos invertir más en estudios geotécnicos, mejorar el drenaje o implementar sistemas de alerta temprana? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, estoy ansioso por leerlas!
Como muchos saben, la ruta 1, nuestra querida Interamericana, sufrió un golpe duro hace unas semanas. Una parte de la carretera cedió, dejándonos sin acceso directo al Pacífico. La tierra, parece que decidió hacerle cosquillas a la carretera y pum, ahí quedó todo parado. Se habló de lluvias intensas, de problemas geológicos… la verdad, qué vara tan mala nos cayó.
Pero bueno, no todo es drama, el MOPT (Ministerio de Obras Públicas y Transportes) ha estado buscando soluciones, y ofrece dos opciones para seguir avanzando. Pa’ los carros livianos, recomiendan desviarse por la ruta cantonal que va entre Río Jesús y Piedras Blancas. Es una alternativa, sí, pero no precisamente rápida ni cómoda. Imagínate el tráfico que habrá por ahí, ¡más vale salir temprano, mae!
Y si tienes un tráiler o un carro pesado, la cosa cambia. Te sugieren tomar la ruta nacional 27, esa que te lleva desde San José hasta Caldera. Otra opción es ir por la ruta 3 hasta Alajuela y luego conectar con Orotina y la 27. Eso sí, prepárate porque seguramente habrá movimiento, especialmente los fines de semana, cuando todos quieren aprovechar la playa. ¡Qué carga tener que planear así el viaje!
Muchos se preguntan, ¿por qué no se hizo esto antes? La verdad, la respuesta no es sencilla. Parece que hubo algunas complicaciones con los permisos, con la disponibilidad de materiales... el brete siempre aparece, diay. Pero bueno, ahora toca esperar y tratar de mantener la calma mientras arreglan la cosa. Lo importante es llegar seguros a destino, aunque sea dando rodeos.
Algunos choferes ya están quejándose, claro. Dicen que esas rutas alternativas no están preparadas para el volumen de tráfico que van a recibir. Que hay baches, curvas peligrosas y poca señalización. Esperemos que el MOPT tome cartas en el asunto y mejore las condiciones de estos caminos alternativos antes de que se conviertan en un verdadero problema. Porque sino, ¡será otro despiche encima del primero!
Y hablando de temas relacionados, me acuerdo de aquella vez que mi tío tuvo que llevar un contenedor lleno de mangos a Puntarenas y le tomó casi todo el día. Hablando de frutas, alguien sabe si este año la cosecha de maracuyá va a estar bien? Ya quiero preparar un batido bien rico, porque con todo este estrés necesito algo que me anime. El negocio es buscar el lado positivo en medio del caos, ¿verdad?
Así que, queridos lectores, mientras esperamos que arreglen la carretera en Cambronero, les pregunto: ¿Cuál creen ustedes sería la medida más efectiva para evitar futuros deslizamientos de este tipo en nuestras carreteras? ¿Deberíamos invertir más en estudios geotécnicos, mejorar el drenaje o implementar sistemas de alerta temprana? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios, estoy ansioso por leerlas!