viernessanto
Forero Regular
Cuando comencé la U me tuve que ir a vivir a una torre de apartamentos en Desamparados. La vara es que en otra torre vivía una guila que era renca, delgada y muy bonita. El día de la mudanza vi a la maecilla a los lejos, vineando.
Un sábado en la mañana salí a comprar el desayuno y cuando regrese me tope a la guila en la entrada del edificio, me dijo que no andaba llaves y que si le podía hacer tailgate, lo que accedí. Comenzamos a subir las escaleras y la empecé a interrogar y me conto que iba a visitar una tía que vivía en el quinto piso. Cuando llegamos al cuarto piso, en el cual estaba mi apartamento, por varas la invite a entrar. La mae titubeo un toque, pero al final acepto, por lo que pensé que el brete ya estaba hecho.
Para que agarrara confianza la invite a desayunar y encendí el televisor al que tenia conectado un betamax, lo cual ella no conocía. Me pregunto que para que servía el aparato y le dije que para ver películas, y sin decirle nada le puse un cartucho con una película porno, al estilo Saoco. Cuando comenzó la acción, la mae pelo los ojos toda interesada, para no perder detalles. Estábamos sentados en un sofá, por lo que me le empecé a arrimar poco a poco, prensándola contra el descansabrazos; y como no se quejo le comencé a besar el cuello y a tocar las tetas, y en dos toques la tenia en la cama dándole picha.
La vara se repitió varias veces y por eso me convencí que cuando a una persona con discapacidad se le brida atención y cariño, lo retribuye con creces.
Un sábado en la mañana salí a comprar el desayuno y cuando regrese me tope a la guila en la entrada del edificio, me dijo que no andaba llaves y que si le podía hacer tailgate, lo que accedí. Comenzamos a subir las escaleras y la empecé a interrogar y me conto que iba a visitar una tía que vivía en el quinto piso. Cuando llegamos al cuarto piso, en el cual estaba mi apartamento, por varas la invite a entrar. La mae titubeo un toque, pero al final acepto, por lo que pensé que el brete ya estaba hecho.
Para que agarrara confianza la invite a desayunar y encendí el televisor al que tenia conectado un betamax, lo cual ella no conocía. Me pregunto que para que servía el aparato y le dije que para ver películas, y sin decirle nada le puse un cartucho con una película porno, al estilo Saoco. Cuando comenzó la acción, la mae pelo los ojos toda interesada, para no perder detalles. Estábamos sentados en un sofá, por lo que me le empecé a arrimar poco a poco, prensándola contra el descansabrazos; y como no se quejo le comencé a besar el cuello y a tocar las tetas, y en dos toques la tenia en la cama dándole picha.
La vara se repitió varias veces y por eso me convencí que cuando a una persona con discapacidad se le brida atención y cariño, lo retribuye con creces.