¡Ay, Dios mío! La Asamblea Legislativa sigue dando vuelta en círculo con el tema de las jornadas laborales 4x3. Después de meses de discusiones, parece que seguimos más perdidos que un chancho en ferretería. Ahora, con el retorno del expediente 24.290 al Plenario este lunes, toca lidiar con una pila monumental de mociones pendientes – ¡casi dos mil de fondo y más de dos mil quinientas de revisión! Uno se pregunta si realmente van a llegar a algún lado con tanto rodeo.
Para ponerle contexto, la vía rápida para estas jornadas, que prometían alivio para algunos trabajadores, fue aprobada hace unos meses, pero desde entonces ha sido un torbellino de mociones y demoras. Parece que algunos diputados han convertido la discusión en un juego político, usando las mociones como arma para frenar el avance de la ley. ¡Qué despiche!, porque al final, son los ciudadanos quienes terminan perjudicados.
Ahora, el Plenario va a tener que adoptar un ritmo acelerado si quiere procesar todas esas mociones. Las sesiones serán dobles, de 9 de la mañana a 12 del mediodía y luego de 2:45 de la tarde a 7 de la noche. Imaginen la cara de cansancio de los diputados al final del día, ¡pero vaya, ellos deberían acostumbrarse! Porque estos temas no se resuelven solos, requieren trabajo duro y compromiso.
Pero ahí no termina la novela. El partido PUSC, buscando una solución exprés, ha presentado un nuevo proyecto, el expediente 25.224, también con jornadas 4x3, y quieren sacarlo adelante utilizando el famoso “artículo 234 bis”, que agiliza el trámite legislativo. Dicen que creen que es la forma más rápida de desenredar el asunto y desbloquear otros proyectos importantes. Ojalá tengan razón, porque la paciencia del pueblo se está agotando.
Este artículo 234 bis es como una especie de botón de reinicio para el proceso legislativo, permitiendo limitar las mociones, establecer plazos más cortos y básicamente darle prioridad a ciertos expedientes. Pero claro, no todos están de acuerdo. El PLN, que antes parecía estar a favor, ahora anda con la guardia alta, dudando si apoyar esta jugada política. ¡Qué sal!, porque eso demuestra que las cosas pueden cambiar rápido en la arena política.
Y es que toda esta dinámica nos recuerda a la discusión sobre la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, conocida popularmente como el “plan fiscal”. En aquel momento, también se usó el artículo 234 bis para aprobarla rápidamente. Parece que algunos diputados le tienen cariño a esta herramienta para sacar adelante los proyectos que les interesan… aunque no siempre sea lo mejor para el país. Los tiempos apremian y parece que la necesidad está llevando a tomar decisiones apresuradas.
De cualquier manera, la pelota está en el techo de los diputados. Tienen una oportunidad de demostrar que pueden trabajar juntos, dejando de lado diferencias partidistas y priorizando el bienestar de la población. Sino, seguiremos arrastrando los pies y viendo cómo la economía se estanca y los problemas sociales se agravan. ¡Qué torta sería que no logren ponerse de acuerdo!
Con tanto lío legal y político, uno no sabe qué esperar. ¿Lograrán los diputados aprobar alguna de estas propuestas? ¿Seguirán enredándose en mociones interminables o encontrarán una salida a este brete? Y lo más importante, ¿cómo afectará todo esto a los trabajadores y a la economía del país? ¿Ustedes, colegas del foro, creen que este nuevo intento por impulsar las jornadas 4x3 tendrá éxito o será otro fiasco legislativo?
Para ponerle contexto, la vía rápida para estas jornadas, que prometían alivio para algunos trabajadores, fue aprobada hace unos meses, pero desde entonces ha sido un torbellino de mociones y demoras. Parece que algunos diputados han convertido la discusión en un juego político, usando las mociones como arma para frenar el avance de la ley. ¡Qué despiche!, porque al final, son los ciudadanos quienes terminan perjudicados.
Ahora, el Plenario va a tener que adoptar un ritmo acelerado si quiere procesar todas esas mociones. Las sesiones serán dobles, de 9 de la mañana a 12 del mediodía y luego de 2:45 de la tarde a 7 de la noche. Imaginen la cara de cansancio de los diputados al final del día, ¡pero vaya, ellos deberían acostumbrarse! Porque estos temas no se resuelven solos, requieren trabajo duro y compromiso.
Pero ahí no termina la novela. El partido PUSC, buscando una solución exprés, ha presentado un nuevo proyecto, el expediente 25.224, también con jornadas 4x3, y quieren sacarlo adelante utilizando el famoso “artículo 234 bis”, que agiliza el trámite legislativo. Dicen que creen que es la forma más rápida de desenredar el asunto y desbloquear otros proyectos importantes. Ojalá tengan razón, porque la paciencia del pueblo se está agotando.
Este artículo 234 bis es como una especie de botón de reinicio para el proceso legislativo, permitiendo limitar las mociones, establecer plazos más cortos y básicamente darle prioridad a ciertos expedientes. Pero claro, no todos están de acuerdo. El PLN, que antes parecía estar a favor, ahora anda con la guardia alta, dudando si apoyar esta jugada política. ¡Qué sal!, porque eso demuestra que las cosas pueden cambiar rápido en la arena política.
Y es que toda esta dinámica nos recuerda a la discusión sobre la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, conocida popularmente como el “plan fiscal”. En aquel momento, también se usó el artículo 234 bis para aprobarla rápidamente. Parece que algunos diputados le tienen cariño a esta herramienta para sacar adelante los proyectos que les interesan… aunque no siempre sea lo mejor para el país. Los tiempos apremian y parece que la necesidad está llevando a tomar decisiones apresuradas.
De cualquier manera, la pelota está en el techo de los diputados. Tienen una oportunidad de demostrar que pueden trabajar juntos, dejando de lado diferencias partidistas y priorizando el bienestar de la población. Sino, seguiremos arrastrando los pies y viendo cómo la economía se estanca y los problemas sociales se agravan. ¡Qué torta sería que no logren ponerse de acuerdo!
Con tanto lío legal y político, uno no sabe qué esperar. ¿Lograrán los diputados aprobar alguna de estas propuestas? ¿Seguirán enredándose en mociones interminables o encontrarán una salida a este brete? Y lo más importante, ¿cómo afectará todo esto a los trabajadores y a la economía del país? ¿Ustedes, colegas del foro, creen que este nuevo intento por impulsar las jornadas 4x3 tendrá éxito o será otro fiasco legislativo?