La historia comienza un fin de semana en que tenía que ir al cumple de mi sobrino, una fiesta infantil de esas con carajillos corriendo por todo lado, música infantil, juegos y todo lo que hay usualmente.
En dicha fiesta había bastante gente, entre ellos Stephanie la mamá de una compañera de la escuela de mi sobrino, ella una chica de 34 años, buen cuerpo para tener dos hijos, cara bonita y muy coqueta.
No la conocía pero ese día que estábamos en la fiesta la salude al llegar, noté de inmediato una mirada diferente, lo cuál se repitió durante la fiesta en muchas ocasiones, eso llevo a qué coincidieramos en varios momentos y lugares dentro de la casa, cada vez acompañado de esa mirada y una sonrisa.
En la dinámica de la fiesta me animé a hablarle, no sé ni qué le dije pero era algo de los niños, ella me respondió con un: sí son terribles a lo que yo dije: pero la suya es bien portada, seguro como la mamá! La mae me volvió a ver con mirada de ajá y seguimos el tema, ya avanzada la fiesta la mae me preguntó por un baño así que la lleve al de arriba, ahí le dije donde era y la esperé afuera, una vez que ella terminó le dije voy yo que también lo necesito, a lo que ella me dijo: si ocupa ayuda me dice! Eso detonó todo, en ese momento le dije venga entonces, la mae entro y empezamos a apretar, la mae decidida me empezó a tocar la verga a lo que yo de una empece a meterle mano, le toque los pechos por encima de la blusa, estaban ricos y bien firmes, de inmediato la tome de las nalgas y la pegué lo más que pude hacía mí, en ese momento valió una verga que hubiera gente abajo y estuvieran en media fiesta, seguimos apretando y la mae gemía levemente cada vez que le apretaba los pechos, me animé y le agarré toda la pepa por encima del pantalón, estaba bien rica, se sentía el calor y humedad así que le meto la mano por dentro y logré sentirla, bien rica, carnudita, depilada, labios gruesos y olía a gloria.
Empecé a meterle el dedo y estimular su clítoris de forma delicada, la mae comenzó a temblar y gemir más rico, la tenía bien trabajada cuándo de pronto sentí como se vino en mi mano, está de más decir que no cogimos en ese momento pero después de ese primer encuentro era obvio que iba a suceder, eso se los dejo para un siguiente relato.
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En dicha fiesta había bastante gente, entre ellos Stephanie la mamá de una compañera de la escuela de mi sobrino, ella una chica de 34 años, buen cuerpo para tener dos hijos, cara bonita y muy coqueta.
No la conocía pero ese día que estábamos en la fiesta la salude al llegar, noté de inmediato una mirada diferente, lo cuál se repitió durante la fiesta en muchas ocasiones, eso llevo a qué coincidieramos en varios momentos y lugares dentro de la casa, cada vez acompañado de esa mirada y una sonrisa.
En la dinámica de la fiesta me animé a hablarle, no sé ni qué le dije pero era algo de los niños, ella me respondió con un: sí son terribles a lo que yo dije: pero la suya es bien portada, seguro como la mamá! La mae me volvió a ver con mirada de ajá y seguimos el tema, ya avanzada la fiesta la mae me preguntó por un baño así que la lleve al de arriba, ahí le dije donde era y la esperé afuera, una vez que ella terminó le dije voy yo que también lo necesito, a lo que ella me dijo: si ocupa ayuda me dice! Eso detonó todo, en ese momento le dije venga entonces, la mae entro y empezamos a apretar, la mae decidida me empezó a tocar la verga a lo que yo de una empece a meterle mano, le toque los pechos por encima de la blusa, estaban ricos y bien firmes, de inmediato la tome de las nalgas y la pegué lo más que pude hacía mí, en ese momento valió una verga que hubiera gente abajo y estuvieran en media fiesta, seguimos apretando y la mae gemía levemente cada vez que le apretaba los pechos, me animé y le agarré toda la pepa por encima del pantalón, estaba bien rica, se sentía el calor y humedad así que le meto la mano por dentro y logré sentirla, bien rica, carnudita, depilada, labios gruesos y olía a gloria.
Empecé a meterle el dedo y estimular su clítoris de forma delicada, la mae comenzó a temblar y gemir más rico, la tenía bien trabajada cuándo de pronto sentí como se vino en mi mano, está de más decir que no cogimos en ese momento pero después de ese primer encuentro era obvio que iba a suceder, eso se los dejo para un siguiente relato.
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