¡A darle má! Parece mentira, pero la Junta de Pensiones y Jubilaciones del Magisterio Nacional (JUPEMA) acaba de agarrarle el rollo a la sostenibilidad, y vaya que le agarraron. Resulta que el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) les dio una palmadita en la espalda – o mejor dicho, un galardón– por su desempeño ambiental. Esto es grande, muchachos, porque no todos los días vemos a una institución pública romperla así en temas de cuidar el planeta.
Para ponerle punta a la historia, JUPEMA alcanzó un impresionante 93,26% en la evaluación del Programa de Gestión Ambiental Institucional (PGAI) 2024. Eso, mis queridos lectores, significa que se metieron en la franja “verde +”, que es el nivel más alto del programa. En plan, llegaron pa’ arriba, dejaron atrás a muchos otros, y demostraron que sí se puede hacer bien las cosas combinando responsabilidades financieras con cuidado del medio ambiente. No es fácil, eh, administrar pensiones y además preocuparse por reciclar el cartón… ¡pero ellos lo lograron!
Y no es que se levantaron un día y dijeron “ahora sí, nos ponemos verdes”. Según cuenta la nota, esto es fruto de un trabajo constante y organizado. Desde la creación de una Comisión Ambiental Institucional, encargada de velar por las metas del programa, hasta implementar acciones concretas como bajar el consumo de luz, agua y papel – cosas que cualquiera podría hacer en casa, pero que en una institución grande hacen una diferencia considerable. Además, pusieron sistema de clasificación y reciclaje de residuos. ¡Así se hace, mae!
Pero no crean que ahí quedó la cosa. También anduvieron dando capacitaciones a sus empleados para que aprendieran a ser más conscientes y responsables con el medio ambiente. Imagínense, explicando a maestros jubilados cómo separar la basura orgánica de la inorgánica... ¡eso sí es reto! Y, por si fuera poco, incorporaron lineamientos ambientales en todas sus compras y operaciones. En fin, hicieron limpieza general en todos los frentes, y el resultado habla por sí mismo.
Carlos Arias, el director ejecutivo de JUPEMA, lo expresó muy bien: “La sostenibilidad no es solo una meta operativa, es un compromiso ético y un valor institucional”. Dijo eso con razón, porque este reconocimiento no es solo un trofeo bonito, sino la prueba de que están haciendo las cosas bien. Y no solo benefician a los pensionados, sino también al país entero, ya que contribuyen a cuidar nuestros recursos naturales.
Este logro de JUPEMA es un ejemplo para otras instituciones públicas, y demuestra que la sostenibilidad no es solamente para empresas privadas o ONGs. Las entidades gubernamentales también pueden y deben andar a la vanguardia en estos temas. Que sirva de inspiración para que otros entiendan que invertir en el medio ambiente es invertir en el futuro de Costa Rica.
Ahora, algunos dirán que esto es pura campaña publicitaria, que buscan quedar bien antes de las próximas elecciones. Pero bueno, yo prefiero pensar que realmente se esforzaron por mejorar y que este reconocimiento es merecido. Al final, lo importante es que están cuidando el planeta, aunque sea un poquito. Y en estas épocas, cualquier grano de arena cuenta, ¿verdad?
En fin, felicidades a JUPEMA por este gran logro. ¡Qué nivel! Ahora me pregunto, ¿creen ustedes que otras instituciones públicas deberían seguir el ejemplo de JUPEMA e invertir más en programas de sostenibilidad? ¿O piensan que es mejor enfocarse en resolver problemas más urgentes como la seguridad social y la salud? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!
Para ponerle punta a la historia, JUPEMA alcanzó un impresionante 93,26% en la evaluación del Programa de Gestión Ambiental Institucional (PGAI) 2024. Eso, mis queridos lectores, significa que se metieron en la franja “verde +”, que es el nivel más alto del programa. En plan, llegaron pa’ arriba, dejaron atrás a muchos otros, y demostraron que sí se puede hacer bien las cosas combinando responsabilidades financieras con cuidado del medio ambiente. No es fácil, eh, administrar pensiones y además preocuparse por reciclar el cartón… ¡pero ellos lo lograron!
Y no es que se levantaron un día y dijeron “ahora sí, nos ponemos verdes”. Según cuenta la nota, esto es fruto de un trabajo constante y organizado. Desde la creación de una Comisión Ambiental Institucional, encargada de velar por las metas del programa, hasta implementar acciones concretas como bajar el consumo de luz, agua y papel – cosas que cualquiera podría hacer en casa, pero que en una institución grande hacen una diferencia considerable. Además, pusieron sistema de clasificación y reciclaje de residuos. ¡Así se hace, mae!
Pero no crean que ahí quedó la cosa. También anduvieron dando capacitaciones a sus empleados para que aprendieran a ser más conscientes y responsables con el medio ambiente. Imagínense, explicando a maestros jubilados cómo separar la basura orgánica de la inorgánica... ¡eso sí es reto! Y, por si fuera poco, incorporaron lineamientos ambientales en todas sus compras y operaciones. En fin, hicieron limpieza general en todos los frentes, y el resultado habla por sí mismo.
Carlos Arias, el director ejecutivo de JUPEMA, lo expresó muy bien: “La sostenibilidad no es solo una meta operativa, es un compromiso ético y un valor institucional”. Dijo eso con razón, porque este reconocimiento no es solo un trofeo bonito, sino la prueba de que están haciendo las cosas bien. Y no solo benefician a los pensionados, sino también al país entero, ya que contribuyen a cuidar nuestros recursos naturales.
Este logro de JUPEMA es un ejemplo para otras instituciones públicas, y demuestra que la sostenibilidad no es solamente para empresas privadas o ONGs. Las entidades gubernamentales también pueden y deben andar a la vanguardia en estos temas. Que sirva de inspiración para que otros entiendan que invertir en el medio ambiente es invertir en el futuro de Costa Rica.
Ahora, algunos dirán que esto es pura campaña publicitaria, que buscan quedar bien antes de las próximas elecciones. Pero bueno, yo prefiero pensar que realmente se esforzaron por mejorar y que este reconocimiento es merecido. Al final, lo importante es que están cuidando el planeta, aunque sea un poquito. Y en estas épocas, cualquier grano de arena cuenta, ¿verdad?
En fin, felicidades a JUPEMA por este gran logro. ¡Qué nivel! Ahora me pregunto, ¿creen ustedes que otras instituciones públicas deberían seguir el ejemplo de JUPEMA e invertir más en programas de sostenibilidad? ¿O piensan que es mejor enfocarse en resolver problemas más urgentes como la seguridad social y la salud? ¡Déjenme sus opiniones en los comentarios!