Maes, pónganse cómodos porque la vara en la Asamblea Legislativa está para comerse las uñas. Resulta que el Gobierno tiene una fijación casi poética con su proyecto estrella: la famosa megacárcel. Quieren darle el banderazo de salida a la construcción este mismo 2025 y para eso, lógicamente, ocupan plata. Unos ¢8.000 milloncitos para empezar, para ser exactos. La solución que encontraron fue un proyecto de ley para hacer un rompecabezas con el presupuesto, moviendo fichas de un lado a otro como si fuera un tetris financiero.
El plan es raspar platica del Ministerio de Seguridad (más de ¢4.100 millones), del MOPT y hasta del propio Ministerio de Hacienda para juntar el primer pago de la obra. El ministro de Hacienda, Rudolf Luke, salió a decir que todo está fríamente calculado, que es el 40% del valor del proyecto y que la vara ya está en la carpeta de Mideplan. Suena bien, ¿verdad? Un plan maestro para atacar la criminalidad. Pero aquí es donde la trama se complica y empieza el despiche de verdad.
El problema, y es un problemón, es que en la misma jugada presupuestaria Hacienda se jaló una torta monumental. Aparte de los traslados para la cárcel, metieron un movimiento de ¢24.000 millones que le quitan al FODESAF para dárselos al BANHVI. ¿La consecuencia directa? Le meten un hachazo durísimo a las becas post secundaria del IMAS y a las pensiones del régimen no contributivo. O sea, para que quede claro: por un aparente error que hasta la Contraloría les señaló, cientos de estudiantes y adultos mayores se podrían quedar guindando. El propio texto del proyecto lo admite: si esto se aprueba así como está, desde octubre casi 400 estudiantes dejarían de recibir su beca, y para noviembre y diciembre, el número sería cero. ¡Cero!
Como era de esperarse, en Cuesta de Moras se armó la gorda. El diputado Carlos Felipe García, del PUSC, pegó el grito al cielo porque declararon todo el proyecto de la cárcel "confidencial". Nadie sabe dónde la van a construir, cuánto va a costar al final, ni un solo detalle. Por su parte, Eli Feinzaig, del PLP, fue todavía más filoso y dijo que esa confidencialidad lo que huele es a que no hay plan, que no hay nada, y que el Gobierno solo quiere la plata para salir a poner la primera piedra o, si se la rechazan, para echarle la culpa a los diputados de que "no los dejan hacer el brete". Un juego político en toda regla, usando la seguridad como ficha.
Mientras tanto, la oposición en bloque está que echa chispas, pero por el tema social. Paulina Ramírez, la presidenta de la Comisión de Hacendarios, lo dijo clarito: "eso es inaceptable". Su preocupación la comparten desde el Frente Amplio hasta otros diputados del PLN. La frase de Ramírez que resume el sentir de muchos es lapidaria: “No se vale que no hayan podido resolver, vía otra modificación, para solventar este error”. Diay, tienen toda la razón. Y la cereza del pastel es que ahora Hacienda dice que "están analizando" cómo reasignar la plata para arreglarlo, probablemente con otro presupuesto extraordinario. En otras palabras: armaron un enredo y ahora necesitan otro enredo para tratar de solucionar el primero. Una eficiencia que asusta.
Mae, ¿qué opinan ustedes? ¿Se justifica este enredo por la megacárcel o es una muestra más de que la mano derecha no sabe lo que hace la izquierda en el Gobierno? ¿Prioridad a la seguridad a cualquier costo o se están volando con los más necesitados?
El plan es raspar platica del Ministerio de Seguridad (más de ¢4.100 millones), del MOPT y hasta del propio Ministerio de Hacienda para juntar el primer pago de la obra. El ministro de Hacienda, Rudolf Luke, salió a decir que todo está fríamente calculado, que es el 40% del valor del proyecto y que la vara ya está en la carpeta de Mideplan. Suena bien, ¿verdad? Un plan maestro para atacar la criminalidad. Pero aquí es donde la trama se complica y empieza el despiche de verdad.
El problema, y es un problemón, es que en la misma jugada presupuestaria Hacienda se jaló una torta monumental. Aparte de los traslados para la cárcel, metieron un movimiento de ¢24.000 millones que le quitan al FODESAF para dárselos al BANHVI. ¿La consecuencia directa? Le meten un hachazo durísimo a las becas post secundaria del IMAS y a las pensiones del régimen no contributivo. O sea, para que quede claro: por un aparente error que hasta la Contraloría les señaló, cientos de estudiantes y adultos mayores se podrían quedar guindando. El propio texto del proyecto lo admite: si esto se aprueba así como está, desde octubre casi 400 estudiantes dejarían de recibir su beca, y para noviembre y diciembre, el número sería cero. ¡Cero!
Como era de esperarse, en Cuesta de Moras se armó la gorda. El diputado Carlos Felipe García, del PUSC, pegó el grito al cielo porque declararon todo el proyecto de la cárcel "confidencial". Nadie sabe dónde la van a construir, cuánto va a costar al final, ni un solo detalle. Por su parte, Eli Feinzaig, del PLP, fue todavía más filoso y dijo que esa confidencialidad lo que huele es a que no hay plan, que no hay nada, y que el Gobierno solo quiere la plata para salir a poner la primera piedra o, si se la rechazan, para echarle la culpa a los diputados de que "no los dejan hacer el brete". Un juego político en toda regla, usando la seguridad como ficha.
Mientras tanto, la oposición en bloque está que echa chispas, pero por el tema social. Paulina Ramírez, la presidenta de la Comisión de Hacendarios, lo dijo clarito: "eso es inaceptable". Su preocupación la comparten desde el Frente Amplio hasta otros diputados del PLN. La frase de Ramírez que resume el sentir de muchos es lapidaria: “No se vale que no hayan podido resolver, vía otra modificación, para solventar este error”. Diay, tienen toda la razón. Y la cereza del pastel es que ahora Hacienda dice que "están analizando" cómo reasignar la plata para arreglarlo, probablemente con otro presupuesto extraordinario. En otras palabras: armaron un enredo y ahora necesitan otro enredo para tratar de solucionar el primero. Una eficiencia que asusta.
Mae, ¿qué opinan ustedes? ¿Se justifica este enredo por la megacárcel o es una muestra más de que la mano derecha no sabe lo que hace la izquierda en el Gobierno? ¿Prioridad a la seguridad a cualquier costo o se están volando con los más necesitados?